Unexpected Love 2: Siempre Juntos

10. El plan de Oliver

Niall:

Desperté, no tenía ni la menor idea de que hora era o donde estaba. Tenía cerveza derramada sobre toda mi sudadera, mis manos estaban pegajosas y olían a humo. Estaba recostado sobre un sofá, me senté y parpadee varias veces para mejorar mi visión. En el suelo sobre una alfombra sucia y algo descolorida descansaban Colin y Bruce, quién tenía una botella de whisky en su mano derecha. Y Colin se aferraba a la cajetilla de cigarrillos vacía. Mark estaba dormido sobre un sofá para una persona, con los brazos cruzados. Creo que fue él quien nos trajo aquí, debe ser su casa. Me puse de pie buscando el baño, no quería terminar oliendo a mierda. Lo encontré e hice lo que nadie más puede hacer por mí. Fui a la cocina y busque un vaso con agua. Para luego preparar un café bien cargado para los cuatro, no me embriagaba así desde hace tiempo.

Vi el reloj que colgaba en un muro de la cocina, eran las diez de la mañana. Y hoy era… ¿lunes? ¡Maldición! El ensayo, las firma de autógrafos, la entrevista y la cita de trabajo. Ahora entiendo porque ____ detesta tanto los lunes, esperen ¿dónde está mi celular? Estoy seguro de que estaba aquí, digo y me toco el bolsillo izquierdo. ¿Y las llaves de mi auto? ¿Cómo voy a llegar a tiempo? ¿Qué rayos voy a hacer?

-Hola- dice Mark bostezando. –Despertaste, disculpa el desorden, es que vivo solo. Y preparaste café, gracias- dice y se sirve una taza de café.

-No te preocupes ¿dónde estamos?

-Estamos a una hora de un viaje en auto hacia el centro ¿por qué preguntas?- dice extrañado.

-Tengo mucho que hacer, lo de ayer fue algo inesperado. Dales las gracias a los demás y también te agradezco a ti por escucharme anoche. Necesitaba algo de compañía.

-De nada, siempre tengo que cuidar a esos dos- se quejo Mark. –Son unos niños, dicen que nunca volverán a estar con una chica y cuando ven a cualquiera por ahí, se van corriendo detrás de ella. Dales una semana o dos y ya las verás con alguna “novia” me siento mal por ellos, aún no superan a Meredith ni a Amy.

-¿Viste las llaves de mi auto?- pregunté. –No logro recordar donde las puse.

-Deje tu auto en la cochera, aquí están tus llaves. No sé como fui capaz de traerlos a los tres aquí. Realmente fue un gran esfuerzo.

-Discúlpame si te cause algún inconveniente- dije encogiéndome de hombros –casi nunca me embriago hasta quedar así.

-Descuida, el problema no fuiste tú. El verdadero problema fue traer a Bruce… Bebió demasiado  y  se puso tan terco, básicamente tuve que arrástralo hasta aquí. Es pequeño, pero si hubieras visto como peleo para que no lo sacara del karaoke. Literalmente parecía que se había pegado a la columna del lugar. Fue muy gracioso, sin embargo agotador.

-¿Y yo como me porte?

-Estabas tranquilo, pero hubo un momento en que entraste en shock y solo balbuceabas… Un nombre.

-¿Un nombre?

-Sí, era un nombre de chica. Era ____. No dejabas de repetir ese nombre y decías que la amas. Que Ethan era un completo imbécil y cosas así. Y algo sobre tu celular.

-¿Mi celular?

-Sí, dijiste que lo dejaste en tu casa.

____:

Ya pasan de las cinco de la mañana y no pude pegar un ojo en toda la noche gracias a Niall. Ni una señal de que está vivo o de que me extraña o de que me detesta por ser una completa idiota al romper la promesa. Todo estaba tan bien, ahora tengo miedo. Me atemoriza la idea de que podría llegar a perderlo, al final que tengo yo… no soy ni la más hermosa, talentosa o excepcional persona de este mundo, si Niall me deja es posible que me olvide en menos de dos días. Así que las cosas son mucho más fáciles para él, tiene a cientos de chicas detrás de él ¿por qué no dudaría en reemplazarme? Pero la culpa no es completamente mía, tengo que darle algo de crédito a Ryan. Si el cretino, curiosamente el cretino que siempre aparece frente a mí y me saca de mis casillas. El cretino que distrae mis pensamientos de Niall. El cretino que me dice que mi novio es un estúpido por estar conmigo, el único cretino que encuentro atractivo.