One-Shot: En casa de papá.

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— Percy tiene unos ojos muy lindos — Dijo uno de sus hermanos tratando de imitar la voz de Annabeth.

— Percy es muy valiente.

— Percy es una gran persona.

Yo sólo miraba a Annabeth, que parecía bastante concentrada en pensar como hacer callar a sus hermanos.

— Ya entendimos el punto — Murmuró Annabeth.

— ¿Eres el novio de Annabeth? — Preguntó uno de sus hermanos.

Pero en ese momento, llegó la Sra. Chase con una bandeja de galletas que se veían tan pálidas, les faltaba color, azul, por ejemplo.

— Bobby, Matthew, ellos son sólo amigos, ahora, ya no los incomoden — Dijo la señora Chase, recibiendo un 'Si mamá' de parte de los gemelos.

Mientras tanto, Annabeth y yo compartimos una mirada rápida.

— Sra. Chase, por eso esta... — Fui interrumpido por Annabeth. 

— ¿Crees que mi padre tarde mucho? — Preguntó Annabeth.

— No lo creo Annabeth, en unos minutos más. Ahora, ¿Tienen algo que decirme? — Preguntó la señora Chase con una sonrisa.

— Si.

— No.

El 'Sí' fue de mi parte, y el 'no' de Annabeth.

— Algo huele a humo en la cocina, ¿No dejaste nada que se pudiera quemar? — Preguntó Annabeth viendo a sus hermanos jugando en el suelo de la sala.

— Las otras galletas — Dijo la Sra. Chase, haciendo su camino a la cocina.

Me giré a Annabeth que estaba jugando con su collar del campamento mestizo.

— ¿Sabes que a ella también le tenemos que decir, verdad?

— No es necesario, que se lo diga mi padre — Dijo Annabeth sin mirarme a los ojos.

— Ella trata de ser una buena persona — Dije, aunque sabía que la Sra. Chase tenía su lado malvado.

— Trata, pero no lo es.

— Annabeth, estoy contigo, estamos juntos en esto ¿De acuerdo?.

— Lo se, y en verdad te lo agradezco, no es común que los novios tomen la iniciativa para querer presentarse ante el padre de la novia.

— Si... — Dije riendo nerviosamente — No soy una persona normal — Dije riendo de verdad.

— Lo normal es un mito para los semidioses, Percy.

— Frases sabias de mi listilla, ven aquí — Dije, abriendo los brazos para abrazarla, ya que estábamos en diferentes sofás.

Soltó una pequeña risilla y se acercó a mí, se sentó a mi lado recargando su cabeza en mi hombro, abrazándonos.

— Esto no va a salir bien — Murmuró.

— ¿Por qué crees eso?

— Por ser semidioses, algo puede atacarnos y después mi madrastra llegará aquí y me gritará diciendo que pongo sus vidas en riesgo, que es mi culpa que esos monstruos ataquen, que soy una persona egoísta, que si me importara la vida de mis hermanos o de mi padre no debería de estar aquí... — Dijo Annabeth en un susurro.

— Annabeth, no es tu culpa ser quién eres, jamás debes sentirte culpable por ser una semidiosa, porque eres maravillosa, si tus padres no entienden eso, es la culpa de ellos.

— Pero es mi culpa que ataquen los monstruos.

— Pero cuando atacan, tu defiendes a tu familia, eso es increíble, no eres egoísta, si lo fueras, dejarías que los monstruos acaben con tu familia.

— Así no es como lo ven mis padres.

— Pues se pierden de mucho, eres la semidiosa más poderosa, inteligente, fuerte, valiente y muchas cosas más, que he conocido, no cambiaría nada de quién eres.

Annabeth sonrió y me iba a contestar pero fue interrumpida por una voz.

— Estoy en casa.

— Ahora o nunca — Dijo Annabeth.

¿Qué puede salir mal?

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Espero que les haya gustado! Dedicado a todas las personitas que lo están leyendo ♡

¤ Pregunta: ¿Qué creen que vaya a pasar en el sig. capítulo de Percy bebé?

ABC... Historias Percabeth ♡Where stories live. Discover now