Recuérdame [AV]

Capítulo 46: "Ojos azules"

2 meses después.

Alonso se encontraba desayunando con su adorable familia.

Su mamá era una gran cocinera, todos amaban el peculiar toque que le daba a la comida.

- Algún día deberías poner un negocio ma, esto está delicioso- El pequeño Braulio saboreó un bocado del platillo.

Columba se limitó a negar y sonreírle al pequeño.

- ¿Qué tal la escuela Brau?- le preguntó el hermano de los ojos azules.

- Muy bien, la maestra dice que soy uno de sus mejores alumnos- presumió.

Alonso sonrió.

Su hermano pequeño le recordaba tanto a él.

- Alon, mi amiga te ha mandado otra carta- le comentó Brau sin pensar.

- ¿Al fin me vas a decir quién es Brau?- le cuestionó su hermano.

- Ñop, lo que si te puedo decir es que es muy bonita Alon.

- Seguro es una coder ¿Verdad?

El pequeño negó.

Y es que hacía una más de 3 semanas que aquella misteriosa amiga le estaba enviando cartas al ojiazul.

- Te dejé la carta en tu cuarto, por si quieres leerla.

Alonso suspiró y continúo comiendo.

[....]

Cuando terminó de ofreció a llevar a Brau al escuela, debido a que le quedaba de camino a Sony.

Iban escuchando música y cantando a todo pulmón.

- Llegamos pequeño, suerte, sé siempre el mejor.

- Así como tú- Brau bajó del auto dejando una sonrisa en el rostro de su hermano.

Alonso lo observó caminar.

Se percató que de un momento a otro Brau comenzó a correr.

Y se acercó a lo que parecía era su maestra.

Ella estaba de espaldas, Brau la abrazó y comenzó a conversar con ella.

Segundos después los vió entrar al colegio.

Y arrancó el automóvil.

[....]

- Y bien, ¿Qué opinan chicos?- preguntó Sandra con interés.

- Es una gran idea- opinó Jos.

Todos asistieron.

- Siendo así, pueden retirarse. Nos vemos mañana.

Todos comenzaron a tomar sus cosas.

- Deberíamos reunirnos todos, hace mucho que no hacemos eso, vernos sólo como los grandes amigos que somos- propuso Bryan.

- No es una mala idea- le apoyó Freddy.

- Lo siento chicos, no puedo. Veré a Sof.

Los chicos comenzaron a hacer sonidos insinuando algo.

- Ya, relájense. Saben que sólo es mi amiga.

- Uy, directito a la friendzone- se burló Freddy.

- Ya ni nos pela- reclamó como limpiándose las lágrimas Canela.

- No sean payasos- rió el ojiazul.

- Ándale, ve por tu noche loca- gritó Freddy.

Las mejillas de Alonso de tornaron rosadas.

Rieron.

[....]

El ojiazul condució hasta su casa.

Abrió la puerta y dejó las llaves del auto en una mesa que había después de entrar.

Su mamá se encontraba en la cocina, acompañando a comer a Brau.

- Buenas noches ma- le saludó Alonso desde el marco de la puerta de la cocina.

Y se percató de que ellos no eran los únicos en el comedor.

Había una mujer, por cómo lucía estaba casi seguro de que era la misma que había visto en la mañana. Seguro era la maestra de Braulio.

Observó su reloj y se dio cuenta de que se le haría tarde.

- Ahorita voy a salir ma, no sé a qué hora volveré. Iré con Sof a cenar.

- Sí, no te preocupes hijo.

El ojiazul subió las escaleras, para después entrar a su recámara.

Se dió una ducha rápida y comenzó a arreglarse.

Cuando estaba observándose  en el espejo desvío la mirada y logró ver la carta de la que le había hablado Brau.

Comenzó a acomodarse el cabello.

La miró de nuevo.

Debatía en si abrirla o no.

Y bueno, dicen que la curiosidad mató al gato.

Tomó el sobre entre sus manos y lo abrió.

Para el chico de ojos azules:

Quizás ésta no sea la primer carta que abres, o tal vez sí porque las otras te han dado igual. O quizás eres tan curioso que las haz leído todas. Solamente quería desearte un lindo día, tarde o noche.

Sonríe mucho.

Créeme, si sonríes el mundo será más bonito.

Te propondré algo, por cada carta que te saque una sonrisa te deberé un chocolate.

Firma:
                                       La chica rara.

Por alguna razón Alonso no logró evitar sonreír.

- Ya tienes un chocolate- la voz de Brau irrumpió en la habitación.

El ojiazul giró los ojos.

- Te daré muchos a ti si me dices quién envía las cartas- propuso.

- Eso tendrás que descubrirlo tú hermano.

El pequeño se encaminó a la puerta y dejó a su hermano.

Alonso negó para sí mismo y colocó la carta junto a las otras.

Que sí, también había leído.

Y se dispuso a salir.

[....]

- Hola Sof- saludó el ojiazul cortésmente con un beso en la mejilla a la chica.

- Hola Alon, siempre es un gusto volver a verte- le sonrió.

Hacía aproximadamente mes y medio que estaban saliendo.

Ella no era fea.

Tenía el cabello ondulado, largo y en tonos rubios y castaños. También unos ojos muy bonitos color miel. Era una chica muy linda.

Además era muy buena onda.

Conversaron durante un largo tiempo.

Él comenzaba a sentir algún tipo de atracción por ella.

No podía negarlo.

[....]

Después de ese largo día, el castaño finalmente llegó a su casa.

Se colocó su pijama.

Se tomó un tiempo para observar la Luna de aquella noche.

Y se preguntó lo que hacía más de dos meses se preguntaba a diario.

¿Dónde estaba ____?

A pesar de todo, había una parte de él que quería volver a verla. Para preguntarle aquellas dudas que ella misma sembró.

Y además, para preguntarse a si mismo si aún sentía algo por ella.