Puras mentiras, nunca se alejaría de su novio.

Enredando sus brazos en la cintura de Taehyung, lo apegó a él, sintiendo todo el calor de su cuerpo.

—Apestas a alcohol. –murmuró Taehyung un poco molesto. Odiaba el alcohol. Cuando era pequeño, su hermano murió a causa de eso.

—Lo sé, perdóname. No volveré a tomar. –prometió, pero todos sabíamos que era una promesa que no iba a cumplir. 

Entristecido, Taehyung depositó un beso en la mejilla de Jungkook. —Hoy es nuestro último dia juntos.

—Mañana te vas a Daegu. –murmuró apenado. No quería alejarse de él. —Te voy a extrañar demasiado.

El castaño asintió con mucha tristeza en si mismo, había pasado los mejores días a su lado. Cuando se conocieron, su primer beso, escaparse en las noches a la habitación de Jungkook –para simplemente dormir en sus cálidos brazos–, escuchar los increíbles gemidos de Yoongi y Jimin, admirar las bellas facciones de su novio, quedarse hablando hasta al amanecer, decirle una y otra vez kookito y nunca cansarse, besarle sus pestañas, nariz y labios, saber que era suyo y de nadie más. Sí que habían sido unos días fascinantes.

Irse de su lado iba a ser difícil.

Pero no podía quedarse, Taehyung iba a empezar a estudiar una carrera, no tenía el suficiente dinero como para quedarse más tiempo y Jimin debía volver a su trabajo.

Era la triste realidad.

Sin decir nada, Taehyung miró la boca de Jungkook con la poca luz que había, y acercándose de manera lenta, unió sus labios en un cálido beso. —Te necesito. –susurró, pasando sus manos por el cuello de su novio, apretándolo para así profundizar el beso.

Los húmedos labios de Taehyung tenian un perfecto contacto con los de Jungkook. Era un beso tranquilo que poco a poco se volvía fugaz, el castaño atrajo a su novio más cerca de su cuerpo, queriendo más.

Sin dejar de besarse lo tomó por los muslos, llevándolo hacia el lavabo para subirlo ahí. Jungkook enredó sus piernas alrededor de las caderas de Taehyung, y poco a poco comenzó a desabotonar la camisa de este, revelando el precioso cuerpo que había visto hace a penas unas horas antes en el departamento.

Una vez que le quitó la camisa por completo, comenzó a dejar caricias por el suave cuerpo de Taehyung, depositando leves besos de vez en cuando, para luego subir a su cuello, lamiéndolo con placer y haciéndolo estremecer.

La camiseta de Jungkook comenzaba a estorbar y con un rápido movimiento Taehyung se la sacó, dejándola en el frío suelo.

Jungkook suelta un suspiro al sentir las manos de Taehyung en su fino cuerpo, tocando cada parte.

—Eres precioso. –musita Jungkook mientras sentía como las manos de su novio pasaban por su pecho, clavículas y hasta incluso cuello.

Un leve rubor se hace presente en las mejillas de Taehyung y con vergüenza se acerca al pantalón negro de Jungkook, listo para sacárselo.

En cuanto ve el bulto de su novio, la excitación empieza a crecer dentro de él. Sin abstenerse, pasa una mano y de un tirón le quita el bóxer, sorprendiendo a Jungkook.

Tecnología  «Vkook/Kookv»Where stories live. Discover now