Los Hijos de la MAFIA II

Capitulo 9.

Me quedé mirando sorprendida a la persona que estaba en frente de mí y más aun sabiendo que no escuché la puerta en ningún momento. Sentí como se me cerraba la garganta y me latía el corazón con fuerza.

El chico, sonrió enormemente, y no sabía si era por mi cara de pánico, o porque tenía una sonrisa endemoniadamente sexy e igual a alguien.

-Hola Lola...- Dio unos pasos hacia adelante. Los ojos repentinamente se me llenaron de lágrimas.

Alto...

-¿C-Cómo sabes mi nombre? –Me dolía mucho la garganta, temblaba de pies a cabeza. Su cara se transformó en preocupación.

-No, no llores... -Se acercó hasta llegar en donde estaba, y mientras más se acercaba, más me hacía recordarlo. –Lo siento, no volveré a hacerlo...- Levanté la escoba del piso rápidamente y lo apunté. Levantó las manos.

-¡No te me acerques! –Él seguía mirándome preocupado. 

Cálmate. Cálmate.

Aunque lo repitiera por más de mil veces, no lograba dejar de temblar.

-¿Q-Quién eres? –Pregunté. - ¿Por qué eres tan igual a él? – Dejó caer sus manos rápidamente y suspiró.

-No sabía que te pondrías así con sólo verme, no tenía previsto esto. Lo lamento mucho, pero te daré una pista. Yo soy quien te ha ayudado todo este tiempo. – ¿Ayudado?

-¿Eres el de los mensajes? –Le lancé. Asintió lentamente. - Y cómo es que... -

-Disculpa Lola, que haya tardado tanto. -Natalie cuando se giró, me encontró a mí, a punto de desmayarme en cualquier minuto y luego al chico. -¿Qué rayos sucede aquí? - 

-Lamento las molestias, señora. Con permiso. -Y luego se fue de la tienda sin más. 

Salí corriendo tras él.  ¡Necesitaba respuestas! ¡¿Cómo es que demonios sabía todo sobre Connor?!  ¿Sabe cosas que yo no? ¿Por qué no me dice todo de una jodida vez? Por cierto...

¿En dónde carajos estoy? 

Me frené de repente, con la escoba en la mano. Lo único que veía a mi alrededor eran árboles y más árboles. 

Genial. ¿Qué carajos hago yo acá? 

Caminé, temblorosa, agarrando fuertemente la escoba por si algo aparece. Menos mal, que todavía era de día. ¿Se imaginan estar en medio de la noche, rodeada de árboles, con una escoba en la mano y sin saber cómo diablos llegaron? Uf, que trauma. 

Segundos después de pensar eso, escuché un ruido un poco más adelante de donde yo me encontraba. 

Estaba tan asustada, que no sabía si gritar como en las películas. 

-¡¡TENGO UNA ESCOBA!!

Ay dios. Te van a matar y lo primero que se te ocurre, es decir ¿"Tengo una escoba"? En serio, Lola, ¿qué problemas tienes? 

Giré hacia la derecha y caminé todo recto, hasta llegar a una carretera. Un momento... Esto me resulta muy familiar. 

A lo lejos pude divisar un auto. Ese auto... 

Enfoqué bien la vista, y me di cuenta que ese era el auto del Dr. Smith. Respiré con tranquilidad. Esperaré hasta que llegue hasta donde yo este para hacerle señas. De la nada, escucho mi propia voz. 

-Yo... ¿Podría ver el cuerpo de mi hermano? 

-¿Para qué quieres ver el cuerpo? - ¿Eh? ¿Ese es el Dr. Smith? ¿De dónde salen todas estas voces? ¿Ya me volví loca? 

-Tal vez sólo quiera despedirme por última vez. 

-Eso no será posible. - El auto se acercaba rápidamente. Cuando pasa junto a mi, todo se vuelve más lento y me veo a mi misma con el Dr. Smith. Miro aterrorizada. Es la noche que fui a su casa por primera vez. 

-Pero quiero verlo. 

-Pero no lo harás. 

-¿y por qué no? 

-¡Por qué no y punto! 

En ese momento, no me había dado cuenta. ¿Por qué no quiere que vea el cuerpo de mi hermano? Quien estuvo conmigo toda mi vida... Ya estaba llorando. 

Todo desapareció y aparecí en casa de Natalie. Luego me vi a mi misma, bajando por las escaleras hacia la cocina. Cuando no... 

Recuerdo que cuando entré, los vi a Natalie y al Dr. con cara de preocupación. Ellos no me habían notado, así que me había escondido en las escaleras. Podía escuchar todo desde ahí. Mirando desde esta perspectiva, recordé esa noche del robo en el banco, cuando llegué a casa y espié a mis "padres", que Connor apareció al final de las escaleras. Suspiré, que nostalgia. Mis lágrimas salían y salían. 

-¿Qué haremos Jason? Tarde o temprano nos encontrarán. 

-Amor, estuvimos así desde que nacieron los niños. No creo que vengan ahora. 

-Pero la buscan. Creo que corremos peligro aquí. Deberíamos irnos. 

-Amor... -El Dr. se acercó y se abrazaron. - No te preocupes. Aquí no nos pasará nada. 

Esa noche no entendía muy bien de que hablaban exactamente. Estaba media dormida.

De pronto, todo comenzó a desaparecer y se tornó oscuro. 

-Lola...

Sentí algo húmedo y frío. 

-Lola...! Despierta! -

¿Eh? 

Abrí los ojos completamente sobresaltada. 

¿Dónde estoy? 

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Hola! 

Lamento, tanto, en serio la demora. Pero no fue un año fácil para mi, disculpen mucho tener que esperar tanto, para que yo publique un pinche capitulo. 

Sinceramente, después de mucho tiempo, espero seguir siendo la misma y que les guste la novela. Perdonen la demora. El capitulo ya está aquí. Y creo que de ahora en adelante, empezaré a subir nuevos capítulos. 

Tengo que editar todavía la primera temporada (menudos errores jajaja). No puedo creer que la novela tenga muchas leídas, ambas novelas. Es todo gracias a ustedes. Muchas gracias por todo. Me hace muy feliz, ver los comentarios de cuando voy a actualizar, porque hay gente que todavía lee mi novela. 

Y perdonen, la demora. Pero Lola está de vuelta!~ :D 

Así que, espero que les haya gustado el capitulo. Sinceramente, creo que me ha quedado muy trágico y dramático (?) Pero no es Los Hijos de la Mafia, sin un poco de tragedia xD jaja (chiste malo, perdonen :v xd) Si quieren pueden darle una estrellita ( o no :v pero mejor que si e.e okno) también pueden comentar o abuchearme, lo que prefieran jaja (estoy con los chistes hoy, perdónenme :v) 

Asi que gracias por todo <3 L@s quiero un monton. 

Adióh~