seventeen

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‹ POV NAMJOON ›

—Ayuda a bajar los paquetes de harina que hay en la camioneta, Namjoon. —ordenó mi abuela. Estaba en el restaurante ayudando a mi abuela con los cargamentos pesados.

Me subí en la parte de atrás del camión y baje el cargamento pesado con un joven acompañante, fui a llevarlos en la bodega; que ahí estaba Jin haciendo no sé qué mierda si tendría que estar en otro lado, pero ni preguntaré porque mi abuela seguramente me regaña por preguntar cosas ''estúpidas''.

Situé las cargas sobre el suelo y al hacerlo, se había roto provocando que la harina se esparciera por todos lados con el viento. La harina no se veía igual, yo a pesar de ser un cero a la izquierda en la cocina por ser nieto de una chef internacional sé la diferencia de una maldita harina y algo más. Eso no parecía harina, eso parecía cocaína.

Para salir de mis dudas, tomé con un dedo la ''harina'' y la probé. Já. A mi me están por engañar, esto es cocaína. Hice un gesto raro y miré a Jin, él me miró confundido.

—¿Qué sucede, Namjoon? —preguntó Jin— ¿Te gusta la harina?

—Esto no es harina. —dije serio y enfaticé la penúltima palabra.

—De seguro e-es una confusión....—el compañero que me acompañaba a llevar los cargamento parecía tenso, él agarró los sacos de harina e intentó llevárselos.

—lo detuve— ¿Qué haces?

—L-Lo llevaré a que lo cambien...—las pupilas de sus ojos se dilataron, sus labios comenzaron a relamerse continuamente y presté atención a sus fosas nasales que tenían algunas heridas pequeñas.

—¿A dónde? —lo miré fijamente.

Salió corriendo hacia Jin, lo agarró del cuello y lo apuntó con una jeringa al cuello.

—Deja la cocaína donde estaba o si no lo hago boleta. —habló— Nadie sabrá sobre esto, déjalo como está y nadie de aquí saldrá herido.

Jin mantuvo la calma, pero sus ojos decía otra cosa. Su peor error fue amenazarme con Jin a sus brazos con una jeringa, nadie se mete con él.

—Vamos a solucionar esto...—agarré el paquete de cocaína y se lo acerqué— Ten y suelta a Jin...

Como parecía que ese tipo estaba drogado, era obvio que tomaría la cocaína de inmediato y soltó a Jin; rápidamente alejé a Jin y tomé el cuello del drogadicto, haciendo que él soltara el paquete de cocaína y se pusiera contra la pared.

—tosió— D-Dame la coca...

—No debes traficar intercambiando la harina y la cocaína, es del siglo veinte. —apreté su cuello, con el objetivo de ahorcarlo. — Ah, y no debes meterte con un militar.

—¿Militar...?—tosió por lo que le hacía en su cuello.

—Soy militar, estúpido. —lo ahorqué.

...

—Es que casi lo matas, joder. —me regañó Jin.

Luego de eso, vinieron los policías, la ambulancia, qué sé yo. Yo sólo salí de ahí y me fui con Jin fuera de ahí. Á Jin se le notaba que seguía con miedo, tomé su mano y lo besé.

—No lo maté, él quedará unos minutos inconsciente o probablemente en coma. —jugué con sus dedos— Y verdaderamente no me importaría si lo hubiera matado, yo haría todo por ti, Jin. No me perdonaría si ese drogadicto te llegara a hacer algo.

Me miró, relamió sus labios y sonrió.

—Ay, Namjoon, por eso es que te amo mucho. —apoyó su cabeza sobre mi hombro— Muchas gracias.

—No es necesario dar las gracias, Jinnie.

—Y... ¿Qué es eso de que eres militar?

—Es verdad. Soy, bueno era militar. Mi padre es un almirante, e intentaba que yo sea lo mismo que él, pero no quise y me dediqué a otra cosa. A veces suelo ir con él para entrenar y por las dudas, ya sabes que hay muchos problemas con el norte y bueh

—Sí, lo sé. ¿Sabes algo? Yo nunca voy a entender el conflicto de Corea del Sur y el Norte, no entiendo una pija porqué siguen peleado. Hagamos el amor no la guerra.

—Están to locos.

—Como los rusos.

—Los rusos sí que están re locos. —movió su mano con la de Jin— Oye, ¿quieres tomar un helado?

—¿En serio? ¿Un maldito helado? He sido amenazado a muerte por un drogadicto que cambiaba la harina con la cocaína traficándola y ¿¡me ofreces un puñetero helado!? Un helado no me llena, quiero un pote de helado.

✖✖✖

Narrador Omnisciente.

—¿SeokJin ya está bien? —preguntó la madre de Namjoon.

—Sí, sólo se asustó un poco, nada más. —respondió tranquilo— Lo llevé hasta su departamento, luego de estar un rato charlando con él.

—No tienes que actuar así, hijo. Ya sé que tienes la suficiente fuerza, pero ¿y si lo matabas al adicto ese? A SeokJin no le agradaría tanto, además de que tu padre sea un almirante, de la moral no te salvarás.

—Pero, mamá... En serio me dio por actuar así, odio que toquen a Jin, que nos sea yo. Encima lo estaba apuntado con una jeringa eso provocó que perdiera un poco el juicio ya sabes... Hago cualquier cosa.

—Si, lo sé. Haces cualquier cosa para tener a SeokJin sano y salvo, es lo que normalmente hace uno cuando está enamorado. —su madre lo miró directamente a los ojos— Ay, Namjoon, estás perdidamente enamorado de ese jovencito. —sonrió— Por fin has encontrado a alguien, ya era hora.

—Ya, mamá. Deja de hablar sobre eso.

—¿Sobre qué? ¿Sobre lo cuánto amas a SeokJin?

—Me da pudor hablar contigo sobre Jin, una persona realmente importante para mí.

—Y ¿qué esperabas? Tengo a un hijo realmente enamorado de un joven perfecto y obviamente quiero que se cansen tengan diez hijos...

—¡Ay, mamá! Me parece que ya te zarpaste mal. Deja de hablar sobre casamientos, hijos, son muchas cosas juntas que me provocan un corto circuito en mi cerebro.

—rió— Espero que se casen rápido, porque no creo que llegue hasta los 80 años.

—No digas eso, mamá. Vas a llegar hasta los cien años.

—Sólo decía, voy a llegar hasta los cien años tomando fernet.

—Esa es la actitud, vieja.

womanizer ; namjinDove le storie prendono vita. Scoprilo ora