Capítulo 53

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Roger me había citado a las 4:30 de la tarde y había llegado poco después de las dos. Había citado a Lauren a las 2:30, quería verla antes de que él llegara, había tenido tantas cosas en la cabeza que a penas y tenía tiempo para extrañarla, pero lo hacía.

—Hey Laur. —Contesté animada.

—¡Camz un tipo grandote no me deja pasar! —Lauren gruñó. Huh, mi bebé parecía molesta.

—¿Quién?

—No tengo idea, es gordito y alto y negro, es gordialegro. —Se me salió una risa nasal.

—Déjalo, yo lo arreglo.

—Claro...

Colgué y marqué el número de Rob, le indiqué que trajera a Lauren hasta el estudio. A los pocos minutos la puerta sonó y me levanté a abrir.

—Lau-

No terminé de hablar cuando sus brazos ya estaban rodeando mi cuello con fuerza.

—¿Me extrañaste? —Pregunté divertida.

—Te extrañé mucho Camz... —Hice un ademán con la mano agradeciéndole y señalándole a Rob para que nos dejara a solas. Realmente quería disfrutar el tiempo con Lauren.

Una vez que se fue, nos separamos. Lauren traía un pantalón deportivo por arriba de los tobillos negro con gris y una camisa blanca de manga larga con una pequeña rosa en el pecho, su cabello se estaba severamente mojado como si acabase de bañarse. Su carita se veía como la de un ángel recién levantado, no sabía si realmente ella era tan hermosa como mis ojos la veían o sólo estaba muy enamorada. Coloqué seguro a la puerta y tomé la mano de Lauren guiándola hasta el escritorio.

La senté en la silla y me subí al escritorio, sentándome ahí y cuidando que no se viera nada bajo mi falda. Lauren jugaba con las mangas de su camisa floja, jalándolas o mordiéndolas mientras me veía desde abajo. Era una bebé.

—¿Qué quieres estudiar? —Pregunté con una sonrisa. Sus ojos se iluminaron. Hoy quería conocer más a Lauren.

—¡Leyes! —Dijo con emoción. Esto explicaba todos sus retweets.

—¿Cuál es tu comida favorita?

—Oh dios... Amo cualquier tipo de comida, pero me encanta el sushi.

—¿Quién es tu artista favorito? —Lauren sonrió aún más grande y sus mejillas tomaron color.

—Tú... —Mordí mi labio inferior evitando mi sonrisa.

—Aparte de mí...

—Oh, bueno... Amo a Lana del Rey y The 1975.

04:07 p.m.

Mis piernas sujetaban con fuerza las caderas de Lauren mientras ella abrazaba mi cintura y yo le sostenía las mejillas. No existían mejores besos que los suyos. No existía cosa que me gustara más que su lengua dentro de mi boca —o bueno... Podía haber un empate—, lo único que podía escucharnos era la música en el fondo.

—C-Camz t-tengo que decirte algo... —La callé besándola, pero la sentía tensa, poco después me apartó—. C-Camz...

—Puedes decírmelo después... Roger va a llegar en 20 minutos. —Lauren me tomó de los hombros y me detuvo en cuanto intenté acercarme.

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