veinte || J & J

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Veinte || J & J

"No, no le he dicho a ella." Jacy tenía su teléfono entre su oído y su hombro. Una caja azul en sus manos. Su respiración se volvió fría una vez que había  bajado las escaleras, se quedó quieta. "Tengo que colgar. Nos vemos cuando llegues."

Jacy llegó al primer piso de la casa Dane, ella no notaba como el vidrio de la ventana comenzaba a congelarse mientras dejaba la caja en el piso.

Jacy guardó su teléfono y miró curiosamente. Caminó por el pasillo, sus pies descalzos conectando con las maderas del piso. Sus hombros se relajaron una vez que llegó a la cocina. "Eres tu."

Erica parecía destrozada, su temperatura diez grados más bajos de lo normal. "¿Qué le sucedió? ¿Qué le sucedió a Boyd?"

Había pasado la marca de tres días y no se había enfermado por Boyd.

"Pasó al otro lado, Erica." Jacy entró a la cocina lentamente, su voz calma y suave.

"No, no lo hizo." Erica negó con la cabeza, llorando. "No lo haría-"

Solamente cuando un espíritu estaba realmente mal podía llorar. Era raro y no debería pasar. Era romper un limite que no debía ni ser tocado.

"¡Eso es lo que pasa!" La rubia gritó, la vasija con flores de la mesa rompiéndose. "Alguien se lo llevó."

Jacy boquiabierta, confundida.
"¿Se lo llevó? "

"¡Sí, Jacy! ¡Alguien se llevó a Boyd!"

¿Cómo un fantasma es secuestrado?

"¿Lograste ver algo?" La castaña se metió completamente a la cocina, sentándose en los asientos de la barra. Fue cuidadosa de no tocar ninguno de los vidrios ni tampoco los pétalos de rosa que había entre ellos.


"Yo, solo, yo," lloriqueó Erica. "No sé que sucedió. Estaba con el y de repente comenzó a sangrar de su pecho como cuando murió.  Entonces no estaba. Había desaparecido." Estaba respirando con dificultad, intentaba contener sus emociones mientras se agarraba de la mesada. "Lo he estado buscando desde que eso sucedió, pero él solo, no está."

Jacy no quería pensar que algo o alguien estaba des-fantasmando la ciudad, pero tenía sentido. Ella había sentido la muerte de Boyd, pero no se había enfermado al igual que con el resto de las personas. En qué mundo tenía sentido, eso no sabía, pero de alguna manera lo tenía.


"¿Por qué no respiras tranquila, E?" Jacy ofreció compasiva, "Voy a buscar información de eso, ¿Sí? Voy averiguar algo."

Erica soltó aire pesadamente, calmandose. "Okay." Asintió aprehensiva. "¿Crees que podrás encontrarlo?"

"Sé que haré lo mejor que pueda." Ella sonrió de manera reconfortante, esperando que la imágen de Erica desapareciera hasta la nada.

Había un asesino suelto, Stiles todavía no despertaba y ahora debían lidiar con secuestrador de espíritus.

Jacy fue hasta donde estaba la caja al final de las escaleras y la llevó hasta la sala de estar para sacarla del medio.

CLAIRVOYANT ↠ STILINSKI ↠ ESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora