Prólogo

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Narra ChatNoir/Adrien

Aburrido salí a dar una vuelta por la cuidad. Obviamente que como Adrien no podía hacerlo debido a las duras reglas a las que me veo atado así que me transforme en ChatNoir, él tan querido héroe de París.

Amaba esa libertad que me confería ser el protector de la cuidad. Me sentía egoísta de aprovecharme de esta situación, ser un héroe es una responsabilidad pero para mí también  supone un escape a mi vida cotidiana. De sobra se que no puedo usar mi Miraculous para mi beneficio pero Plagg nunca se opuso a que de mis largos paseos nocturnos por mero gusto. Y eso que Plagg se queja de todo.

Saltaba por los techos sin dirección alguna, inconscientemente buscando a My Lady. El corazón se me estremecía con la esperanza de cruzarla una noche y tener un furtivo encuentro más allá de nuestro trabajo de héroes. Sin embargo la posibilidad  era remota puesto que su sentido del deber era más estricto que el mio, aún así la mínima excepción a la regla me emocionaba.

Aunque a veces, lo crean o no, Ladybug no era la propiedad en mi cabeza. A veces necesitaba pensar en mí, reflexionar de mi día o mi vida, otras, solo saltaba y corría con el único pensamiento de lo bien que se siente el viento en mi cara. Hoy era el turno de Plagg de invadir mi mente. Desde la noche anterior lo veía extrañamente decaído, casi como triste o decepcionado, perdido en alguna ensoñación o anhelo quiza. Nunca lo había visto así, suspiraba al cielo sumergido en sus pensamientos. Ni cuando le ofrecí camembert extra reacciono, solo dijo: "Hay cosas más importantes que el queso" y se fue a acostar al lado de la ventana. Eso fue lo que más me extrañó y me preocupo de mi kwami.

Una sombra negra a lo lejos me saco de mis pensamientos haciendome entrar en alerta.

- Un akuma- fue lo primero que pensé- Podré ver a My Lady

Seguí al sospechoso, parecía no darse cuenta de mi presencia. A pesar de que me llevaba una gran ventaja, yo era mas rápido y conocía la zona gracias a que pasaba muchas noches  correteando por el lugar . Tomé un desvío e intercepté a quien creía era un akumatizado, haciéndolo caer con mi bastón e inmovilizandolo contra el piso. Fue entonces cuando lo note, en frente de mi había una chica con un traje muy similar al mío.

- Me lastimas Chat- afloje mi agarre sin salir de mi estupefacción - Me presento soy... Eso no importa, aún no decido nombre -movió una mano restándole importancia al asunto- Y antes que digas algo o me confundas con una especie gatuna de volpina, mi Kwami se llama... Plaggy, parece que hay otro miraculous de la mala suerte dando vueltas en París- dijo sonriendo y mostrando un anillo con una patita del mismo azul que sus ojos.

Su pelo azabache, esas dos coletas, ojos azul cielo, una dulce voz, no habia de otra...

ella...

ella es...

¡¡¡una chica totalmente original que nunca antes vi!!!


Mentira, a leguas podía reconocerla, ella era mi princesa, ella era Marinette.

Doble dosis de mala suerte [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora