CAPITULO 4

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 Cerré los ojos esperando el golpe con el bate, o lo que fuera que viniera, podía ver su sombra proyectada por la luz del farol que alumbraba el callejón, el perseguidor levantó el bate, pero un golpe se oyó, alguien aterrizó encima del pendejo, así que levante la cabeza a ver qué  pasaba.

Era otro chico, con capucha negra, noqueó al idiota del bate y luchó contra los otros 4 que quedaban. Uno de los perseguidores tenía un arma blanca, se acercó por detrás del chico encapuchado “¡Cuidado!” Fue lo único que pude gritar al chico, pero al voltear, lo único que consiguió fue que lo apuñalaran en el hombro del brazo izquierdo….. Estaba sangrando, mucha sangre, el chico encapuchado sacó el arma de su hombro y con el pie derecho le dio una patada en la cabeza al perseguidor empujándolo contra el poste de luz haciendo que este se apagar.

El chico se acercó a mí, no podía pensar, estaba completamente en shock pero no se acercó lo suficiente como para identificarlo, solo pude notar sus brillantes ojos azules y tras ello ver como se sostenía el hombro ensangrentado. El chico se acercaba cada vez más me entre en valor para decirle:

-Gracias… Por todo, pero, ¿Quién eres?

El chico se detuvo y dando un paso atrás, dio media vuelta y se fue corriendo. ¿Qué rayos fue eso? De dónde salió este loco que se lanza a pelear con una pandilla para ayudar a una completa extraña, arriesgar su vida por alguien que no conoce ¿En verdad hay ese tipo de personas en el mundo?

En unos segundos recordé mi posición, seguía en la esquina del callejón pensando en algo sin sentido, observé mi mano y estaba temblando me paré y al salir del callejón miré a ambos lados a ver s encontraba al chico de la capucha, pero desapareció.

Fui a casa y al entrar, había una mesa con una cena, y velas aromáticas con tenedores elegantes y las luces bajas.

-¿Q…Qué rayos?

Al ver la mesa estaban mamá y un señor sentados uno frente al otro.

-¡Ah! Elizabeth, pensé que llegarías… no se… más tarde –Hablaba mamá buscando excusas.

-Mamá, son las 12 de la mañana… -Respondía, quería contarle lo sucedido, pero al ver que estaba muy ocupada con un señor tan rubio que casi parecían canas decidí contárselo en algún otro momento.

-¿Esta es Elizabeth? Wao, esta tan grande –Dijo el señor extraño que tras decirlo se acercó y me dio un abrazo que casi me saca los ojos.

-Perdón… ¿Nos conocemos? –Decía mientas trataba de tomar el aire que ya no estaba en mis pulmones.

-Si, bueno, él te conocía a ti, el es el señor Roller, cuando eras pequeña, era el vecino de al lado en la casa de Miami, tenías solo 4 años –Contestó mamá por el señor.

-Y… veo que tienen una cita –Dije mientras subía las cejas y hundía la barbilla hacia abajo.

-Más bien una reunión de trabajo, tu madre trabajara en mi compañía, JUST1S, es una revista de moda.

¿Él es el dueño de la compañía JUST1S? Siempre me encantó esa revista, la leía desde la primera que salió hace unos 5 o 4 años.

-¿Elizabeth? ¿Dónde está la cartera que te regalé de cumpleaños? –Preguntó mamá.

Después de mamá preguntar esto mostré desinterés en el nuevo trabajo de mamá y respondí –Larga historia –Mientras me dirigía a mi habitación.

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Soñé con el chico encapuchado, sus ojos me resultaron totalmente familiares, en mi sueño vi sus ojos brillantes en lo negro de su capucha y luego en su lugar había cambiado la imagen totalmente por una de Logan… NO PUEDE SER QUE IDIOTA.

Me levanté rápidamente sudando.

-El chico encapuchado era Logan… - Pensándolo mejor, Logan no dejaba ni diez minutos que me dejaba sola y además pudo haber llegado de camino a su casa y me vio entrando al callejón ¡Es lógico!

Asomé mi cabeza en la puerta principal esperando señales de vida de la casa de enfrente hasta que vi que Logan salía con una caja en manos. Salí corriendo de casa haciendo que pareciera “Casualidad” de encuentro en la calle.

-¡Oh! Logan que coincidencia verte por acá…-Grité al otro lado de la cera.

Logan miró a ambos lados de la calle antes de cruzar y llego trotando hasta mí.

-Hey, ¿Qué cuentas? –me preguntó.

-Nada acá paseando un poco…-Si hay algo en lo que no soy buena, es mintiendo, digo, nunca tuve que hacerlo en mi vida.

-Ah ¿Si? Lindas pantuflas –Dijo mientras se fijaba en mis pies, salí tan rápido de casa que ni cuenta me di de lo que llevaba puesta encima, tenía hasta dos ridículas coletas.

-Ahh…-Me sonrojé y empecé a toser para cambiar el tema –y… ¿Qué llevas en la caja?

-¿Quieres ver? –Me dijo con una expresión de felicidad en el rostro.

Asentí con la cabeza mientras que dirigí mi mirada a la caja. Al abrirla se encontraba un perrito bebé negro con una mancha marrón que cubría un ojo y una oreja, totalmente hermoso...

-Debo encontrarle dueño, lo encontré hace como dos semanas y lo tenía oculto, pero mamá recientemente lo descubrió, me tiró un zapato en la cabeza y me dijo que lo devolviera.

-tu mamá no parece de las que gustan de los animales.

-Realmente… no –Tiró una carcajada y volvió a tapar la caja.

Vi su rostro y como miraba el cachorro antes de cerrarle la caja.

-Si quieres puedo quedármelo –Dije mientras paraba de caminar.

-¿Hablas enserio? –Paró de caminar y se puso en frente mío.

-Digo, tengo un gato, pero nunca se sabe si se pueden llevar bien.

Al decir esto sonrió de oreja a oreja a oreja diciendo “¡Gracias!“  Y luego tomó en un brazo la caja y con el otro me acercó a él dándome un abrazo. Me sonrojé totalmente, me dio la caja y se fue corriendo a su casa.

No pude ni preguntarle si su brazo seguía bien después de la apuñalada de ayer.

En verdad, soy pésima con los perros, a los 13 años tuve uno y casi lo ahogaba mientras lo bañaba, y era un pastor alemán, por eso tengo un gato, se bañan solos, solo le dije que podía quedármelo porque su cara de decepción me deprimía.

Me miré de pies a cabeza, no recordaba que andaba en pantuflas y coletas, fui corriendo casa, puse al perro en una esquina de mi habitación, ahora no sé cómo empañármelas para  hacer con un perro y un gato.

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Ahora si estaba decente, me puse unos leguins negros con rayas triangulares blancas, un abrigo gris con un encaje vintage en la espalda y unos tenis negros.

Salí de casa y estaba súper feliz por ir a visitar la casa de Logan pero al salir de casa, vi que estaba llegando a su casa con una chica, pensé que era su amiga, hasta que se pararon en frente de la puerta y se besaron…

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CHICOS, todavía no a pasado lo interesante, TENGO TANTAS IDEAS EN LA CABEZA QUE SIENTO QUE VOY A EXPLOTAR, no pueden perdérselo!!! Porfavor SIGAN Comentando y votando, todos y cada uno de tus votos valen la pena ;*

Chau!!! xoxo

Beautiful Contact [Logan Lerman Vs Jamie Campbell]Where stories live. Discover now