De Libros a SEXO: Entre el Amor y el Odio

CAPITULO 7 "Revelaciones"

Llegó lo que esperaban... Navidad y fin de año han pasado y todas las reuniones familiares. Ahora solo queda trabajar y estudiar. En esta semana estaré subiendo actualización de mis otras historias :D

POV HyungJun

-Era él. ¿Verdad? –dice una de las mujeres tomando un trozo de tarta.

-sí era él. –esta vez habla Anastasia. –pero no importa.

-eso crees. Evangeline es nuestra amiga. –Madeline dice algo molesta. –no creo que sea correcto que su futuro esposo este en un hotel con su... amante. –susurra la última palabra.

¿Futuro esposo? ¿De quién están hablando?

-eso no lo sabemos. –dice Anastasia. –y no importa. Tú conoces como funciona esto. No es que ellos se amen o algo por el estilo. –la mujer rubia que no recordaba su nombre habla esta vez.

-aunque es verdad. Eli se casará en unos meses y no es correcto que este enseñando a su amante. –toma a ambas mujeres de los hombros y se acercan para que nadie las escuche. Camino silenciosamente hasta poder escucharlas. –por lo que sé, ellos viven juntos. Se corre el rumor de que ellos no se separarán aun después del matrimonio.

-¡Es terrible! –la morena exclama.

-y pensar que yo estuve en su cena de compromiso. –Anastasia suspira y sigue hablando de algo que no presto atención.

Ya no escucho lo que dicen. Me alejo de ellas procurando que no me vean. ¿Casamiento? Eli va a casarse. Así que eso era. Por eso estaba tan extraño, no sabía cómo decirme que se iría.

Él me dejará por esa mujer.

Duele.

Esta es una clase de dolor distinto. Hace que quiera gritar de frustración.

-Jun. –Eli me detiene. Miro alrededor y me percato que estoy en la recepción. –¿Qué ocurrió? Estas pálido.

-¡Suéltame! –lo empujo. Veo que Adeline se acerca preocupada.

-Jun ¿Qué pasó? ¿Alguien te molestó?

-sí. Alguien lo hizo. –estoy frenético. -¡Tú lo hiciste! –porque estoy tan descontrolado. –estoy cansado de que me cuides. Odio verte cerca de mí. Ya no te necesito. ¡Aléjate! –corro sin importar que seguramente todas las personas escucharon mis gritos. Intento olvidar la expresión triste y dolida de Eli cuando dije esas palabras.

¿Qué he hecho?

No debí haber dicho eso. Eli no tiene la culpa que querer hacer su propia familia. No es justo que le reclamara algo así.

Toco la llave que me regalo y lloro sin saber porque.

En realidad si lo sé, pero no quiero pensarlo, porque eso lo haría real y no deseo eso.

Me quito el collar y lo guardo en mi bolsillo. Miro a mi alrededor y me doy cuenta que estoy muy lejos del Hotel. Ni siquiera me percaté de que estaba en el exterior. El frío entumece mis piernas. Camino de regreso al hotel, por suerte no me había alejado tanto.

Tendré que disculparme con Eli por mi reprochable conducta. Al entrar no veo a nadie, seguramente todos se fueron a sus habitaciones. Paso por el salón para tomar algo y recoger algún bocadillo cuando alguien agarra mi brazo.

-¡Jun! –aspiro profundo cuando reconozco esa voz. Respiro intentando no entrar en pánico.

-Alezandro. –me giro y logro verlo, luce muy agitado y su cabello se encuentra desordenado, algo muy raro en él. –puedes... soltarme. –le digo intentando controlarme. Aunque su tacto no duele es incómodo.