Epilogo

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Año 2040

Narra Barbi

Es increíble como el tiempo vuela, después de que me separé del Eduardo me devolví a Chile y nunca más supe de él, al tiempo conocí a un chico muy simpático, su nombre era Gustavo y trabajaba conmigo , el me hizo creer de nuevo en el amor, me enamoró con pequeños detalles y me hizo olvidar al Eduardo y dentro de mi corazón, sabía que era lo mejor, lo nuestro nunca estuvo destinado a ser. Cuatro años después nos casamos y al año siguiente tuvimos una hijita preciosa, mi amada Amalia. Pero bueno, al parecer yo no estada destinada a ser amada ya que cuando la Ami tenía 5 años, el Gustavo y yo nos separamos, pero fue una cosa de mutuo acuerdo, solo 6 años duramos casados... pero en general nos llevábamos bien, el era un excelente padre y la Ami lo quería mucho .

Hoy había llegado full agotada del trabajo, estaba cansada y muy estresada y es que tener 47 años y con una hija de 18 que recién había entrado a la Universidad todo se complicaba.

- Mamá! – dijo mi querida Amalia entrando como un torbellino a la pieza – Mamá! ¿Qué haces acostada?

- Descansado po hija ¿o crees que los viejos no tenemos derecho a descansar?- le dije sacándome los feos zapatos de tacón que tenía que usar en la oficina, mis pies me estaba matando. Además, hoy era viernes, no pensaba en salir de la casa ni a palos.

- Al parecer olvidaste lo que te he estado repitiendo TODA la semana – dijo con cara de disgusto.

- ¿Qué cosa? – le pregunté mientras le daba un pequeño masaje a mis pies.

- Hoy iríamos a la casa del Benja mamá, hoy conocerías a mi pololo y a su papá – dijo. Ah! eso, la verdad es que si se me había olvidado y es que estaba evitando a toda costa conocer al pololo de mi hija, no se porque, me molestaba el hecho de que el sea 6 años mayor que ella... SEIS!

- Era hoy? Se me había olvidado... no lo podemos dejar para la próxima semana? – dije metiéndome dentro de la cama. La Amalia se veía furiosa

- Eso dijiste la semana pasada y lo tuvimos que correr – dijo frustrada – Mami – dijo sentándose al lado mio – Yo se que el papá y tu no están muy de acuerdo con mi relación con el Benja por la diferencia de edad, pero te juro que si lo conocieras, lo amarías, es tan sencillo – sus ojitos le brillaban, creo que en verdad amaba a ese niño- Además, el tío Claudio me contó que tu cuando tenías 19 andabas con un tipo mayor y que eso lo había sacado de ti.

Ay ese Claudio! Desde que se retiro del futbol y se vino a vivir a Chile permanentemente había sido una pesadilla, le contaba puras cosas vergonzosas de mi a mi bebé y por su culpa ahora mi hija andaba con ese seudo-futbolista , el Claudio se le ocurrió llevarla a uno de sus eventos deportivos y ahí conoció a este niñito. Además no se porque el Claudio le contaba todos mis secretos a mi hija, yo no le andaba contando a los suyos que cuando era más joven decían que andaba con su tía, la hermana de la Carla. Quizás debería contarles para que me dejen de webiar.

- Pero solo eran tres años de diferencia, no seis – le dije- Y debes de dejar de escuchar todo lo que te dice tu tío.

- Por favor mamá, esto en serio es importante para mi. Yo conozco al papá del Benja, pero el no te conoce a ti y ya llevamos 6 meses juntos. Además, el Benja me dijo que su papá te conoce.

- ¿A mi? ¿Y como se llama? – pregunté confundida, no conocía a nadie que tuviera un hijo que se llamara Benjamín y fuera papá soltero.

Better Than Revenge (Eduardo Vargas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora