La lista de Donghae [FINALIZADO]

#11 Lo que me gusta de mi pececito lindo 💖💖💖

—¡Hyukkie, amor! —llamó Donghae a gritos ni bien abrió la puerta del departamento. 

Donghae estaba muy contento y emocionado. Su carrera de actor estaba en ascenso. 

Había regresado de su entrevista con un productor importante que le había ofrecido el papel protagónico de una película. ¡El papel protagónico! Donghae todavía no podía creerlo. Él aceptó la oferta de trabajo sin dudarlo, y ahora se moría de ganas por contarle a su novio. 

—¡Hyukkie!— gritó mientras se descalzaba en la entrada a toda velocidad.

Para su sorpresa, nadie respondió a su llamado, ni su novio ni sus amigos. Extrañado, caminó apresurado a la habitación de su Hyukkie, la que ambos compartían desde hace mucho.

—No está aquí... —susurró desanimado, esbozando un pequeño mohín.

La habitación estaba pulcra y ordenada, sin rastros de su novio por ningún lado.

Pensó en su propia habitación, esa que solo usaba pocas veces, más bien cuando quería escribir en su diario sin ser molestado o cuando se enfadaba con su novio. "No creo que esté allí", se dijo dudoso, pero por las dudas decidió echar un vistazo. 

Cuando abrió la puerta y le recibió el silencio y la tranquilidad de un cuarto vacío, Donghae resopló enfurruñado.

—¿Dónde está Hyukkie? —se quejó cruzándose de brazos molesto.

Donghae tenía una buena noticia en los labios y quería contársela a su novio para festejar juntos. Seguramente Hyukkie lo felicitaría sonriendo resplandeciente, luego le daría besos cariñosos y después, cuando las cosas se pusieran algo calientes, ambos yacerían bajo las sábanas y moverían la cadera un poco, o mucho, dependiendo de si Hyukkie estaba cansado o no. Esperar solo, completamente solo, no era su idea de festejar. Necesitaba a Hyukkie en ese preciso instante. 

Sacó su celular decidido a llamarle cuando notó un cuaderno abierto sobre la cama. Abrió los ojos desmesuradamente cuando se percató de que se trataba de su diario íntimo. 

—¡Qué distraído soy! —se reprochó guardando el celular.

Tomó su diario en las manos y miró para todos lados a la defensiva. No había nadie en la habitación, tampoco en el departamento recordó. Seguramente habría olvidado el diario allí la última vez que escribió en él: la noche anterior mientras esperaba que las horas pasen rápido y Hyukkie regresara de sus actividades. Efectivamente, el cuaderno estaba abierto en la página dónde había escrito todo aquello que le gustaba de su novio. Al parecer nadie lo había leído. Suspiró de alivio. 

—Ahora vas a volver al escondite secreto —le dijo al diario seriamente. 

Donghae se arrodilló en el suelo y sacó la caja que guardaba bajo la cama. Estaba por guardar su diario allí cuando notó que, el listón separador del cuaderno se encontraba más allá de la hoja donde estaban sus últimos escritos. "Qué raro", pensó. ¿Por qué lo habría dejado allí?