Capítulo 3 -Monstruos

172 25 0
                                    

Hola!! este es el tema de este capítulo, se llama Scary Monsters, del gran David Bowie:

She had an horror of rooms
She was tired
You can't hide beat
When I looked in her eyes they were blue but nobody homeShe could've been a killer
If she didn't walk the way she do,
And she do...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.



Ese día entre a mi casa por atrás. Me escondí como un bandido, agachándome cuando pasaba junto a las ventanas y trepé como un simio hasta la ventana de mi cuarto. Todo para que la empleada doméstica Marta no me vea y le cuente a mi madre.

Una vez en mi cuarto me quité la ropa y la escondí en una bolsa en mi ropero. En mi mano todavía estaba el número de Franco, lo anoté en un papel y lo coloqué en el bolsillo de mi piyama. Luego tomé me metí en ducha y abrí el agua caliente. En seguida pude ver los delgados ríos de sangre que ondulaban por el piso de mi ducha hasta desembocar en el drenaje. Comencé a tocar mi cuerpo pero no encontré una herida. Al salir me puse mi piyama e intenté llamar a Vanesa. Quería contarle que había pasado la noche con un hombre y que nada había sucedido. Siempre nos contábamos las cosas que nos pasaban, pasábamos horas al teléfono. Además quería preguntarle si tenía mi teléfono celular. Esperé, escuché el tono del teléfono pero enseguida la línea me daba ocupada. Bien, debe estar hablando con el idiota del novio.

Me acosté bajo las sábanas con mi piyama de conejitos a dormir un rato. Al despertar volvería a llamarla.

Varias horas después...

—Felicitas....cariño, ¿estás bien?—. Marta estaba parada junto a mi cama con cara de preocupación.

Lo único que podía pensar era: ¿quiero dormir!

—No, ¿por qué diablos me despertaste? ¿Acaso tengo que conseguir uno de esos colgantes que dicen "no molestar" para poner en mi puerta?—dije con irritación pero una sonrisa se me deslizó por mi ocurrencia.

Marta rió pero luego se quedó allí expectante. No se iría hasta que le diga que estoy bien.

—mmmm, sip, estoy hecha una joyita, tan sólo tomé una siestita.

—pero hija, has dormido todo el día, me tienes preocupada.

Abrí un ojo en alerta—¿Cómo que todo el día?

—Ya son casi las once de la noche.

Me senté en la cama de inmediato y, evidentemente, podía verse por la ventana que era de noche.

—Uh, me dormí.

—¿Quieres que te traiga algo de cenar a la cama?—preguntó Marta.

Coloqué mis manos en forma de plegaria e hice mi mejor imitación del gato de Shrek.

Felicitas aprende a andar en motocicleta (Salvajes #2) #FantaAwards2017 #WGA2017On viuen les histories. Descobreix ara