veintiséis

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En casa de Hobi.

-Sé que me observas desde el año pasado – soltaste de repente.

Me encontraba tomando el jugo que me serviste en aquel vaso rojo. Al escuchar eso me atraganté y comencé a toser.

Me has descubierto desde el principio.

¿Por qué no has dicho nada?

-No te molestes en negarlo. Sabes, yo también lo hago.

-¿Q-qué?

-Te observo desde el año pasado, un mes después de haberte descubierto cuando me observabas. Me pareciste lindo – explicó – así que escribo en mi cuaderno todo. Como tú, Tae.

-¿C-cómo sabes que escribo...? – tartamudeé.

-Porque te veo escribir. También tomarme fotos. Mira, yo también te saqué fotos. Las he impreso – abrió su cuaderno y efectivamente, allí estaban todas las fotografías – también te he dibujado.

-¿En serio?

Me sonrojé tanto que creo que se me subió la presión.

-Sí – extendió un retrato con trazos de color negro. Había utilizado su bolígrafo negro para dibujarme – salió bastante bien.

-Y-yo también te dibujé y he impreso las fotos... – confesé.

-Me alegra oír eso – sonreíste tanto que también lo hice yo.

-¿Quieres ver mi habitación? allí está todo.

-Vamos – respondiste.

Entonces viste todo. Mi pared llena de fotos y dibujos de ti, cartas y poemas escritas y dedicadas sólo a ti. Leíste todas y cada una de ellas.

Ambos sonreímos y me tomaste de la mano.

Hobi, estoy sonrojado y nervioso.

Tus manos son tan grandes, suaves y cálidas.

Mientras que mis manos son pequeñas y frías.

No importa, me gusta que me toques.

Úsame, ámame, has lo que quieras conmigo.

Pero no me dejes.


-

creo que esto es el ultimo capitjlo

Diary of a Stalker ✏ VhopeWhere stories live. Discover now