Vecinos |Terminada|

Cita de juegos

-"¿Qué haces aquí?" – dijo Emma molesta de ver a Killian antes de tener que irse a dormir.

-"¿Tú que haces aquí?" – dijo confundido.

-"Yo vivo aquí" – dijo Emma con un tono como si lo que dijo fuera obvio.

-"¿Tú eres la mamá de Henry?" – dijo Killian dándose cuenta de todo.

-"Sí, eso no tiene que ver contigo"

-"Solo vine por mi casaca" – dijo Killian no queriendo pelear.

-"¿Qué hace tu casaca en mi casa?"

-"Vine a una cita de juegos" – dijo como si lo que dijo fuera obvio.

-"Tú eres ….. no" – dijo Emma negando con la cabeza.

-"Sí"

-"No"

-"Sí"

-"No no no" – dijo Emma sonriendo como si le hubieran contado una broma.

-"¿Me vas a dar mi casaca, amor? – dijo Killian queriéndose ir.

-"Emma" – dijo ella dejando en claro que no le gustaban los apodos. "¿Tú eres el papá de Killian?

-"No, yo soy Killian" – ¿Por qué todos creían que él tenía un hijo?

-"Tienes que estar bromeando"

-"No, ¿es tan difícil de creer?"

-"Que al chico que no deja dormir a su vecina y trató de besarla ebrio le guste pasar el tiempo con niños, sí suena difícil de creer"

-"Yo no intenté besarte y no paso mi tiempo con niños solo que Henry parece ser amigable, además me lo encontré cuando una irresponsable lo dejo solo para comprar helado"

-"Era su helado"

-"Siempre tienes que tener la última palabra, ¿no?" – dijo levantando la ceja.

-"Tal vez y que sabes tú de niños, déjame"

-"Ay, quien te soporte" – por algún motivo ese comentario pareció molestarle a Emma.

-"Solo tiene que soportarme Henry, así que serias tan amable de coger tu casaca e irte".

-"Bien" – cogió su casaca y regresó a su casa.

Flashback

-"Por favor no te vayas" – dijo Killian suplicándole a esa mujer que creía amar.

-"Tengo que hacerlo, no puedo seguir con esto" – la mujer cogió a un niño pequeño de aproximadamente 2 años.

-"No tienes que hacerlo si no quieres, él te abandonó una vez, lo volverá a hacer"

-"Tú no lo sabes" dijo decidida a irse

-"Y tú tampoco" – dijo él.

-"Kiian" – dijo el niño que sostenía Milah mientras trataba de abrazarlo.

-"No te lo tienes que llevar" – dijo Killian por último.

-"Él no es tuyo es mío" – dijo mirándolo a los ojos "Adiós Killian" – cerró la puerta en su cara y él vio por la ventana como se alejaba en su carro.
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Al día siguiente Henry bajo a desayunar

-"Mamá, ¿conociste a Killian?"

-"Sí" – dijo no prestándole atención mientras preparaba el desayuno y escuchaba música con sus audífonos.