Rovinando tutti i piani

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Se esta haciendo tarde para poderte dejar, tome un sorbo de mi copa diabólica, que lentamente se apodera de mi.•Eres como probar veneno del paraíso, soy adicta a ti, ¿No sabias que eras toxico?. Toxic.- Britney Spears


-¿Cosa que te aterra?

-Despertar un día y darme cuenta que todos a los que amo ya no están, tu turno, ¿Qué te hace feliz?

-Supongo que me hacia feliz cuidar de mi chica, ver como sonreía, o cuando una materia le costaba y pasaba horas frente al cuaderno tratando de comprender para finalmente quedarse dormida babeándolo todo. –Lauren me miraba con esos ojos que me hacían sentir vértigo, aunque no quisiera admitirlo estaba en una lucha interior que me gritaba que no queria hacerle daño a esa chica.

-¿Y que paso con ella?

-Pues nada, la sigo viendo pero las cosas ya no son como antes.

-¿Por qué cambiaron?

-Indirectamente me causo mucho dolor, mi familia se puso en mi contra, fui juzgada por todos, literalmente vivi en el infierno por meses, me perdi a mi misma.

-¿Y ella lo siente?- Pregunto interesada en la conversación.

-No lo creo, tampoco debe saber que hizo todo eso.- Me miro extrañada.

-Deberias hablar con ella, decirle lo que sientes, tal vez ella también este sufriendo a causa de eso.

-Lo hace, no en la forma de la que crees pero si que lo hace.- Recordé lo que la muerte de Lucy había provocado días atrás a Lauren, y ella no seria la única a la que mataría para dañar a la chica que me veía. 

-¿Y eso como te hace sentir a ti?- La mire y no supe que responder, ¿Qué sentía yo al verla llorar?

-No lo se, supongo que satisfecha.

-¡Camila! Dios, que cruel eres.- Ambas reímos. 

-Dame crédito, a mi literalmente me dieron una patada para echarme de mi casa.- Di vuelta mi cara para mirarla pero ahora se encontraba muy cerca de mi, su rostro estaba a centímetros del mio y podía sentir sus latidos, no fue para nada incomodo, me sentía en calma, ver su rostro daba la misma paz y serenidad que cuando volaba más alto de lo que nos permitían para poder estar sola.

Su respiración tan cerca de mi me erizaba la piel, sus ojos me seguían mirando, casi invitándome a pecar, y sus labios, demonios, deseaba besar sus labios.
No fui consciente de mis acciones hasta que me di cuenta de que había acabado con la recién casi nula distancia que nos separaba, la mire y sus ojos reflejaban que quería esto tanto cono yo, lentamente fui depositando pequeños besos desde su cuello hasta llegar a su boca en donde me detuve, la mire divertida y ella hizo un gesto de frustración. 

-¿Podrías simplemente besarme de una vez? 

Pero no podía, que lo quisiera no significaba que debía hacerlo, yo no podía caer en ese estúpido juego de los humanos, enamorarse siempre te brinda cosas hermosas, sin embargo en un  punto todas esas cosas se desmoronan y tu quedas en el suelo sufriendo, no podía volver a caer, no si quería seguir mi plan, ella debía sufrir, yo no.

Me levante negando con la cabeza y salí de ese lugar, corrí como nunca lo había hecho, hasta que una silueta me detuvo.
Me escondí, y me enfoque en ver quien era, se estaba acercando y vi su rostro, eureka, me volví a esconder y cuando paso adelante comencé a seguirlo.
No había nadie por los alrededores, deberían de ser cerca de las 3 am, seguía caminando, el aun no me descubría, ¿Adonde se dirigiría a esta hora?
Llegamos hasta la puerta principal y el manipulo los controles y sistemas de alarma, mis sentidos se agudizaron, ¿En donde el había aprendido a hacer esto?
Luego de unos minutos las puertas se abrieron y el salio, me apure para salir antes de que se cerraran las puertas y en eso que ponía un pie fuera del lugar escuche como se reía y me observaba 

-De todas las chicas que me podían seguir fuiste tu la estúpida, una lastima Camila, realmente me habías caído bien, sera una pena tener que asesinarte.

Sonreí maliciosamente, las cosas solo se ponían mejores.

A.M #PhotographLCDOM Donde viven las historias. Descúbrelo ahora