-Estará bien.-Dijo Sanji, aunque ni el mismo se la creía aun, desde que lo persiguió no lo había vuelto a ver y eso que era un chico muy molesto, no tanto como Luffy y Usopp pero si uno regular.
-Puede que se haya perdido y este sufriendo en la lluvia.
-No digas esas cosas.-grito Usopp mirando a Robin, pero era lo que la chica pensaba, muy seriamente.
En un rincón estaba Zoro, sosteniendo entre sus manos las pistolas que el siempre llevaba, estaba preocupado, muy preocupado, aquel pequeñajo era muy apegado a el, siempre hablaban y ambos tomaban juntos, se llevaba muy bien con el. Se levanto y se ato el cinturón con las pistolas alrededor de su cintura.
-Iré a buscarlo.-Dijo y Luffy asintió, Zoro salio a la lluvia mientras se ponía su campera y llevaba otra para el aunque Chopper y Usopp le decían que se quedara, cuando cerro la puerta detrás de el salto a la arena y empezó a caminar por donde su instinto le indicaba, cuando piso dentro del bosque empezó a correr, sus pies golpeaban el suelo mientras daba vueltas por el lugar, no fue hasta que escucho una respiración agitada dentro de una cueva que se detuvo.
Saco una de sus katanas y entro a paso lento, pero rápidamente la desconfianza se volvió en preocupación, la guardo rápidamente y corrió al cuerpo tembloroso de su nakama, estaba totalmente mojado y muy pálido, ademas de que su piel ardía y su respiración era lenta y tortuosa.
Zoro lo levanto entre sus brazos pero lo pensó mejor.
-Con esta lluvia solo te sentirás peor.-Susurro el apretándolo contra su pecho, suspiro y lo dejo nuevamente en el suelo, se saco su campera y dejo a un lado la de el, primero sacudió la de el chico y después se la puso, al ponérsela Zoro golpeo su propia espalda en las piedras y lo puso contra su pecho. -Con esto sera mejor.
Susurro pero este aun temblaba, así que, aun preocupado poso su campera en la piernas del chico, tapándolo. Lo abrazo fuertemente con sus brazos intentando que dejara de temblar, tenia miedo y odiaba no poder ir al barco rápidamente para ayudarlo, así que lo abrazo y hundió su cara en su cabello húmedo.
-Z-zoro.-Susurro el, el marimo se alejo y lo miro, tenia los ojos llorosos y su voz salia débil, pero no parecía despierto, como si tuviera una pesadilla.-Zo-zoro, no.
-Tranquilo.-Susurro el agarrando su mano, su pálida mano.-Estoy aquí.
Pero no soluciono nada, este susurraba su nombre mientras temblaba y Zoro lo apretaba contra su pecho, estaba empezando a dudar si tenia que esperar, después de una hora se tranquilizo y Zoro dejo de hacer tanta presión.
Cuando el sol salio la tarde del siguiente día y la lluvia paro Zoro lo alzo y se preparo para ir, hizo memoria para llegar directo al barco y abrazándolo salio corriendo, llego un poco tarde, dos horas corriendo llego al Sunny.
-¡Chicos!-gritaron Chopper y Usopp, este levanto la mirada.
-Chopper, necesitamos tu ayuda.-Le grito mientras Robin se encargaba de subir al chico y Zoro subía rápidamente para después volver a alzarlo cuando Robin termino de subirlo. El reno lo miro un momento y despues examino sus brazos.
-Llévalo a la enfermería.-Zoro asintió y corrió hacia allí, aunque quería quedarse Chopper lo hecho a las patadas y tuvo que quedarse sentado contra la puerta.
-¿Que ocurrió Zoro?-Pregunto Franky.
-No se, solo lo encontré anoche en una cueva.-Susurro el con los barzos cruzados sobre el pecho, Nami y Robin lo miraron.
-¿Te sientes bien espadachín-san?-Pregunto Robin pero Zoro no contesto, se quedo callado esperando la salida de Chopper.
Después de unas horas Chopper salio suspirando.
-¿Se encuentra bien?-Pregunto Luffy y Chopper cabeceo un poco.
-Si, si, el estará bien, tuvo un ligero contacto con veneno de la isla ahora esta despierto, Sanji, hazle una sopa con carne y vegetales, nada de tomates o cebollas, no puede comer nada dulce por unos días y tampoco podrá tomar sake.
-Si, doc.-Dijo Sanji prendiéndose a la cocina
-No le gustara escuchar eso.-Susurro Nami, Zoro se levanto y sin escuchar a Chopper entro a la enfermería, ahí estaba el, cerro con seguro la puerta y camino hacia el.
-Hola Zoro.-Susurro el cuando Zoro se sentó en el borde de la cama, mirándolo.
-¿Como te sientes?
-Mejor.-Susurro el con una dulce sonrisa, Zoro asintio y relajo sus hombros.
-Me alegra mucho.-Susurro el tocando uno de los pies que sobresalía fuera de la cama.-¿Por que no volviste?
-Me perdí después de ser perseguido por Sanji.
Una vena creció en la frente del marimo, enojado se levanto y, sacando el seguro de la puerta la golpeo para abrirla.
-¡Cocinero de mierda! ¡Voy a matarte!
