El Arte de Amarte 《Lucaya》

Capítulo 9: La Charla

—Gracias por eso —dijo Maya mirando al suelo pero sonriendo.

Pasaron unos minutos en la misma posición ella mirando al suelo y él mirando al techo, en silencio y sin hacer nada.

—Maya ¿por qué no has logrado decidirte? —Preguntó Farkle dirigiendo su mirada a la rubia, ella le devolvió la mirada —no es que quiera que te vayas, pero sí me gustaría saber las razones que te impedirían hacerlo.

—Son ustedes, mi familia, mis amigos, no quiero alejarme —dijo Maya, pero Farkle notó algo extraño en ella.

—no te creo.

— ¿qué? —exclamó Maya muy desconcertada porque su amigo no cayó en su mentira.

—Sí creo que nos extrañarías, pero no creo que eso sea lo que te alejaría de nosotros —dijo Farkle aclarándole a Maya —mira, tu familia es tu familia, por más que te alejes de ellos, seguirán estando ahí, toda tu vida y tú lo sabes.

—Tienes razón, sé que ellos siempre estarán —dijo Maya mirando el suelo al verse descubierta.

—Y lo mismo ocurre con Riley, ella también es parte de tu familia y no se irá —dijo Farkle y Maya asintió dándole la razón —y aunque nosotros, tus amigos, no tengamos un vínculo tan fuerte contigo, como el que tienes con Riley, sabes que también puedes contar con nosotros.

—Claro que lo sé, siempre serán mis amigos —Farkle hizo una pequeña pausa esperando a que Maya le dijera la verdadera razón que hace que se quede o mejor dicho, que la hace dudar —hay algo que quiero, no hay ese algo en otro lugar y ese algo me quiere aquí.

— ¿algo? —preguntó Farkle hallando nuevamente una pequeña mentira en su amiga.

—sí, algo —Maya le había dicho a Lucas que él no sería la razón por la que se quedaría, pero ella era experta en mentir. La única razón que hacía que Maya se quedase en Nueva York era que Lucas no quería que ella se fuera.

—dime ¿amas el arte? —Maya asintió —y ¿amas a ese algo?

Esas palabras hicieron reflexionar a la rubia ¿ella ama a Lucas? Es cierto que lo quiere mucho y en serio le gustaría que la hubiera escogido a ella, pero ¿eso era amor? Tal vez, si solo hubiera sido un gusto no sería él la razón de su duda, menos sabiendo que él no quiere que se vaya. Dicen que la mezcla entre el gusto y el cariño es el amor (NA: nah... nadie lo dice, solo yo... recién) y si Maya sabe que le gusta y lo quiere, entonces ¿lo ama?

—Sí Farkle, lo amo —esa respuesta sorprendió al castaño, ambos sabían que los dos sabían a lo que se referían, aunque no lo admitieran —amo a ese algo.

—entonces tienes que descifrar qué amas más, el arte o ese "algo" —dijo Farkle a Maya como consejo y ella sonrió, por primera vez en todo el mes, alguien le daba un consejo que le serviría para tomar su decisión.

— ¿puedo pedirte algo? —El castaño asintió —me prestas ese dibujo que te regalé.

— ¿el que hiciste cuando estábamos en la...?

—Biblioteca —Maya trato de que esquivar esa mención, pues conocía el significado de ese día —sí, ese.

—claro —Farkle se puso de pie, se acercó a una repisa con portarretratos y de uno de ellos quitó la foto y un papel que tenía detrás, lo extendió, lo observó y luego lo volvió a doblar, dejándolo a un lado, puso la foto en el portarretratos, volvió a coger el papel y regresó con Maya —aquí tienes.

—Gracias —la rubia agarró el dibujo que Farkle le tendió, lo desdobló y lo observó. Una hermosa noche de Nueva York, con sus edificios, con su cielo oscuro, con sus estrellas y su luna, el dibujo era hermoso — ¿sabes? Este fue el primer dibujo que no hice como una tarea, con este dibujo me di cuenta que era buena en arte.

—Siempre lo fuiste Maya, desde que éramos niños —dijo el castaño pasando un brazo por los hombros de su amiga —solo faltaba que tú lo notaras.

—Gracias Farkle —los dos se dieron un tierno abrazo, luego Maya guardó el dibujo y se puso de pie —me voy.

—oye ¿y mis dos días de "tiempo de calidad" con mi amiga? —protestó el castaño.

—Si te hubieras quedado callado y hubieras dejado esta charla para el final de los dos días los habrías tenido —dijo Maya riendo y saliendo del cuarto —gracias por la charla Farkle, en unos días te regreso el dibujo.

—Pero me lo regresas —advirtió el castaño —no pienso dejar que te quedes con el único dibujo que me has regalado.

—te lo regresaré, además tienes el honor de tener este ¿para qué quieres otros? —Ambos rieron —te veo después Farkle.

—te veo después Maya.

La rubia salió de la habitación y el apartamento de Farkle ahora sí sabía cómo tomar una decisión.

Recta Final: 1/3

Hola... bien creo que pediré disculpas porque hace siglos que no publicaba... la verdad es que tuve un semestre desastroso... fue un asco... lo detesté... me quiero tirar de un puente.... Nah... no es para tanto... sí fue duro, para mí, parece que a mis compañeros les pareció tan pesado como una pluma pero bue... el caso es que ya estoy en vacaciones y ya terminé de escribir esta historia, como ya vieron... solo faltan dos capítulos para el final así que para el fin de semana ya tendrán el final de El Arte de Amarte...

En fin... espero que les haya gustado el capitulo.... espero sus comentarios y nos leemos

Besos

Paula