Hasta que la muerte nos alcance

Prólogo

Tennessee 1862 

 Sé que el mundo debe ser descubierto, sé que el mundo está detrás de ti, pero mientras sea así no sé cuándo voy a descubrir el mundo... ya que si me voy, todo se iría cayendo y tengo miedo de eso... no sé cuándo irme... si tú sigues aquí

Mis palabras me abrumaron y las sentí como un balde de agua fría ¿sería posible dejar que todo se cayera, solo para sentirse bien? Apenas me lo pregunté y sentí un escalofrió repentino y una extrañeza ajena

¿Cómo era posible que pudiera destrozarme la vida... de maneras a las que a él no le harían daño?

Entonces hubo otro latigazo

Grité con fuerza y todo se volvió negro, no podría luchar con lo que sentía y sentir dolor... un dolor provocado de la persona de la cúal me había enamorado

--Sólo voy a hacerte una pregunta, una sola pregunta ¿se te ocurrió pensar en cómo me sentiría?

Apreté la mandíbula con fuerza con la cabeza gacha, no respondí y el latigazo golpeó mi espalda nuevamente y gemí encogiendo mi cuerpo

--SE TE OCURRIÓ -- me gritó con el labio temblándole, tenía miedo podía verlo y eso hizo que el corazón casi se me cayera al suelo

Seguí sin responder

--¿Cómo crees que me sentí?-- prosiguió -- no supe cómo reaccionar cuando me enteré que William Roberts no lo era en realidad , sentí que el corazón se me salía de pecho, luché conmigo mismo para que me mintieras ¿sabes que desesperante es eso?.

Suspiré y negué con la cabeza

--No lo sé -- dije con la voz temblando y entrecortada -- y creo que no debería saberlo

Él soltó una sonora carcajada que retumbó en las paredes de la pequeña habitación

--¿Qué no deberías? ¡claro que sí! -- chilló -- ¡ SE SUPONE QUE ME ENAMORÉ DE WILL ROBERTS! ¡Y AHORA ÉL NUNCA EXISTIÓ! ÉL FUE PRODUCTO DE UNA MENTIRA ¡UNA MENTIRA!

Lo miré

--¿Sabes? Pensé que tú podrías ser la persona que me haría diferente, que marcarías una diferencia en mí pero me destruiste más de lo que mi propio padre lo había, te he ido desconociendo estos 2 últimos años

Sus palabras me golpearon como una bofetada y me quedé tensa

--Yo igual -- me temblaron los labios -- creí que eras... -- vi un interés en sus ojos, una curiosidad feroz, y una lucha interna, él quería reprimir esos sentimientos aunque tal vez no pudiera y entonces finalicé con un suspiro -- diferente

El joven suspiró desilusionado

--Pero te convertiste en lo que más odiabas-- dije apretando lo dientes con enojo

Él me lanzó una sonrisa maliciosa de las sombras

-- ¿Convertirme? No sé dé que estás hablando pero...

--¡CLARO QUE LO SABES! -- grité enfadada intentando soltarme de la silla -- ¡NO QUERÍAS CONVERTIRTE EN TU PADRE ! Y MIRA HAS HECHO AHORA ERES IGUAL A TU PADRE

Él me miró perplejo y luego miró el látigo, lo  miró por unos instantes como si ese látigo lo transportará a un lugar al que no quería pertenecer. Lo tiró aterrado y salió de la sala temblando