~~Encuentro Inesperado~~

~~Capítulo 40~~

-Gracias.-
-Dijo Lay algo tímido y sonrojado.-

-¿Porque bebé?.-
-Preguntó SuHo acariciándole su mejilla derecha.-

-Por llegar a mi y creme que no me éstas ni me estarás obligando a nada, yo quiero esto....-
-Contestó con un susurro Lay para después valientemente colgarse de ambos brazos al cuello de SuHo.-

Iniciaron un beso totalmente lujurioso pero sobretodo lleno de amor, con ayuda de SuHo, Lay fue levantado del piso para después enredar sus piernas en su cintura.

SuHo siguió el camino de rosas que los llevaba a una de las habitaciones, rompieron el baso para ver a su alrededor encontrándose con más pétalos de rosas en el centro de la cama en forma de corazón y más velas que iluminaban el lugar, toda en perfecta armonía e intimidad.

Con Lay en brazos como si fuera un koala, terminó de acortar la distancia y llego al filo de la cama, antes de soltarlo, cruzaron miradas como pidiendo permiso a lo que recibió un asentimiento por parte de Lay.

Con mucho cuidado y amor SuHo fue recostando a Lay en la cama para después posicionarse encima de él, capturando de nueva cuenta sus labios.

Lay volvió a apoderarse de el volviéndolo a tomar del cuello y enredar con una de sus manos el cabello de SuHo, de vez en cuando dando leves tirones, cosa que aumento las ganas de SuHo.

Esta vez los besos que se daban eran más arrebatadores y lujuriosos que otras veces, en esta ocasión más de una vez SuHo adentraba su lengua en la cavidad de Lay con permiso previo.

Pues descubrió que entre más lo hacia se ganaba leves gemidos por parte de Lay, los cuales conforme se iniciaba un beso más apasionado que el anterior el de igual manera iba subiendo el volumen de sus gemidos.

Poco a poco ambos fueron restregandose y apegandose lo más que pudieran, pues sentían que todavía estaban bastante lejos para sus gustos.

Poco a poco SuHo fue introduciendo una mano por la camisa de Lay, tocando la suave y cálida piel de su vientre, para poco a poco llegar a sus pezones.

Cortando el beso, SuHo fue descendiendo hacia su cuello para regalarle besos al mismo tiempo que iba sacando botón por botón.

Hasta finalmente tener la camisa abierta y descendiendo todavía más para saborear sus clavículas, pecho y llegando finalmente a los pezones que tanto queria probar.

Por otra parte Lay era un mar de gemidos entre cortados lleno de anticipación.

Conforme SuHo por fin pudo llegar botón de sus pantalones, Lay le ayudó al quitarse su camisa volviendo a recostarse para poder alzar las caderas para que le fuera retirado el pantalón dejando todavía su bóxer junto con una notable creciente erección.

Con algo de vergüenza Lay llevo ambas manos a su miembro, ganándose una risitas burlona de SuHo quien apenas se quitaba el mismo su camisa y pantalón para regresar a lado de Lay o más bien encima.

Volvieron a besarse y esta vez con algo más de libertad, SuHo introdujo una mano para tocar el miembro caliente y palpitante de Lay el cuál iniciaba a despertarse.