Capítulo quince:Ya casi se acerca

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Capítulo quince:Ya casi se acerca.
Narra Amaya.

Esta mañana me levanté por dolores,ese pequeño Aron me despertó de nuevo.

Si es lo que ustedes piensan,tendré un niño y le pondremos Aron,estoy muy emocionada por ver su carita,muero de emoción por poder cargarlo,después de tanto dolor el mundo me recompensa con lo mejor que me puede pasar,ser madre.

Evan esta muy emocionado,estoy en el último mes y aveces los dolores son insoportables pero al final de todo habrá valido la pena.

Aún pienso en cuanto me hubiera gustado que mi madre conociera a su nieto,pero desde el cielo ella lo vera,debo de contarles que al fin las cosas malas se fueron,la muerte de mi madre no fue en vano.

Hoy iré a ver los últimos detalles de la boda,mi boda sorpresa.
Salí de mis pensamientos cuando escuché que Evan me hablaba.

–Mi amor acabo de decidir qué ya no iré a trabajar,le deje el mando a mi primo,solo hasta que nazca nuestro pequeñín–dijo besando mi enorme panza.

–Me parece bien mi amor–dije aunque realmente no lo es,con el aquí no podré ver las últimas cosas de la boda.

–¿En qué tanto piensas?–preguntó curioso.

–En como será mi  niño–dije sonriendo para que no sospechará nada.

Mi amor no te imaginas la gran sorpresa que te tengo,no sé porque no me lo propusiste tú pero lo único que ruego es que ese día me digas que sí.

*****

Después de una hora ya estaba lista para irme con la ginecóloga,hoy me tocaba un ultrasonido ya el último para después estar listos para la gran llegada.
Todos esperamos con ansias ese momento,yo más que nadie,el poder tener a mi hijo en mis brazos,tocar su rostro escuchar su llanto,solo de pensarlo mi piel se pone de gallina.

–Mi amor ya estoy listo–dijo Evan que había ido a sacar el auto.

Asentí y subí al auto,manejo casi dos horas,hace un mes nos habíamos cambiando a una casa a las afueras de la ciudad,donde casi nadie supiera,eso como medida de precaución para evitar que fuéramos a tener otro ataque.

Cuando llegamos al hospital me ayudó a bajar y entramos,fuimos con la enfermera,nos dio turno y esperamos,al sentarnos vi cómo algunas mujeres embarazadas estaban solas y otras con sus esposos,las que estaban solas tendrían casi la edad de Geraldine y no se veían muy contentas con su embarazo,es claro que por su edad porque ser madre es lo más hermoso.

–Mi amor,¿en qué piensas?–hizo una pausa,me miró y volvió hablar–Últimamente estás muy pensativa casi ausente–dijo mirándome preocupado.

–Nada cariño,solo que el embarazo me pone nerviosa y muy sentimental,aveces también pensativa pero estoy bien–dije sonriendo mientras le acariciaba su mejilla.

El iba a responder cuando la enfermera nos llamó.

Entramos y mis nervios aparecieron,esa sensación de volver a ver a mi niño me hace querer llorar.

–Hola de nuevo,¿cómo están los futuros padres?–preguntó sonriente la doctora mientras preparaba todo.

–Nerviosos–conteste.

–Es normal,ya te falta muy poco Amaya–dijo feliz.

–Cada día menos–contesté.

–Bien vamos a comenzar–dijo la doctora.

¿Juntos?©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora