¿Juntos?©

Capítulo ocho:En los ojos del lobo

Capituló ocho:En los ojos del lobo.
Narra Amaya.

–Aún no puedo creer todo lo que pasó ese día,yo pensaba que mi mamá se iba a recuperar pero ahora con esto es imposible,temo por su vida,cada disgusto es una probabilidad menos de vida–le dije a Evan mientras íbamos en el auto rumbo al hospital.

–Lo sé y luego la verdad de Geraldine pero aún no logro entender quién se lo dijo,se supone que solo la familia más cercana a mi tía lo sabía–dijo Evan con la vista puesta en la carretera.

–Yo si se quién,pero aún no estoy muy segura–dije entre dientes.

–¿Quién?–me pregunto Evan esta vez con la vista puesta en mí.

–Emalene–dije mirándolo.

Su silencio me hizo pensar que tal vez él le dijo a la zorra.

–¿Tú le dijiste?–pregunté muy enojada.

Y otra vez ese silencio que comprobaba que si.

–¿Cómo pudiste?–pregunté golpeando la parte del auto de enfrente.

–Fue una noche que no sé cómo paso,solo salió–dijo con cara de culpabilidad.

–¡Eres un idiota!–grite exasperada.

–No–dijo gritando.

–Claro que lo eres,le dices a tu novia algo tan delicado cuando no sabes nada de ella,podría ser parte de la mafia y tú hablando de más,¿no quieres gritar mejor los secretos de la familia?–pregunté.

–Perdón pero estaba enamorado–dijo Evan que al terminarlo de decir me miro.

–No digas nada más solo conduce–dije evitando escuchar más.

¿Estaba enamorado? ¿No que estuvo siempre enamorado de mí? Escuchar eso dolió como no tiene idea.

Al llegar al hospital no cruce ninguna palabra con el,no era el momento.
Entre y enseguida me topé con Zoey.

–¡Amaya!–grito emocionada.

–Zoey–dije más calmada.

–¿Qué te pasa? Tienes algo y me lo vas a contar–dijo tomándome del brazo y llevándome a donde nos tocaba estar.

–Muchas cosas,problemas familiares y Evan me acaba de decir que estaba enamorado de Emalene antes de que la dejará por mí–dije lo ultimo casi en un susurro.

–¡Que perro!–dijo Zoey enojada.

–Puede ser,pero por ahora quiero concentrarme en otra cosa–dije poniéndome a trabajar.

Más tarde estaba en la habitación del servicio de limpieza buscando una bata cuando Evan entró.

–Me das permiso,por favor–le dije tratando de salir.

–Tenemos que hablar–dijo tomándome de los brazos.

–Ahora no es el mejor momento–dije tratando de salir.

–Amaya discúlpame,no quise decir eso,eso fue al principio cuando llevábamos poco,cuando pensé que te había superado pero luego me di cuenta que no y todo cambio–dijo mirándome.

–Bueno ya te escuche ahora déjame ir–dije bufando.

–Amaya–dijo antes de besarme.

Al principio me trate de resistir pero no pude evitarlo y también lo besé,solté la bata y él me elevo,me sentó en una camilla que estaba ahí y me empezó a besar el cuello mientras metía sus manos bajo mi falda,me estremecí al sentir su mano en mi sexo,su mano subía y baja haciéndome gemir,con la otra mano empezó a bajar mi blusa y mi sostén hasta dejar al descubierto mis senos,sin pensarlo tanto empezó a lamer y morder uno de mis senos mientras tocaba mi sexo.