Ciel x Sebastian

7.

    Su tono cambia a pícaro, me encanta, no creo que pueda evitar esto.
–C-cállate –Trato de controlar mi pulso pero lo único que hago es que mis mejillas se tornen en un rojo más profundo.
–Puedo cumplir lo que quieres y podemos ser novios a la vez ¿No?
–Novios... Qué extraño suena esa palabra –Digo tratando de parecer indiferente, pero sé que es imposible que no se note lo nervioso que estoy.
–A mí me gusta, vamos a estar juntos toda la vida, Ciel –Su mirada cambia drásticamente a sádica y terrorífica, como si estuviera viendo una presa ante sus ojos y no a su amo.
–Pero si vas a devorar mi alma no...
–Por eso –Me interrumpe– Vamos a estar juntos toda la vida. Hasta el final de los finales.
Se acerca lentamente a mis labios y me besa profundamente, los muerde y chupa. Se sienten bien sus besos, se siente bien él, se siente bien su aroma y sus cabellos rebeldes chocándose contra mi rostro mientras nos besamos de esa manera tan apasionada.
–Parece que has adquirido conocimiento en esto –Me da dos pequeños besos como de "despedida"
–¿Te vas? –Digo mostrando mi tristeza sin pena.
–Sí mi amor –Me mató, con eso me mató, esas palabras, no debería jugar conmigo así y yo no debería permitirlo, pero me encanta, de eso estoy seguro.
–A d-dónde –Pregunto avergonzado.
–Te ves tan lindo sonrojado, ¿Te gustaron esas palabras?
–N-no juegues conmigo –Digo haciendo un puchero tierno para venir de mí.
–Esa expresión llegó directo a mi corazón, te aseguro que si la haces mientras estamos teniendo sexo me derretiré, ahora debo irme a terminar los quehaceres de la casa, lindo. Por la noche iré a tu habitación ¿Ok?
Me sonrojó el pensar qué pasaría en mi habitación por la noche, de solo pensarlo ya quería que pasara.
–Así que espera ¿Ok? –Se acercó de nuevo lentamente y me besó de nuevo, me puso en su regazo y me agarró de la cadera, yo puse mis brazos alrededor de su cuello así quedando totalmente juntos.
–Espera, si seguimos así no habrá nada que me detenga –Trata de despegarme pero no quiero.
–Yo no quiero que te detengas –Lo beso de nuevo, abre sus ojos como platos pero los cierra después de unos segundos.
–Ya es demasiado tarde –Dice mirando hacia abajo, ya sé que es lo que dice, ya está erecto.
–Tenemos que solucionar esto ¿No?, hagamos un trato –Le digo pícaramente y él se sorprende– Si tú me dejas solucionar esto, te dejaré ir pero volverás por la noche a mi habitación.
–Vaya, Ciel, me encanta cuando te portas así.
Me siento en el suelo con cuidado por las ropas, hay que tenerlo presente siempre que es importante cuidarlas. Y saco despacio pero con firmeza el miembro erecto y lo meto en mi boca. Me atraganto de inmediato.
–¿Estás bien? De pronto... Es muy grande para ti.
Me lo saco de la boca.
–Mira –Cojo sus manos y las pongo en mi cabeza– Hazlo a tu ritmo, no te fijes en mis reacciones, solo hazlo.
Me vuelvo a meter su miembro en mi boca y veo que él no se mueve así que lo empiezo a hacer yo, lo logro meter solo hasta la mitad porque siento que me vomitaré.
Miro hacia arriba para ver su expresión y le está gustando, tiene sus ojos cerrados y tiene una expresión de éxtasis.
–Ok, lo haré –Dice y mueve mi cabeza de adelante hacia atrás, me concentro en que mis dientes no choquen con su miembro.
Me estoy esforzando y solo veo su expresión de éxtasis pero ningún sonido que me asegure que le gusta. Así que me esfuerzo más, lo hago profundo y lento y después muy rápido. Y empieza a jadear, eso ya indica que le gusta más lo que le estoy haciendo. Jamás pensé que yo le pudiera estar haciendo esto a Sebastian mi demonio mayordomo, pero me gusta, quiero hacerle sentir placer.
De un momento para otro coge mi cabeza y la aprieta hacia adelante sin fijarse en que me esté atragantando. Miro hacia arriba y su expresión es que se va a correr, empieza a impulsar la cadera hacia adelante y se corre en mi boca llenándome la garganta.

N/A
Pos lean pishuelas, lean <tres mamá Suh las quiere y por eso las complace con estas historias tan malitas *¬*
Votenla, comenten si les gusta y pos bai <3