Ciel x Sebastian

6.

–N-no pasa nada, bajemos rápido –Casi que me tiro por las escaleras para llegar rápido. Es verdad. Se me había olvidado ese pequeño gran detalle; él es un demonio y yo soy su amo, él debe cumplir mis deseos para al fin devorar mi alma. Creo que me estoy confundiendo de camino. No debería ir por el camino del deseo, solo tengo que esperar a que ese demonio cumpla la razón por la que está aquí y ya. Es obvio, "reacciona Ciel, reacciona"
Mi perfil cambia y me vuelvo más serio.
–Ciel... ¿Te sientes bien? –Me pregunta Elizabeth acercándose a mirar mi temperatura poniendo su mano en mi frente.
–Por qué no debería estarlo. Ahora Sebastian –Lo miro fríamente y él se sorprende, seguro que no se lo esperaba y me gusta verlo así, inseguro por mi personalidad– Vamos a tomar algo ¿Sí? Prepara un té con galletas para Elizabeth. Sebastian entra con los ingredientes para prepararlo.
–Cambiaste Ciel –Dice Elizabeth y noto un tono preocupado en su voz, tampoco es para tanto.
–Sigo siendo el mismo líder de la familia Phantomhive –Puedo escuchar una risa burlona que proviene de Sebastian.
–¿Algún problema, Sebastian? ¿Acaso el té te está contando un chiste? –Eso sí que no se lo esperaba, me mira más confundido aún, está tratando de descifrarme pero no puede. Estoy poniendo una barrera entre él y yo y me aseguro de que no la penetre. Al imaginar esa palabra me sonrojo y me pego en las mejillas para recuperar la compostura.
–Ciel... En verdad me estás asustando, ¿Te sonrojaste y ahora te pegas? –Elizabeth dirige la vista hacia Sebastian– ¿Seguro que está bien, Sebastian? Tú lo conoces más que yo.
–Le aseguro, Elizabeth-sama –Sebastian se levanta con los platos, sonríe falsamente y nos sirve– Que él está perfectamente bien, solo que a veces se comporta un poco infantil, pero es normal para su edad, es un pequeño niño consentido.
–Claro que soy consentido, por eso perdí a mis padres ¿No? –Eso tampoco se lo esperaba, me encanta ver su expresión de sorprendido con cada palabra que digo, se ve tan lindo. Me vuelvo a sonrojar.
–Te sonrojaste de nuevo, Ciel –Ya no quiero que me llame así, aun siento cosas por él, pero de alguna u otra manera tengo que entender que él vino acá por un objetivo claro.
–Debe ser por el calor, abran las ventanas
–Están abiertas –Mierda, no me había percatado de eso, debí haber pensado antes de hablar.
–Cómo sea, comamos Elizabeth –Lo miro de nuevo asesinamente– Puedes retirarte.
No sé por qué me molesta que me tutee si yo mismo fui el que le pedí que lo hiciera.
–Ciel, en verdad me preocupas, de un momento para otro cambiaste... No sé, te volviste como más... –Se queda unos segundos revolviendo el té con la cucharita– Frío.
–No digas estupideces, Elizabeth.
–¡Que no me llames así! –Dice en un tono chillón que me molesta. La ignoro, sé que está hablando pero decido no escucharla y simplemente pensar en nada.

Al terminar de comer llamo a Sebastian y él viene de inmediato, de nuevo me sorprende porque parece como si estuviese espiando, a lo mejor y lo estaba haciendo de nuevo.
–Estaban deliciosas esas galletas, Sebastian-san –Dice Elizabeth sonriendo alegremente. Definitivamente no me hubiera podido casar con ella... Su felicidad me perturba.
–¿Opinas lo mismo, Ciel? –Debería por lo menos usar un honorífico, pero no, yo fui el que se lo pedí. Que fuera lo menos formal posible.
–Bueno. Lo siento pero creo que ya me voy –Dice Elizabeth levantándose del sillón y extendiendo su vestido extravagante– Nos veremos luego, Ciel-kun
–Hasta luego, Elizabeth-sama –Sale de la habitación y nos quedamos solos, qué incómodo momento. Un escalofrío recorre todo mi cuerpo al sentir a Sebastian diciendo unas palabras en mi oído que no estaba escuchando. Pero al momento en el que desperté de mi shock al sentirlo tan cerca escuché algunas palabras.
–...Así que creo que es momento de que hablemos –Se aleja de mí y se sienta a mi lado– ¿Qué tienes, Ciel?
–Me di cuenta de algo –Pienso ser sincero con él, si en verdad siente algo pormí, creo que no sería justo mentirle.
–Cuéntame –Su expresión cambia, se vuelve juguetona y curiosa, como la de ungato cuando ve una bola de lana en el suelo.
–Eres un demonio, yo soy tu amo. Estás aquí únicamente para servirme, no deberíamos cambiar el rumbo de la situación –Digo obligándome a que mi voz no se quiebre.
–Por favor, Ciel –Se acerca de nuevo peligrosamente a mí, invadiendo mi privacidad, bueno, igual ya la había invadido totalmente hace un rato– Sabes que me amas, ¿O no? –Mierda, esa mirada, esos ojos, esos labios... Su cabello, me enloquece, en verdad lo amo.
–Vaya, pues, te sonrojaste mucho y tus pupilas están dilatadas ¿En qué estabas pensando? 



N/A:
Aquí está amigas fujoshiiiiiiiiiis
Ciel por Sebastian forevah and evah
Sigan apoyando la historia, las quiero <3
PD: Tengo dos historias (Una ya está avanzada y otra que acabo de empezar :v) Una es de BTS y la otra es de Diabolik Lovers
Bai c: