Capítulo cuatro

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Cuando bajé del camper me sentí mucho mejor, ya no tenía que ver a June y a West hablando, me sentía celosa y excluida. Y déjame decirte que ninguno de los dos sentimientos son mis favoritos, así que mi humor no es el mejor en este momento.

—Muy bien chicos, cada quien arma su carpa con su pareja —nos recordó mi tía.

Suspiré con frustración, debí de haber ido a las clases de scout que me aconsejó mi tía, pero no, yo estaba decidida de que no seria necesario para mi vida, y ahora desearía haber tomado esas clases.

—Tú armas la parte delantera y trasera, y yo armo los costados, ¿de acuerdo? —dijo, esperando que yo estuviera de acuerdo.

—Cla...ro —respondí insegura.

Después de unos minutos, June ya había terminado de armar su parte y yo seguía en una pelea con los clavos y estacas que no cooperaban conmigo para nada, oficialmente odio armar carpas para campamentos, esto simplemente no se me daba, apostaba a que no podía verme más ridícula haciendo esto.

Mientras intentaba clavar una estaca al piso por enésima vez, eché un vistazo a mi alrededor y vi que ya todos habían terminado. El padre de West había acabado de armar su pequeña carpa de color azul hace algunos minutos y fue en busca de mis tíos que ya habían acabado la suya y salieron a dar un paseo por el lugar, West y su hermano pequeño ya lo habían terminado casi al instante y fueron a sentarse a un enorme pedazo de tronco de árbol caído que se encontraba en el lugar y June, al terminar su parte, fue con ellos.

Así que yo era la única persona que faltaba, genial.

Traté de apresurarme un poco más y clavé la estaca al suelo y ésta no se movió, podría jurar que tenía lágrimas en los ojos por la felicidad que sentí al ver que finalmente lo había logrado, coloqué mi primera estaca. Bien, solo necesito unas seis horas mas y terminaré con la carpa, aunque para esa hora ya deberíamos estar durmiendo.

Tomé otro clavo, fui hacia el otro extremo y empecé a realizar el mismo trabajo que el anterior, esta vez hasta me pareció más fácil. Terminé y mire la carpa con orgullo, ¡lo hice! No sé cómo, pero logre hacerlo.

Para asegurarme de que todo este bien, entré en ella y coloqué los sacos de dormir, estaba feliz de haberlo hecho sin antes tener un ataque de nervios, aunque mi felicidad se esfumó cuando por accidente hice un movimiento brusco y todo lo que habíamos hecho June y yo calló de golpe sobre mí. Había echado la carpa. Sobre mí. Qué suerte la mía.

Intenté levantarme, pero por lo visto la carpa es más pesada de lo que parece, lo que me faltaba, tendría que gritar para que vengan a ayudarme, preferiría que ahora mismo aparezca un oso de los arbustos y me comiese enterita.

¿Acaso no escucharon el ruido que provocaron los tubos de la carpa al golpear mi columna? ¿Tan interesante es la conversación que estarán teniendo que ni siquiera se preocupan de que una carpa cayó sobre mí? No es momento de ponerse paranóica, April. Tienes una carpa encima tuyo.

Comencé a gritar y patalear por debajo de la tienda, de seguro ver esta escena sería graciosa para cualquiera, incluso para mí lo sería, si no estuviese atrapada aquí me estaría riendo.

—April, ¿estásbien? —oí la voz de June preguntar a través de la lona.

—Pienso que podría estar mejor —dije, con mis ultimas gotas de paciencia.

Sé que ella no tiene la culpa, nadie la tiene, pero me pone muy nerviosa el hecho de no poder hacer nada bien.

—Tranquila, ya te saco de allí —dijo ella y escuché sus pasos alejandose.

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⏰ Laatst bijgewerkt: Oct 31, 2016 ⏰

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