Favor

1.3K 145 22
                                    

Cayendo fuertemente sobre la cama, golpeándome el mentón, destellos azules, relámpagos rosa, un ojiceleste, un kaio y un guerrero herido, fue lo último que vi antes de terminar de nuevo en mi casa.

¡Te dije que no te acercaras a Goku y desobedeciste!

Gritándome como un padre lo haría con su hija, cerrando la puerta tras de sí, sólo pude observar enojo en sus pupilas.

Podríamos decir que ganamos aquella batalla, habiendo una gran diferencia en los poderes, la única opción que les quedaba era huir de nuevo al pasado. Una pelinegra y un hombre los ayudaron a escapar. No tardarían mucho en regresar, ninguno se conformaría con la derrota, y Black no se detendría hasta acabar por completo con Goku.

¡Sabes que no era mi intención! Él se acercó

Excusándome como podía, no entendía el motivo de su ira.

¡Eres una traidora!

Lanzándole una almohada, cubriéndome el rostro con otra, diciéndole que callara. Él bien sabía que no era cierto, no le importaba ofenderme. Acercándose hacia mi mientras desabrochaba el listón de su cintura. Asustándome, sonrojada.

¡No Black! ¡Así no!

¡Harás lo que yo diga mujer!

Tomándome de los pies, atrayéndome hacia él. Pataleando, golpeando. Algo le sucedía, no lo comprendía. Forcejeando con él, rasgando mis prendas. Gritarle no servía de nada. Al poco tiempo mis prendas superiores habían desaparecido, tratando de cubrirme con las sábanas, se acomodó sobre mí. Seguía vestido.

Colocando sus manos sobre mis pechos, haciéndome gemir ante su tacto. Comenzaba a ceder. Traté de detenerlo, me calló posando sus labios sobre los míos, deslizándose hacia abajo, dejando rastros de saliva en todo mi abdomen, deteniéndose en mi vientre.

Busqué su rostro, me tomó por las muñecas, amarrándolas con su listón. Bajando de nuevo, tomando mis bragas entre sus dientes, dejándome expuesta ante él. Susurrando en mi oído al momento que mordía mi oreja.

Te daré un buen motivo para llorar

Estremeciendo ante sus palabras. Introdujo tres de sus dedos en mi feminidad, estimulando, moviéndose con fuerza, haciéndome gritar su nombre rogando que se detenga, mis ojos lagrimaban, más que placer me ahogaba en el dolor.

Se detuvo, mirándome fijamente, acariciando mi mejilla con su mano libre, hablando casi sin aire

¿Qué es lo que vez en mí?

Negué con la cabeza confundida. Bajó la mirada, colocó ambas manos detrás de mi cabeza, enredando sus dedos en mi cabello, acercándome hacia él.

No quiero que cuando me veas recuerdes a tu esposo, soy diferente

Liberé mis manos, rodeando su cuello con mis brazos, jugando con el zarcillo de su oreja. En ese momento entendí el motivo de su actitud, ante su enemigos era invencible, conmigo se mostraba débil.

En ti no veo a Son, te veo por lo que eres y cómo eres conmigo, te amo porque para mi sólo eres Black. Mí Black

Sonrió, enredó sus dedos con los míos.

Sólo no destroces mi corazón como lo ha hecho toda la gente que he conocido

No soy como ellos

Ayudándolo a deshacerse de la ropa, batallando en una guerra de besos y caricias, terminando por entregarnos de nuevo. Moviéndonos al compás de la cadera del otro, dejándome llevar por embestidas lentas y profundas, gimiendo ahogada en el placer, suspirando ante un vaivén lento entregado por un hombre de ojos grises y cabello parecido al de una flor de loto. Rogando a los dioses que el momento perdurara para siempre, agradeciéndoles por regalarme una segunda oportunidad. Cayendo en su pecho, rozando nuestras pieles transpiradas después de un orgasmo simultáneo.

Necesitaba preguntarle, no estaría en calma hasta deshacerme de esa duda. Me observó detenidamente.

Black, necesito un favor






Kill Me«Black Gochi» [Terminada] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora