Never Forget You © [Evans 2]

18. Quiero ser feliz.

―Por Dios, tranquilízate, Dyl ―me dice Connor mientras abre la puerta del coche. Yo le imito y me hundo en el asiento de copiloto―. Solo estaba bromeando.

Cierro los ojos y cojo aire, él cierra la puerta y enciende el coche. El motor comienza a rugir.

―Me rompiste el corazón, Connor. No es divertido que la persona que hizo trizas tu corazón haga bromas al respecto de ello.

―Yo... maldita sea, no lo hice a posta. No quería romper contigo, ni mucho menos romperte el corazón. Eres la persona más importante en mi vida. Si te pierdo... si te pierdo no sé qué voy a hacer.

Niego con la cabeza mientras él arranca el coche y gira el volante. Esto está mal, muy mal. Ni siquiera deberíamos estar hablando de esto. Nos quedamos un rato en silencio hasta que Connor se para en un semáforo y me mira, también suspira.

―Os vi besándoos.

Giro la cabeza rápidamente hacia él, el rostro de Connor es neutro y no muestra ninguna emoción. Sin embargo, puedo escuchar su corazón, que late a un ritmo desenfrenado, en el silencio del coche.

―Dime, ¿es así como va a ser a partir de ahora? Tú simplemente pasarás página, y saldrás con Key, y os besaréis, y yo... yo seré solamente ese hermanastro con el que tuviste una aventura. ―Trago saliva. Los dos sabemos que es mucho más que eso―. ¿Es así?

Cierro los ojos por un momento antes de contestar.

―Quiero ser feliz, Connor. No quiero estar estancada y deprimida, quiero vivir mi vida con alguien que me quiera, que me cuide, que me haga feliz, que tenga las mismas metas que yo, quiero a alguien bueno para mí. Y para eso... necesito pasar página.

―Maldita sea, yo quiero que seas feliz. Y si encuentras a alguien con el que serás feliz... entonces yo estaré bien con ello, pero mientras que yo sea ese alguien no me voy a rendir. ―Estoy a punto de echarme a llorar―. Porque te quiero. Y yo sé que me sigues queriendo.

Y en silencio se instala en mis labios, estos se sellan durante el resto del viaje porque no sé qué decir, además, el nudo de mi garganta es tan grande que pienso que en cuanto abra la boca voy a comenzar a llorar a mares.

Cuando bajamos del coche, me pregunta una cosa más antes de entrar en casa.

―Dime, ¿te ha besado más veces?

Me quedo sorprendida. No me esperaba que me preguntara eso. Es decir, de él sí que me lo esperaba, pero no me esperaba que lo preguntara ahora, justo cuando mi garganta estaba a punto de desgarrarse por culpa de las palabras que querían salir de mi boca pero no se atrevían.

―No ―miento. Tampoco es cuestión de hacerle más daño―. No aparte de lo que tú has visto.

―Bien, porque si te vuelve a besar ten por claro que le reventaré la cabeza.

Suelto un suspiro. ¿Por qué no puede dejar de ser tan dominante por un momento? ¿Es que no se le ha pasado por la cabeza lo que yo quiero?

―No vuelvas a decir algo así. No eres quien para decirme con quien puedo besarme y con quien no...

―Soy tu hermano.

Y eso desata la bomba. ¿es en serio? ¿Mi hermano? ¿Ahora me va a venir con esto? ¡Venga ya! La etapa de hermanos la pasamos desde antes del verano, no quería volver a la SisterZone. En realidad, a ninguna Zone, porque me voy a alejar de Connor y no voy a ser nada suyo.

Lo dices como si fuera fácil...

―¿Cómo puedes soltar eso tan fácilmente después de todo lo que hemos pasado juntos? Después de todos los contratiempos con Hunter, con la familia, con Jason e incluso con Key, ¿eso es lo que soy para ti? ¿Tu jodida hermana? ―Mis ojos arden con furia y Connor me mira un poco intimidado pero sin dejar que le afecte mucho, me dan ganas de pegarle el tortazo más fuerte que haya recibido en su vida entera―. Eres impresionante. ¿Es que tienes un problema en la cabeza?