Capítulo 2

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POV Lauren

Bajé a la cocina sintiendo el delicioso olor de la comida de mi madre, vaya que extrañaba sus deliciosos platos cubanos o que simplemente ella me cocinara, con Keana no éramos grandes fans de la cocina, pero hacíamos lo que podíamos e internet nos enseñaba, aunque terminamos pidiendo comida la mayoría de las veces.

- Eso huele delicioso, mamá.

- Estás muy delgada Lauren, ¿Keana no te alimenta? – No pude evitar reír.

- Suenas como mi abuelita, mamá. Es solo el estrés de la universidad y esas cosas, te aseguro que si no fuera por Keana olvidaría comer. – Mamá sonrió con sinceridad.

A ella siempre le había agregado Keana, cuando vivíamos en Nueva York trató de convencerme para que saliera con ella, pero eso solo resultó años después. Desde que había intentado suicidarme cuando Lucy murió mis padres habían cambiado, ellos eran mucho más preocupados por nosotros y nuestra felicidad, aunque a veces pienso que se sienten algo culpables por lo de Camila.

Camila.

¿Qué habrá pasado con ella?

- ¿Lauren?

- ¿Qué?, lo siento estaba pensando en algo.

- Preguntaba si ibas a salir.

- Lamentablemente. – Rodee mis ojos. – Keana necesita unos zapatos para mañana y decidió que no podemos vestir de negro en una boda así que compraremos unos vestidos, salir con una modelo es difícil.

- ¿Necesitas dinero?

- No te preocupes, mamá. – Sonreí, tenía dinero guardado de las obras que vendía en Nueva York y algunos trabajos de medio tiempo que había realizado. - ¿Crees que podamos ir de negro al ensayo?

- Si puedes convencer a Keana, no lo dudo. – Mi mamá le bajo el fuego a la cocina antes de voltearse a verme. – Lauren, ¿Lo de Keana va en serio?

- Mamá tengo 21 años, apenas tengo edad para beber legalmente. – Reí algo nerviosa.

- Solo preguntaba, con Camila era todo diferente. – Ella desvió la mirada.

- Era poco realista, eso era lo diferente. Era mucho más joven y con montones de sueños irreales. – Vi una extraña mirada en mi madre, pero no le di mucha importancia. – Me voy, ¿Me prestas tu carro? – Ella me tiro las llaves y besé rápidamente su mejilla antes de salir rápidamente de casa. Proxima parada, casa de Keana.

POV Camila.

- ¡Dinah estoy agotada! – Me tiré sobre los asientos de los probadores esperando que mi rubia amiga saliera de aquella cabina. - ¿Puedes simplemente elegir uno?

- ¿Qué?, tenía planeado comprar los cinco, solo me los probaba para confirmar lo bien que me quedaban. – Bufé rodando mis ojos. – Nunca pensé que trabajar en un bar me daría tanto dinero.

- Por supuesto que tienes dinero si pagamos entre tres la renta del apartamento y te comes mi comida. – Gruñí y escuché su risa antes de que saliera del probador, ella si se veía bien.

- Solo te ayudo a mantener tu forma para cuando conozcas a alguien, deberías agradecerme que gracias a mi tienes a muchos chicos, y chicas babeando por ti. – Suspiré, lo que menos me importaba era salir con alguien. – Hablando de tus babosos, Ariana a preguntado por ti. – La miré rápidamente, bueno Ariana era linda. – Me preguntó si podía darle tu número, le dije que primero debía preguntarte y esas cosas para hacerte ver como una chica difícil.

- Dinah, no soy esa clase de chica.

- Ya, solo bromeaba, pero lo de Ariana es en serio, no sabía si estabas interesada en ella así que quería preguntarte antes, ella es agradable.

- Debo pensarlo. – Ella asintió antes de volver a mirarse en el espejo. – Le gustará a Mani.

- Gracias por acompañarme, Chancho. Te invito una pizza. – Mi mamá siempre me dijo que la gente que, hacia cosas buenas recibía su recompensa.

Íbamos hacia el piso de la comida rápida cuando algo había llamado mi atención, eran unas chicas que pasaron frente a mi corriendo haciéndome tambalear, a pesar de los años seguía siendo algo torpe.

- ¡Lo siento! – Ella siguió su camino.

- ¿Y este alboroto? – Miré a Dinah y ella detuvo a una adolescente.

- Hey, ¿Qué pasa?

- ¡Cara Delevigne y Keana Issartel junto a su novia están aquí! – Dinah soltó a la chica que parecía estar en su modo fan y esta corrió hacia la dirección en la que muchas adolescentes iban.

- ¿Cara en Miami?, espera Keana la ha traído. – Ella parecía pensativa.

- ¿Keana tiene novia? – Pregunté asombrada, yo no sabía que le gustaban en serio las chicas. – Espera, ¿Desde cuándo Keana es famosa?

- No es tan famosa como Cara, pero tiene sus fans. – Dinah se encogió de hombros volviendo a caminar hacia la pizzería.

- ¿No deberíamos ir a saludarles?

- Luego lo haremos, de seguro ya tienen a los guardias de seguridad tratando de protegerles y llevarlas a alguna parte segura. – Nunca pensé que unas modelos podían volver loca a las chicas, aunque si hubiera sido Ed o alguno de los chicos que conformaba One Direction yo hubiera saltado como Spider Man por los pasillos.

- ¿Tu sabías que ella tenía una novia? – Dinah se limitó a asentir. - ¿Y cómo es?, ¿También es famosa?

- No lo sé, no hablo con ella Mila. ¿Podemos simplemente comprar la pizza he irnos de aquí antes de que sea un caos?

Dinah estaba muy rara y por poco me saco a rastras del centro comercial, incluso cuando se veía un poco más calmado. Ella me llevó a mi casa mientras me comía la pizza en el asiento del copiloto, amaba la pizza.

- Estás rara. – Dije mientras seguía comiendo de mi pizza, estábamos a fuera de la casa de mis padres.

- Camila, escucha. – Ella suspiró y se acomodó su cabello, estaba nerviosa.

- ¿Me dirás que te gusto?, porque eso me traería muchos problemas con Normani y ella es algo intimidante cuando quiere serlo.

- La novia de Keana es Lauren. - Ella simplemente lo soltó.

- ¿Cómo dices que dijiste?

- Keana es la novia de Lauren, - Ella repitió. - llevan un buen tiempo juntas. Por eso ya no hablo con Lauren, terminamos teniendo una fea discusión luego de que cumplieran unos 6 meses de relación.

- ¿Por qué discutieron?

- Siempre le dije que debía volver contigo, tú te veías tan necesitada de Jauregui que traté de convencerle incluso estando con Keana, pero eso parece ir en serio. Te cuento esto porque ellas están invitadas a la boda y si están acá sólo significa que ellas asistirán, no quiero verte mal, Mila. - Yo suspiré fuertemente.

- No te preocupes, Dinah. Lo tendré todo controlado. - O al menos eso esperaba.

High Hopes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora