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Capítulo 3

El lugar designado para el festejo de mi cumpleaños fue un club. Uno bastante exclusivo, y no es por presumir, pero era uno de los beneficios que daba el ser hija de una artista famosa, así es mi madre, Adeline Everly, es una concertista bastante famosa, mi padre Kyle Salvatore es su representante legal, y como resultado de ello, mi hermano y yo crecimos con nuestros abuelos, pero mamá y papá se tomaban el tiempo necesario para visitarnos.

En fin al llegar al club, me encontré con mis mejores amigas, que de inmediato me envolvieron en un abrazo.

-¡Feliz cumpleaños, Emy!- gritaron todos en el club, reconocí a muchas personas del instituto, a otras no las conocía en lo absoluto, pero debo decir que el ambiente en el lugar era asombroso.

-¿Quieres inaugurar la fiesta?- Shane me dio un Shot, que tome sin miedo, y sin pensar lo tome, sentí como el líquido comenzó a quemar mi garganta, pero aun así deje de nuevo el pequeño vaso en la mano del castaño y sonreí, pronto se escucharon los gritos de todos presentes, la música se escuchó lo más fuerte que se podía, mis mejores amigas tomaron mis manos y fuimos a bailar.

Nos movimos al ritmo de la música, por mucho tiempo, dejando que cada nota recorriera nuestros cuerpos, poco después de estar bailando con todo el mundo alrededor y con todos los tragos que había estado tomando comencé a sentir algo de calor, así que salí de la pista un momento, para tomar aire.

-Al fin te encuentro, cumpleañera- dijo un chico a mi espalda, sentí como una sonrisita se coló por mis labios, me gire, pero debí hacerlo muy rápido porque comencé a marearme, frente a mí había dos chicos de cabello castaño y sonrisa hermosa, pero después solo se convirtieron en un chico.

-Hola, John- sonreí, o eso trate,

¡Dios mío!, estaba ebria en menos de dos horas, esto es vergonzoso.

-Hola, linda- se acercó y me abrazó- feliz cumpleaños, Emily- susurró en mi oído.

-Tu eres lindo- solté, el filtro que conectaba a mi cerebro con mi boca, ya no funcionaba, pero John no era una mala persona, lo conocía de la escuela, o eso creo, ahora nada era seguro.

John, o en realidad no sabía si ese era su nombre real o no, pero como no lo había negado asumiremos que ese es su nombre real, no se separó de mí, simplemente me mantuvo sujeta por la cintura.

Comenzó a mover nuestros cuerpos al ritmo de la música, simplemente me deje llevar, después de todo, él era lindo y yo no tenía novio, quizá estuviera enamorada de mi mejor amigo pero...

¿Dónde estaba él?

¡Exacto!

No aquí.

Sin embargo el lindo John aquí estaba conmigo, esperen... ¿Eso suena muy desesperado?

En fin, el bonito chico y yo nos movíamos lentamente al ritmo de la canción Pillow talk, pronto sentí como sus manos bajaron a mis caderas y me pego más a su cuerpo, la sangre se concentró en mis mejillas, vi cómo se acercaba lentamente, a mi rostro, hasta que sus labios y los míos se juntaron, primero me beso de manera lenta, pero después creo que sentí su lengua hasta mi garganta, lo trate de apartar, pero no funciono, prácticamente me estaba asfixiando con su lengua dentro de mi boca.

Para mi suerte una extraña fuerza sobre natural apartó al ahora no tan lindo John de mí, en verdad estaba agradecida, pude haber muerto o algo peor.

-Te dije que no tendría ojos para nadie más que tú, Emy, no lo olvides- su voz me hizo estremecer, estaba por responder pero... se comenzó a escuchar...

FriendzoneWhere stories live. Discover now