[VOLUMEN UNO] CAPÍTULO DIEZ

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"Xiao Yan..."

"¿En?" Xie Yan empujó distraídamente alrededor del alimento.

"Sostienes tus palillos al revés."

"Oh, oh -" Xie Yan ajustó sus palillos y continuó empujó distraídamente alrededor del alimento.

Toda madre estaría preocupada cuando ven a sus hijos que soportan una expresión disgustada. Además, Xie Yan había estado en esa condición durante unos días. Había ido a Inglaterra y parecía que había perdido su cordura y lo más probable es que se había olvidado de traerlo de vuelta con él. Si no fuera por el hecho de que ella había sido atea durante toda su vida, ella ya llamaría a un monje para restaurar de nuevo el espíritu de Xie Yan.

Pero ella no sabía si la potencia de un monje chino podría llegar lejos hacia el oeste.

"¿Estás bien? Estás siempre en trance últimamente. Tu mente también está en mal estado." La señora Xie no podía dejar de regañar, "Te he dicho que no deberías trabajar muy duro. Ya eres un adulto y sin embargo ni siquiera sabes cuidar de ti mismo ..."

"Si hay algo que no puedas manejar solo, arreglaré a varios asistentes para ayudarte." Xie Feng tampoco podía continuar pasando por alto la cara aletargada aparente de su hijo debido a la falta de sueño, "Shu Nian se acaba de ir,¿ y ya están tan ocupados? Nunca supe que él era competente cuando aún estaba en la oficina en la medida en que la mitad del cielo casi colapsa después de que se fuera ".

"Hmm ... Xiao Nian, él es bastante competente." Xie Yan respondió vagamente.

"Sólo dile que vuelva si la situación es realmente tan mala. Sobre todo cuando se va a aprender ese tipo de maestría."

"En ..." Xie Yan estaba todavía distraído jugando con la comida.

Él estaba totalmente desanimado últimamente. A pesar de que no sufría de insomnio, tenía sueños húmedos de que abrazaba a un hombre cada noche y realmente no podía soportarlo.

Cada mañana, se despertaba en boquiabierto en una cama completamente desordenada mientras todo su cuerpo se convulsionaba. Estaba seguro de que su sexualidad normal una vez se había inclinando hacia los hombres y no hubo ningún golpe más grande que eso.

En comparación con la pesadilla, sería mejor si él tuviera insomnio.

Después de la comida, Xie Yan con desánimo yacía en el sofá. Miró la pantalla LCD que ocupaba casi la mitad de la pared y al azar presionó el mando a distancia. Debido a la falta de la esbelta y delgada 'reforzada', se sintió muy incómodo con los brazos vacíos.

"Madame, el señorito Shu llama".

Xie Yan tensó de repente sus oídos para escuchar la conversación. Fingió estar concentrado en ver la pantalla LCD mientras su mano seguía volteando lentamente a través de los canales. Sin embargo la esquina de sus ojos estaba mirando el teléfono que estaba en la mano del sirviente.

Xie Yan ya no oyó ninguna noticia de Shu Nian una vez que regresó a casa. Ni siquiera recibía los correos electrónicos informándole rutinariamente. Pero otros no se sentían como si hubiera algo malo en la situación, él era el único que estaba inquieto y perturbado. Xie Yan tuvo que ponerse como si estuviera indiferente, ya que parecía que había perdido la compostura.

Para ser honesto, el corazón de Xie Yan siempre se volvía bastante suave cada vez que pensaba en Shu Nian.

El sabía que Shu Nian era realmente ingenuo, [1] se comportaba bien, tímido y reservado, y siempre ha sido muy obediente con él. Mientras él dijera que no era homosexual y si nada hubiera pasado, Shu Nian no mencionaría una palabra hasta el día de su muerte.

Uncontrolled Love (In Spanish)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora