Por otro lado, Valentina se encontraba saliendo de la universidad, ya quería ver a Fernando.
-¿Quieres que te lleve al hospital?-le pregunta Michael a Valentina, mientras está solo pensaba en el incómodo momento cuando ella estaba bailando, sus mejillas se volvieron rojas al pensar en ello,- Tierra llamando a Valentina...- dice volteando hacia Valentina. Esa reacciona y voltea confundida.
-¿Hum?- dice mientras mira a Michael.
Michael rueda los ojos divertido y sonríe.
-¿Quieres que te lleve al hospital?- dice de nuevo.
-Bueno... Si, por favor- dice Valentina y sonríe.
Michael le regresa la sonrisa y se dirigen al auto.
En el camino nadie dijo nada, cada uno iba metido en sus pensamientos, Valentina, pensaba en unos hermosos ojos azules que pertenecían al ya conocido Fernando. Mientras que Michael solo pensaba en la clase de biología, ya que, pronto habría un examen y no quería reprobar.
Al llegar al hospital, Valentina entro a la habitación y se encontró con una sorpresa, muy buena sorpresa.
Fernando ya no tenía el molesto yeso en el brazo, pero seguía con el suero en la muñeca.
Valentina sonrió, pero su sonrisa fue cayendo poco a poco cuando vio a Fernando con los ojos rojos.
Michael entro pero luego decidió salir.
-Nos vemos mañana ,Valentina-dicho esto se fue, no obtuvo respuesta por parte de esta, ella solo se acercó a Fernando viendo sus ojos rojos e irritados, había llorado. Y se dio cuenta de ello.
-¿Por...que lloraste...?-dice Valentina mientras se acerca hacia la camilla y se sienta a la orilla.
-Hoy...- Fernando suspiro pesadamente- mi... Papá,.. Vino a verme... Y... Yo lo eche de aquí...
-Pero...¿Te hizo algo?- Valentina toma la mano de Fernando en forma de apoyo, pero luego la suelta al recordar que el dueño de esa mano es Fernando, pero este la volvió a tomar. Ambos sonríen.
-No... No me hizo nada... Solo... Estoy molesto... Ya sabes... No quiero repetirlo...-dice Fernando haciendo una mueca.
-Esta bien...- esta suspira pesadamente.
*Fernando*
En ese instante, estaba viendo a la persona más hermosa para mis ojos... Necesitaba probar esos labios...¿Será el momento?
Lo que acaba de ocurrir con mi padre no me importó más y sin pensarlo dos veces me acerque a ella y sus labios se unieron a los míos.
Al principio tenía miedo, pero luego ella me siguió el beso.
Sus labios saben a chocolate y fresas... Tan dulces.
Mis labios seguían unidos a los suyos, no quería que esto acabará.
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-AHHHHHHH LA BESOOOO AHRE me emocione. Chau.
- Gracias por sus votos y leídas ❤️
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El Chico del Starbucks
Teen Fiction-Buenos días que va a ordenar? -Un mocha, por favor. Fernando, trabaja en el Starbucks, conoció a Valentina una mañana, desde entonces no deja de pensar en ella y ella el. ¿Quién diría que solo un empleado en una cafetería te cambiaría la vida?
