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▷ Quinto mes; Conociendo a los nuevos padres

Vamos a suponer que todo ha estado marchado bien, que las náuseas no me despiertan cada mañana y me hacen correr al baño. Vamos a imaginar que papá me habla y me abraza como siempre y que no me da esas miradas de reproche cada vez que está en casa. Pensemos por un momento que mi apetito sexual no se ha incrementado y no cojo a Louis desprevenido en cualquier momento y lugar y le hago ayudarme con esas ganas incontrolables de tener un orgasmo. Hay, que lindo sería. Lástima que todo está siendo tal y como es. Así es, papá no me habla, mamá y yo seguimos compartiendo no más de frases cortas las pocas veces que nos vemos al día. Todas las mañanas me levanto directamente al baño donde dejo salir de mí todo el contenido de la cena del día anterior, y parece que a medida que los días pasan una bestia sexual se desarrolla en mi interior, una bestia bastante difícil de complacer y muy, muy hambrienta. Pobre Louis, logro dejarlo agotado después de cada ronda, casi pienso que mi amigo se siente más como un juguete sexual que como otra cosa en este momento. Pero a él parece no molestarle aquello, en absoluto.

Bueno, han pasado ya cinco meses desde que pececito está desarrollándose dentro de mí, cinco meses de cambios hormonales y corporales que no me gustan para nada pero que debo aceptar gracias a mi "error" como papá sigue llamándolo. Eso es algo que no me gusta, vale, lo acepto, todo esto del haberme quedado embarazada fue un cagazo, uno bastante grande e imposible de esconder o remediar, pero eso no amerita que papá esté recordándomelo a cada momento y en todos los lugares posibles. Sí, sé que no me quedaré con pececito pero él tampoco debería escuchar lo que las personas del medio externo dicen sobre él y su llegada al mundo en cuatro meses más. Hay que aceptar que todo esto del embarazo ha sido una comidilla para las personas del instituto. Las más populares hablan de mí y se regocijan en el "gracias a dios yo no he quedado embarazada como ella" ¡Jesús! Como si toda la comunidad estudiantil no supiera que de diez populares siete se han practicado un aborto. Como Louis me dice hago oídos sordos, intento no prestar mucha atención a lo que dicen en los pasillos y claramente no escuchamos cuando comienzan a decirnos estupideces como; "Sabíamos que no podían ser solo mejores amigos" "Apuesto a que su relación aún está siendo secreta" "No sabía que ella tenía tan mal gusto" La verdad es que todo esto ya es bastante malo, pero hay algo aún peor, oh, claro que sí lo hay. Me han enviado con la orientadora del Instituto cuando todos supieron que Louis y yo daremos en adopción al bebé.

Debo reconocer que a pesar de todo la señorita York es bastante agradable y casi siempre me salgo de clases para ir a conversar con ella. Lo único malo es que sigue tratando de convencerme de quedarme con pececito. Creo que jamás le he explicado bien el por qué no quiero quedármelo, no veo lo necesario en decirle a una desconocida porque te has quedado embarazada y quieres literalmente regalar al bebé. Ella piensa que el pequeño estaría mejor conmigo y con Louis, pero dios, Louis y yo sabemos que no será así. Ninguno de nosotros dos está listo para asumir algo tan grande como lo es la paternidad, ninguno de nosotros dos está listo para dejar de ser unos adolescentes estúpidos haciendo estupideces y yendo a fiestas. Además está claro que aunque nos quedásemos con el bebé sería exclusivamente yo quien tomaría las responsabilidades más grandes, sería yo quien deberá renunciar a sus sueños, sería yo quien no podría salir de fiesta, sería yo quien se tendría que despertar por las noches o quedarme con pececito cuando esté enfermo. Sé que Louis me ayudaría pero seamos sinceros, él no renunciaría a nada por un bebé. Ni siquiera si él bebé lo tiene conmigo, su mejor amiga.

Así que he decidido no comentar más sobre el tema, las pocas personas que se han acercado a hablar conmigo sobre ello se han llevado una gran decepción al ver que yo no compartía ningún detalles con ellos, dios, ni siquiera los conocía, ni ellos a mí. Antes de lo del embarazo y el tema de la adopción yo solo era la chica de pelo azul que se paseaba por los pasillos e iba a muchas fiestas, era una persona de la cual no hablaban y claramente una que no estaba en la mira, ni siendo cuestionada por una decisión que a mi parecer es bastante responsable.