Tulipanes

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ChanYeol pretende muchas cosas en un fin de semana, pero entre ellas también está el querer ver feliz a su mejor amigo, que a pesar de esperar a un bebé, no se ve muy contento como lo había estado imaginando desde tres meses atrás en que recién le metían decenas de cosas a su cuerpo para poder embarazarse. Aun así ChanYeol siempre ha sido de la idea de que la gente debe ser feliz, así que sólo está dando empujones para ver esa sonrisa que tanto le gusta de KyungSoo.

Por suerte YiFan y YiXing aceptan en ir, entonces es por eso que dos autos van por la carretera de costa acercándose a un hotel donde habían hecho reservación por el fin de semana. El día muestra un precioso sol y cielo despejado, mismo que agradecen todos porque eso es exactamente lo que buscan para relajarse.

En el auto KyungSoo no habla mucho... realmente no habla nada, el hombre ha dormido casi todo el camino, y está bien para ChanYeol, que descanse le parece una justa idea.

Cuando llegan al hotel, ChanYeol se siente mal por tener que despertarlo, así que se las ingenia para tomarlo entre sus brazos y llevarlo a su habitación.

YiFan y YiXing le hacen gestos burlándose de él, como si fuera el marido prodigio que cuida a su esposo hasta cuando duerme. ChanYeol los mira como queriendo comérselos, pero la pareja es tan burlona que hasta les toma fotos, posan con ellos y lo molestan tanto que el abogado piensa que terminará despertando a KyungSoo, cosa que no pasa, o al menos hasta que ha llegado a su habitación.

ChanYeol lo deja sobre la cama de esa lujosa habitación que ha pedido exclusiva para KyungSoo. Lo acomoda entre las sábanas y camina hasta la gran ventana para abrir las cortinas y dejar que la claridad del sol entre, así como la respectiva brisa marina que no tarda en dejar un clima que se antoja en toda la habitación.

Al abogado le encanta el mar, podría vivir cerca de uno, pero nunca ha pensado la manera en que deba dejar todo para ir ahí. La voz de KyungSoo lo hace girarse y encararlo, regalándole una brillante sonrisa cuando llega a su lado.

— ¿Dormí mucho? ¿Hace cuánto llegamos?

— Recién, pero sí has dormido un buen rato. –ChanYeol se sienta a su lado, estirando su mano para posarla sobre el pequeñísimo vientre de KyungSoo- ¿cómo te sientes?

— Tengo un poco de mareo, pero estoy bien.

— Si quieres descansa más.

— Quédate conmigo.

— KyungSoo, eres un tanto caprichoso.

Y a pesar de esas palabras, ChanYeol se recuesta a su lado.

La charla vuelve sobre el embarazo, a ChanYeol no le molesta en nada tener que hablar de su sobrino, en realidad lo está volviendo loco de alegría.

— Últimamente tengo unas ganas terribles de comer galletas de chocolate, y sabes lo mucho que odio el chocolate.

— Esos son antojos de mi sobrino no tuyos. Él sabe lo que quiere –dedica ChanYeol riendo de cómo los ojos de KyungSoo pelean por mantenerse abiertos- ¿duermes bien?

— Cuando estoy despierto trabajo, cuando intento dormir vomito. Se pueden hacer pocas cosas en la madrugada.

— ¿Cómo esperar a orinar?

— Como esperar a orinar... claro luego vienen mis antojos de chocolate –KyungSoo se acomoda sobre la cama aspirando el aroma que tienen las sábanas, segundos después ya tiene los ojos cerrados- en algunos meses tengo que parecer más activo.

— Está bien descansar

ChanYeol le acaricia la frente, sabiendo que eso lo hará dormir; KyungSoo no dice nada porque está tan relajado que siente dormirá durante todo el fin de semana, pero esa sensación se acaba cuando escuchan ser tocada la puerta.

— Oh no –murmura KyungSoo soñoliento- existe la posibilidad de que si nos quedamos callados tengan que irse.

Los toques vuelven a sonar, obligando a ChanYeol a levantarse e ir corriendo a atender la puerta, encontrándose de frente a un YiFan y YiXing listos con sus bermudas y camisas de verano.

— Señores, hay una fiesta Luau ahí abajo –inicia YiFan moviendo sus hombros bailando, o intentándolo.

— Y ya vi que hay paseos de buzos –completa YiXing bailando con más ritmo que su novio- ¿por qué no están cambiados?

— Estábamos conversando, ¿Verdad Kyung...?

ChanYeol ríe al ver lo rápido que KyungSoo se ha quedado dormido sobre la cama. Sí, estaba bien dejarlo descansar.


..:: ○ ::..


— ¿Y cuándo se supone que dejes de tener tantas molestias? Un embarazo ya no se ve muy divertido –YiXing cruza sus brazos sobre el pecho haciendo un puchero, cosa que hace sonreír a todos de lo adorable que suele verse el menor.

KyungSoo toma un sorbo más de su malteada de chocolate, se queja por tener una malteada cuando los demás tienen una cerveza que tomar –menos YiXing que sólo bebe limonada-, pero lo olvida cuando recuerda el placer que le causa comer una asquerosa y estúpida leche achocolatada.

Han elegido una mesa que tiene una bonita palmera haciéndoles sombra, con la excelente vista del mar como postal y una música lejana que suena al ritmo muy característico de las fiestas veraniegas, aunque estén a mitad de primavera.

— Según mi estúpido doctor... en dos meses más. Aunque las molestias ya serán dentro de mí.

— No le digas estúpido al doctor –interviene ChanYeol- recuerda que te dije no hacerlo y tu quisiste.

— Este bebé me hará viejo.

— Esperemos a cuando nazca –dice YiFan tomando de un trago el cuarto de cerveza en su vaso. Un suspiro fresco hace reír a todos.- mientras yo bebo por ti.

— Yo quiero –dice YiXing obteniendo una negativa de su novio.

— Aun no.

— Pero no soy tan joven ya.

— No te sientas mal por ser menor –dice YiFan pasándole su teléfono móvil- te pondré Angry Birds para que te distraigas.

— Tengo diecisiete, Fan.

— ¡Entonces puedes ponerlo tú solo!

YiXing frunce su seño y se levanta con la típica energía de un adolescente, dejando a todos con sorpresa al ver su arrebato para irse furioso a la playa. KyungSoo y ChanYeol miran muy mal a YiFan, que rápidamente se encoge en hombros.

— Ya se le va a pasar.

El par de abogados toman de sus bebidas y cambian el tema por el bien de la paz que debe sentirse cuando se viaja a descansar ¿cierto?

KyungSoo camina por la orilla del mar dejando que sus pies se hundan un poco en la arena mojada, haciendo que se sienta relajado con tan sólo esa sensación. En su mano descansa la mitad de una barra de chocolate, de verdad no ha parado de comer esa cosa tan asquerosa pero deliciosa a la vez.

A su caminata se suma ChanYeol, que con gran sonrisa muerde una manzana para luego dársela al más bajo.

— Relájate, esto será muy bueno.

KyungSoo asiente, y no teme en tomar la mano a ChanYeol que lo acompaña de esa forma por toda la orilla.


No sé, te amo. »ChanSoo / KrAyWhere stories live. Discover now