KIRUGIRU

3. Mamá pika

¿Qué mejor que pasar tiempo con las personas que amas? Killua estaba muy cómodo escuchando historias y riendo de las anécdotas de Leorio, a él le iba bien en la universidad, dormía poco y se la pasaba estudiando, pero valía la pena en el esfuerzo y  sentía que esa pequeña reunión era casi como una recompensa después de tanto tiempo.

Kurapika se desahogaba un poco, quejándose de su jefa, pero lo hacía con tanto respeto y educación que era difícil descifrar si estaba siendo sarcástico o en realidad le agradaba la niña, como siempre Gon lo interpretaba de la mejor forma, no conocía a la muchacha, pero alguien que tuviera el poder de predecir el futuro debía ser alguien increíble con muchas cosas interesantes que contar y mucho misterio de por medio, el pobre no alcanzaba a comprender que solo se trataba de una niña mimada que tuvo mucha suerte en la repartición de habilidades.

Killua y Alluka hablaron de lugares maravillosos, fue una suerte para ellos perderse en más de una ocasión o no habrían dado con los lugares que conocieron. Simplemente parecían sacados de algún cuento o de un sueño, para ambos era difícil describir con claridad todo lo que habían visto, no había con que compararlo y en muchas oportunidades llegaron a creer que estaban en el "continente oscuro".

Por otro lado estaba Gon que no tenía mucho que contar, había perdido mucho tiempo al tener que recuperarse, pero estaba seguro de que ahora con Killua a su lado podría volverse más fuerte en poco tiempo, solo tenía que entrenar como habían hecho antes y ya.

Estaban muy animados hablando y comiendo algo un almuerzo y snack. El ambiente no decayó cuando en un ataque de risa Leorio dejo caer una gran botella de refresco a medio abrir, dejando totalmente empapado al albino. Killua había bajado la guardia y no pudo reaccionar a tiempo, para cuando se dio cuenta ya estaba todo mojado.

Tenía muchas ganas de matar a Leorio en ese momento, pero sabía que no era su culpa. Basto solo una mirada para hacer entender al rubio que si había logrado ver sus cadenas en medio de ese accidente.

Leorio se disculpó con miedo del pequeño asesino y corrió por una toalla. Gon y Alluka no paraban de reír en diferente nivel.

−Bleh...ahora quedare todo pegajoso.- Se quejó el albino, aun intercambiando amenazadoras miradas con Kurapika.

−Leorio, por que no vas con Gon a comprar más refresco y mientras Killua se baña, Alluka−chan y yo ordenamos aquí, ya casi no hay diferencia de lo que es comida y lo que es basura.- Leodio estuvo de acuerdo con Kurapika y sin notar nada extraño, se llevó a Gon con el plan de comprar; además, más cosas para comer.

Cuando los morenos se fueron y Alluka se movía animada cargando platos sucios de la sala a la cocina, Killua y kurapika quedaron solos, el tiempo suficiente.

−La venda terminara por lastimarte, solo acepta la realidad y di la verdad−Dijo el rubio, levantando algunas cosa, haciendo que Killua se congelara en su camino al baño.

−De qué estás hablando?

−Gon es muy ingenuo, dudo que se dé cuenta por sí mismo, aun eres muy joven para que Leorio lo note. No diré no me engañaste, en realidad no me di cuenta de nada hasta que nos topamos con Yorknew city y fue gracias a Senritsu, ella se dio cuenta primero.

−Por qué no dijiste nada hasta ahora?- ya no tenía necesidad de ocultarlo o seguir sacando información, Kurapika lo sabía.

−Supuse que tenías tus motivos, hoy creo que en realidad no sabes cómo decirle a Gon que en realidad eres una chica, pero ya deberías saber cómo es, no le importará.

−No tienes como estar seguro de eso...desde el comienzo él esperaba un amigo.

−...has lo que quieras, pero tarde o temprano tendrás que decirle la verdad.

Killua se apresuró al baño, quería terminar antes de que regresaran. Por culpa de Kurapika la venda se había mojado y no tenía más, algo se le tenía que ocurrir para ocultar los bultos en su pecho.

Fuera, Alluka y Kurapika hablaban del tema. No iban a decirle nada de eso, estaban ideando un plan para que se terminará todo ese asunto del secreto, pero ninguno estaba muy seguro de que fuera buena idea intervenir. Ninguno de los dos conocía tanto a Gon como para entender que era lo que Killua temía tanto, el moreno no le iba a juzgar, eso lo sabían ambos.

Los chicos llegaron de las compras un poco antes de lo esperado, Killua no llevaba mucho en el baño y seguramente aún no estaba lista, pero Gon y Leorio estaban impacientes con seguir. Kurapika intentó detenerle, pero el joven Moreno insistió en ir por su amigo y apresurarle un poco. Apenas entro vio a Killua a medio vestir, pero no pudo dar con detalles, una cubeta del baño le dejo plana la cara y le sacó del pequeño cuarto. No escucho nada de lo que le grito, el golpe fue tan duro que le dejó inconsciente por un buen rato, para cuando despertó, Killua y Alluka ya habían regresado a hotel y era bastante tarde.

No sé porque siempre me guardo tanto tiempo los  capítulos, como que me da paja publicar.