Souvenir || l.s

1. Roma

Pasan dos semanas desde la vez que Louis conoció a Harry, y dos semanas desde que tiene la pequeña hoja de Arce reposando en la mesa auxiliar al lado de su cama en su departamento.

Louis no lo ha olvidado, y no cree que nunca vaya a hacerlo. Ese breve encuentro con el chico de rizos de verdad se sintió como el comienzo de algo. Llámenlo romántico sin remedio, pero realmente estaba esperando que ese 'Definitivamente, tal vez' (que por cierto, pasó esa noche riendo tontamente ante el recuerdo, al darse cuenta que Harry había citado el título de la película) fuera más que sólo una referencia cinematográfica.

Está, sin embargo, perdiendo la esperanza lentamente cuando se pone su uniforme la mañana del lunes y echa una última mirada rápida al souvenir en su mesa de luz antes de partir.

Tal vez Harry sea una de esas personas que te cruzas una vez en la vida y cambian tu perspectiva sobre todo.

Excepto que Harry aún no cambió su perspectiva sobre nada, así que quién sabe.

...

Louis está guiando a una pareja de ancianos a sus asientos cuando escucha una voz grave detrás de él.

— ¿Louis?

Tal vez no debería haber volteado tan rápido como lo hizo, pero al ver a Harry parado al final del pasillo, su desgastado bolso colgando en su hombro, no puede evitar la sonrisa que asoma en sus labios.

— ¡Harry! — exclama como saludo cuando ya lo tiene a tres pies de distancia. Es algo incómodo, porque no sabe cómo saludarlo, pero cuando Harry alza su mano hacia él, Louis cree que el típico saludo de manos está bien por ahora—. ¿Cómo has estado?

El más alto sonríe, y son los mismos hoyuelos, los mismos rizos, los mismos ojos jade de hace dos semanas y todo golpea a Louis a la vez.

— Bien, trabajando en las fotos del último viaje—. responde jovialmente, como una fresca margarita a pesar de que son las ocho de la mañana—. ¿Y tú?

El castaño se alza de hombros, no hay mucho que contar.

— Lo típico, volando de aquí para allá.

Asiente y alguien pide permiso para pasar por el pasillo. Ellos terminan avanzando hacia el asiento de Harry, aun charlando.

— ¿Volaste a algún lugar interesante? — pregunta el rizado, echando su bolso en el suelo y sentándose en el lado de la ventana, Louis apoya su peso en el respaldo del asiento junto a él.

—Nah, lo usual — comenta, deteniéndose a pensar un momento—. Volé a Nueva Delhi la semana pasada— reflexiona al final.

— Nueva Delhi es hermosa.

— ¿Has estado allí?

Sacude la cabeza.

— Está en mi lista.

Louis asiente, pensando que él debería hacer también una lista de lugares que no le molestaría visitar algún día.

— ¿Vas a quedarte mucho tiempo en Roma? — le pregunta finalmente, y Harry vuelve a negar.

— Voy sólo por la exposición en el Coliseo esta noche, luego tomaré el vuelo de la mañana.

— Volveremos juntos, entonces — comenta Louis, arrepintiéndose al instante, porque suena muy íntimo para dos personas que apenas se conocen.

Harry sonríe, sin embargo.

— ¿De verdad? — pregunta, un destello de emoción en su voz.

— De verdad.