Tallé mi espalda con una de las diversas esponjas con las que contaba el baño, mi piel tenía una sensibilidad muy presente últimamente, parecía que las cicatrices que fueron hechas por Garden no estaban del todo curadas. Recordaba una de ellas en especial: fue hecha por un cigarrillo y por la mordida de Garden; él había disfrutado escucharme gritar y gemir de dolor mientras presionaba el cigarrillo y después mordisqueaba esa área con la dentadura amarillenta que tenía. Cerré los ojos con fuerza y respiré profundo.

Terminé de secarme el cuerpo cuando un sonido en la habitación llegó a mis oídos, era un suave silbido, entreabrí la puerta y mis mejillas sé enrojecieron al ver el torso desnudo de Adam, tan sólo un par de shorts lo cubrían y no parecía importarle cambiarse tan libremente junto al cuarto de baño del cual yo podía salir en cualquier momento.
Cerré la puerta con mucho cuidado y sin hacer ruido, si me quedaba al menos unos minutos en donde estaba, con suerte al salir, Adam ya estaría vestido.
Me refresqué la cara para bajar el calor que sentía. Conté hasta cien y salí.
Adam estaba sentado en la cama mirando con atención la pantalla de su teléfono, al menos estaba vestido.

― ¿Cómo estuvo la ducha? ― preguntó levantando la vista―, te ves muy pálida ¿estás bien?

―Eso pasa cuando estás en el agua mucho tiempo― sujeté con fuerza la toalla― ¿podrías salir para cambiarme?

Asintió. ―Claro, privacidad, ¿dónde estuvo mi privacidad hace cinco minutos? ― abrí la boca para protestar―, sí me di cuenta, Emily, me siento ultrajado― dramatizo para después reír―, te veo en el comedor, espero que hayas disfrutado la vista, porque no lo vas a volver a ver, por ahora.

Salió lentamente de la habitación, tenía ese andar elegante y erguido desde que lo había visto por primera vez, aún me parecía raro. ¿Acaso todos los riquillos habían adquirido el andar de esa forma?
Cerró la puerta a sus espaldas y desapareció, me aseguré que tuviera el pestillo puesto e inmediatamente comencé a buscar algo de ropa decente para bajar a cenar.
Normalmente, para cenar, solía usar un short y una camisa que apenas me quedaba, pero desde que había llegado aquí, no era más que usar vestidos, faldas, y zapatos planos, ¿quién se viste así para una simple cena familiar? Vamos, después de cenar te duermes, no vas a ver al presidente o a la primera dama.
La cabeza me daba vueltas apenas y salí de la habitación, últimamente me sentía muy agotada y mareada, Adam tenía razón, necesitaba comer. Pero no lograba hacerlo.

ADAM'S POV

Alelí tomó asiento, nerviosa, comenzó a juguetear con los utensilios y apenas y levantaba la vista, mi madre aún tenía la cara llena de furia, la idea de que Alelí fuera mi invitada a cenar esta noche, no le pareció para nada. Alexander tomó asiento junto a ella e inmediatamente comenzó a hablarle, en un intento de hacerla sentir mejor. La silla de mi lado seguía vacía, Emily estaba tardando bastante en bajar y comenzaba a preocuparme que su falta de alimentos la estuviera retrasando, ¿se habría desmayado?

―Uh uh, mira que linda se ve tu novia― Derek levantó la barbilla hacia un lugar detrás mío―, bienvenida a la cena.

Emily tomó asiento junto a mí, me sonrió brevemente y se dedicó a observa el plato vacío frente a ella, había un ligero temblor en sus manos, acerqué cautelosamente una de mis manos a su brazo; se sobresaltó cuando le tomé la mano y acaricié sus nudillos.

― ¿Estás bien? ―asintió, una de las criadas sirvió la cena, Emily hizo una mueca― ¿qué sucede?

―No tengo apetito.

Tomé una de las cucharas de Emily y la sumergí en su sopa.―Juro que te alimentaré como niña pequeña si no cenas algo.

―Adam...

ADAM - en edición.Where stories live. Discover now