El Sirviente.

la dama del espejo.

Hace tiempo que que las cosas cambiaron aquí , según tenemos el respeto de todos, a decir verdad todos se han dado cuenta que ahora somos mas poderosos.

- Tom tu ...recuerdas a mi familia?.

Tom dejo los cubiertos en la mesa y esperó un momento antes de contestar.

- por que?.

Suspire y lo mire a los ojos.

- no se quisiera saber como fue mi familia, solo eso.

Tom tomo un poco de vino y se aclaro la voz para comenzar a hablar.

- tu padre era un hombre muy estricto, todo le gustaba a la perfección, era algo alto, cabello negro y ojos que daban miedo, muchas veces le tuve miedo, en cambio tu madre ella era muy linda, rubia , no se parece a ti a decir verdad, se parece mas a tus dos hermanos, Andreas y Kristopher, ellos siempre fueron buenos con todos.

- sabes?, desde hace tiempo veo ..a una mujer en el espejo de la chimenea, me mira y...me da miedo Tom.

- estas cansado, tanto peso que llevas a diario entre la casa y las fabricas ya te están cobrando, diré a Esther que te prepare un te.

Divise a tom y no dije nada mas , no quería preocuparlo diciéndole todo lo que me pasaba.

Seguimos desayunando y poco después Tom se fue a el viñedo , yo espere a Esther con el te.

- el joven Tom me dijo que quería un te, le traje este de pétalos de rosa , es buen relajante.

- gracias Esther, sientate quiero platicar con tigo sobre algo.

Esther se sentó frente a mi.

- diga me joven.

- Esther... Te ah pasado  cuando tienes un sueño extraño y sientes que es la continuación de otro sueño que no recuerdas a ver tenido.

- cuando yo tenia su edad conocí a su madre, era igual a usted en ese aspecto, ella sin saber poseía su mismo don.

Me intrigo.

- cual don?.

- tienes el poder de ver el pasado y el futuro, su madre lo perdió después de que usted naciera, ya veo quien lo tiene ahora.

- todo mundo parece conocer a mi familia menos yo , maldigo a quien hizo que todo el incendio y acabo con mi familia.

Dije molesto.

- Jesús, Maria y José. Nunca vuelva a maldecir joven y menos a....

Esther hizo la señal de la cruz y me dejó intrigado.

- y menos a quien Esther? Dime.

- a nadie joven, termine su te yo...voy al pueblo por lo de la semana.

Entre Esther y las malditas alucinaciones o sueños que tengo van a terminar matando me.