¿Debería casarme? (parte I)

941 59 6
                                    


Ashley me pidió que cuidara de Shay puesto que ella había tomado más que todas, la verdad no recuerdo cuantas copas tomó, estuve tan boba mirando cada facción de ella, era perfecta, no, es, ella es perfecta, su cabello, su sonrisa, su voz, sus ojos, su cuerpo, sus caderas, comencé sentirme algo extraña con esos pensamientos, pero, era inevitable no pensar en eso si estoy mirando su espalda desnuda mientras esta en el lago, su piel, es hermosa, estoy tan enamorada de ella, la necesito, me estoy cuestionando mucho si debería casarme mañana con Hudson, es un buen hombre, pero no es Shay ¿Debería casarme con él? Y si...

- ¿Sasha? – Esa voz me hizo entrar en razón y me aleje de esos pensamientos.

- Ho... Hola... Shay - ¿Qué demonios? ¿Por qué estoy tartamudeando? Su cuerpo está sumergido en el agua y sólo puedo ver su cuello y su cara... Está desnuda...

- ¿Sash?

- ¿Si?

- ¿Estas bien?

- Si ¿Por qué?

- Pareces, algo distraída...

- Bueno, estas desnuda frente a mi, eso me distrae mucho...

- Jajaja, lo siento, no...

- Espera... ¿Si estas desnuda? – Pude sentir como una corriente pasaba por todo mi cuerpo, llegó en mi punto más sensible y cruce las piernas para tratar de evitar algo, no sé qué quería evitar, igual y no podría

- ¡Sasha!

- ¿S... SI? – Jamás me había costado tanto trabajo hablar

- ¿Qué te ocurre? ¿Te sientes bien? ¿Segura?

- ¿Por qué dices eso? Si, estoy bi...

- Estas respirando muy agitada...- Esta saliendo del agua y... Esta... Esta... ¡No! Se cubrió con una manta...

- Sasha...- Dijo sonriendo, dios, es hermosa.

- Shay... ¿Qué tal esta el agua?

- Oh, esta deliciosa, se supone que debería estar fría pues ya es tarde pero esta a temperatura ambiente

- Perfecto- Dije mientras me desvestía, pude ver como Shay abrió los ojos mientras me quitaba la ropa

- Qué... ¿Qué haces?

- Entraré al agua ¿Está mal?

- N... No...

- De acuerdo- No me quité la ropa interior porque, bueno, eso me mantenía controlada. Entré al agua y sentía la mirada de Shay, dios, el agua podría estar más helada que el polo norte y aún asi, el calor que sentía no se iría, la necesito, necesito estar con ella, en todos los sentidos posibles y hasta en los que parecen imposibles. Sentí unas manos tomar mi cintura lentamente, pude sentir esa corriente recorrer nuevamente mi cuerpo más fuerte que la primera vez, mi centro estaba húmedo y no, no sólo era por el agua, mi piel estaba más que erizada, sus brazos me rodearon y sentí sus pechos en mi espalda, la corriente volvió aún más fuerte ¿Podría ser más fuerte aún? Sentí como su respiración chocaba con mi cuello, o no, no puedo con esto, es... es demsiado, solté un pequeño gemido en cunto su labios húmedos tocaron mi cuello, quizé voltearme y besarla, pero ella no me dejó

- No... Aún no... - Dijo mientras su mano derecha iba bajabando, ambas sabíamos lo que estaba por pasar, yo no podría detenerme si ella... ¡Oh dios mio!

- Sasha...

- Sh... Shay...- Ella quitó su mano derecha de mi centro y me dio la vuelta, la ví a los ojos, estaban encendidos, estaban llenos de amor, de lujuria, de pasión...

- ¿Confias en mi?

- Te confió mi propia vida ¿Tú que crees?

Ella sonrió ante ese comentario – Bien, entonces, salgamos del lago y vistámonos- ¿Qué? Espera, ella no puede hacerme eso

- Shay no me hagas esto...

- ¿Hacerte qué?

- No puede simplemente ponerme asi y abandonarme

- Sash, jamás dije que te abandonaré, sólo, quiero llevarte a un lugar

- Son casi las 11 de la noche, no hay ningún lugar abierto, quizá centros nocturnos pero...

- No, no, no, es un sorpresa, además, no iría a un centro nocturno contigo...

- ¿Por qué no? Soy buena compañía...

- Yo no iría a un centro nocturno para ver a otras mujeres, no cuando tengo a la mujer que tanto amo frente a mi...

De acuerdo Mitchell, me dejaste sin palabras y con la ropa interior arruinada – Yo...-

- Shhh, ya pequeña, salgamos y vistámonos

- Pero... ¿Y las demás?

- Ya deben estar en coma

- No luces ebría...

- Tú eres la única que me puede poner en mis cinco sentidos y a la vez hacerme perder la razón

- Shay – Fue lo último que dije cuando la besé ¡Por dios! Sus labios son perfetos, tienen un sabor único, como ella...

- Vamos – Dijo, mientras se ponía su ropa y yo me secaba con la manta para empezar a vestirme.

No entramos a la cabaña, la rodeamos y entramos al auto, antes de arrancar, Shay me miró a ver 

-Existen lugares en el mundo que son perfectos porque lucen hermosos...

- ¿Eso que significa?

- Ahora verás...

SashayWhere stories live. Discover now