Cuanto Te Necesito

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Bueno, empecemos con lo básico.

Me llamo ____, mi apellido realmente no importa en este momento.

¿Mi familia? Ellos creo que no me necesitan.

Cuando recién cumplía los 14 tuve la loca idea de independizarme, mi Padre no podía negármelo era lo único que me podía dar que me haría feliz al instante.

Mi Padre me miraba desconcertado.

¿Que has dicho ____?― Pregunto mi Padre mientras llevaba una mano a su frente.

Suspire pesadamente y me dispuse a repetirle lo anterior dicho.

―Te dije qu....-

¡Escuche perfectamente lo que dijiste!― Grito.

Me estremecí, me hice para atrás mientras hacia una mueca y bajaba la cabeza como niña regañada.

―Sabes que yo no soy el malo aquí ____. Hemos hablado varias veces sobre esto.― Suspiro. ―El mundo allá afuera es cruel y peligroso, no tendrá ninguna pizca de piedad al destrozar a personas como tú. Yo solo trato de protegerte y evitar qu....-

―Papa, yo....y-yo que quieres protegerme pero mírame, hoy cumplo 14 años la mayor parte de mi vida ha sido un encerramiento. Por favor por lo que más quieras déjame ser normal el resto de mi vida.―

Mi Padre voltio a verme con una leve sonrisa. Se acerco y posiciono su mano en mi cabeza mientras lentamente acariciaba mi cabello con dulzura. Me susurro ―No somos normales―

Nada me haría negarlo, estaba en lo correcto. No somos normales y jamás lo seriamos. Pensar que nunca podre ir a la escuela, tener amigos e incluso salir con ellos Me atormenta demasiado, los pensamientos contradictorios me consumen lentamente llegando a corroerme en un pozo sin salida.











»□ .... □«











Mi vista recorrió cada detalle de toda la habitación. Mire indeterminadamente el reloj de la mesita de noche. Eran las 8:46 PM, solo unos cuantos minutos pasados de la cena. Salí de mi habitación arrastrando los pies mientras bajaba las escaleras vagamente. Allí se encontraba mi Padre sacando la comida del horno. Desde que mi Madre....bueno, simplemente es un tema difícil de tratar. Solo diré que mi Padre es muy bueno ocupando el rol de Madre y Padre al mismo tiempo, al menos me gusta lo que cocina.

Pase seguido de él ignorándolo agarrando un par de platos, 3 para ser exactos, escorándolos alrededor de la mesa. Me senté en una de las sillas mirando fijamente mis pies debajo de la misma como si fueran lo más sugestivo del mundo. Mi hermano bajo corriendo por las escaleras llegando a tropezarse a través de estas, al pasar junto a mi me dedico una gran sonrisa mientras revolvía mi cabello salvajemente haciendo que unos cuantos mechos cayeran delante de mi cara obstruyéndome la vista. Retire su mano violentamente mientras le lanzaba una mueca de molestia. Solo podía oír como daba pequeñas risitas pasando por la puerta de la cocina. Mi Padre salió con la comida mientras usaba un par de guantes azules agarrando las orillas del plato, no puede evitar examinar con la vista los guates de cocina que este traía eran los que solía utilizar mi Madre siempre que había una ocasión especial ¿Se estará burlando de mi? No hay nada que celebrar....bueno, mi cumpleaños, pero eso no evitaba el hecho de que se había comportado muy grosero en la tarde conmigo. Sacudí mi cabeza apartando los pensamientos contradictorios de ella. Un olor en especial capturo mis fosas nasales mire de reojo el platillo que mi Padre había hecho para la cena. Era (C/F), mi comida favorita en todo el mundo bueno universo hablando entre nos. Oí un par de risitas a mi costado, era mi Padre junto a mi hermano quienes se dedicaban a ver lo asombrada que estaba, cerré la boca mirando hacia una dirección opuesta hacia la de ellos ignorándolos olímpicamente. Lo último que me faltaba....

Solo Imagine Que Iba a Ser Maravilloso  [ Rick Sanchez Y ____ ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora