ÁMAME O DÉJAME

Capítulo 24

Entre los pocos asistentes que se encontraban en la ceremonia, cada uno de ellos saludaron a la pareja tirándoles arroz y pétalos de rosa deseándoles la mayor felicidad del mundo.

A continuación se marcharon a un restaurante para celebrar su unión. Tanto Yanira como Charlie se mostraban felices y dichosos de poder estar juntos. A pesar de sus inseguridades su amor a triunfado.

Mientras tanto, Olga y Rafael debatían sobre las críticas que se emitían en distintos canales de televisión hablando sobre Yanira y las declaraciones que hizo aquel día antes de tener el accidente.
Tanto Olga como Rafael estaban indignados y rabiosos de no poder hablar con Charlie. Había pasado cerca de un mes y su hijo no les respondía al teléfono, no iba a su casa y en la oficina no paraba mucho.

Días después se presentaron en la casa de Charlie con la intención de hablar sobre las declaraciones que habían escuchado por supuesto con la intención de que abriera los ojos y al poder ser que odiara a Yanira.
Pero para su sorpresa quien los recibió primero fue Yanira.

Al verla allí en casa de su hijo cocinando, Rafael y Olga se pusieron a la defensiva.

--¿Se puede saber que hace usted aquí en la casa de mi hijo?--Preguntó Rafael el primero sin salir de su asombro.

--Buenos días señor Arasi. Estoy preparando la comida, ¿desean quedarse y comer con nosotros?--Le respondió Yanira amable sabiendo que no era santo de devoción de sus suegros.

--Jamás comería contigo. --Gritó Olga. --Qué, ahora le preparas la comida a mi hijo después de calentarle la cama.

--Mire Olga, no le voy a consentir que me falte el respeto. ¿Entendió?

--Cállate mujerzuela. Ahora te la das de decente cuando han salido fotos tuyas besándote con Alexander. ¿Acaso es que te confundes de hermano?

--¡Basta ya mamá!-Gritó Charlie poniéndose delante de su mujer encarando a sus padres.

--¿Charlie que estás haciendo?

--Defender a mi mujer. Y no voy a consentir que vengáis a mi casa a faltar el respeto a mi mujer.

--¡Oh no! Lo que me faltaba por escuchar. Ver para creer.--Olga se echó su mano a su frente mientras que Rafael se queda inmóvil mirando a su hijo.

--¿Te has casado con ella?--Preguntó sobrecogido Rafael.

--Si padre. Yanira es ahora mi esposa, y para que le quede claro fui yo quien se lo pidió. Ahora que lo saben, dejen de juzgarla. Me encantaría que la conocieran para que vean que lo que dicen esas revistas es todo falso.

--Charlie no me esperaba esto de ti. Esas revistas llevan hablando de ella desde semanas. Nuestras amistades nos miran como bichos raros por culpa de tú mujer.

--Pues váyase a quejar a la prensa. Venga sentémonos a comer.

--Lo siento hijo. Pero nos has defraudado, por lo que veo ya has elegido. Ella ahora es tú mujer, espero que seas feliz y no te arrepientas del error que has cometido al casarte con ella. -El rostro de Rafael mostraba desilusión por lo sucedido. Agarró a su mujer del brazo y sin mirar para atrás se marcharon.

Yanira observó como Charlie bajaba su cabeza dejando que algunos mechones de su cabello le tapasen la cara. Ella se acercó a él, le acarició su rostro y lo besó amorosamente. Al separarse, los dos se miraban entristecidos. Yanira intentó explicarle a Charlie lo que sucedió aquella tarde que pasó con su hermano, pero él le puso el dedo índice en sus labios obligándola a callar.

--Tranquila mi linda, mi hermano ya me puso al corriente de todo. Reconozco que sentí celos y una pequeña cólera se formó dentro de mí. Pero todo cambió el día que te escuché pronunciar mi nombre en el hospital, tú te encontrabas medio inconsciente. --Su mano se posó en la mejilla de ella mirándola con adoración le volvió a decir lo feliz que se siente de estar juntos.