Las cosas claras

3.4K 236 13
                                    

23 de Diciembre de 2015

-______- miré por sobre mi hombro con una expresión neutral

-Sí, ¿qué sucede Steve?- contuve una sonrisa, sabía que pasaba

-Podrías venir un segundo... umm... tengo que discutir algo con vos- dijo nervioso, como siempre hacía

-Ajá- murmuré, y me despedí de Natasha, con quién estaba hablando hasta ese momento.

Caminamos en silencio por los pasillos de las instalaciones hasta llegar a un lugar demasiado apartado y solitario, al parecer era nuestro "refugio".

Lo miré expectante sabiendo que vendría luego, él solo me sostendría de la cintura, yo abrazaría su cuello y nos besaríamos como dos locos desenfrenados por varios minutos, hasta que alguno de los dos se iba, como veníamos haciendo desde hacía más de 10 días, cuando fue la fiesta de Tony.

Flashback:

La falta de aire nos atacó segundos después, obligándonos a separarnos, frente contra frente, nos quedamos admirándonos el uno al otro. El beso había dejado mis labios hinchados, y suponía que el brillo labial estaba ligeramente corrido, pero no me importaba, acababa de probar la mejor droga de todas y no quería dejarla ir.

Agarré su nuca de manera posesiva y lo atraje hacia mí, presionando su boca sobre la mía, volviendo a sentir la adrenalina corriendo por mis venas, y el calor subiendo por mi cuerpo.

Oí un gruñido de su parte cuando el ascensor se abrió, obligándonos a separarnos.

-¿En serio? ¡No podés estar siendo serio!- farfulló Rogers con una sonrisa que exudaba sarcasmo, refiriéndose más al barbudo grande del cielo con un sentido retorcido del humor, que a la persona que acababa de entrar a la sala.

-¿En serio? ¡No podés estar siendo serio!- farfulló Rogers con una sonrisa que exudaba sarcasmo, refiriéndose más al barbudo grande del cielo con un sentido retorcido del humor, que a la persona que acababa de entrar a la sala

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Rogers... te buscan- Sam arrastró las palabras, claramente bajo el efecto del alcohol, lo que creo que era bueno, ya que no mencionó nada al respecto de nuestra cercanía.

Steve lanzó un pequeño suspiro y se encaminó hacia el elevador, no sin antes guiñarme un ojo y susurrarme al oído cuatro simples palabras. "Después vamos a hablar".

Fin de flashback.

De todas formas la charla nunca llegó, supongo que no hubo oportunidad de tenerla... o quizá si la hubo, pero aprovechábamos el tiempo besándonos, en vez de hablar de algo que claramente ninguno estaba preparado para hacer.

Fue por eso que me asombré cuando Steve se recostó sobre una de las paredes del edificio y con mucho esfuerzo, pronunció las primeras palabras -no referentes a entrenamientos o escusas para irnos juntos- en los 12 días que llevábamos besándonos.

-Esto tiene que parar- mi estómago se dio vuelta con una rapidez significativa, parpadeé varias veces sin emitir sonido, estaba cortando conmigo, ¡Ni siquiera éramos novios mierda!

-Si es lo que querés...- dije con esfuerzo, para que negarlo, me encantaba y la oportunidad de estar con él se me escapaba por las manos como agua.

-Sí, así no vamos a ningún lado, eso hay que dejarlo en claro- su tono era solemne pero la alegría se hacía notar, lo que me dejó más desconcertada.

-Está bien- susurré, conteniéndome para no partirle la cara, si quería deshacerse de mí, ¡al menos que finja tristeza!

-Se mi novia, no quiero besarte de nuevo sin que seas mi novia- abrí los ojos en magnitudes desproporcionales.

-¿Qué caraj...?- la pregunta se quedó en el aire cuando tomó mi cara en sus manos y plantó un pequeño beso sobre mis labios.

-Se mi novia- repitió dándome otro beso, sonreí levemente y lo aparté de mi

-¿No habías dicho que no besarías hasta que sea tu novia?- pregunté alzando una ceja, sin embargo no pude evitar sonreír -Todavía no te contesté-

-Ya se la respuesta- dijo acariciando mi mejilla con una sonrisa triunfante

-¡Por supuesto que no! Primero que nada, porque soy una persona impredecible, y segundo, porque... ¡Al diablo! ¡Obvio que sí!- chillé con alegría besándolo yo esta vez.

-Lo supuse- afirmó, ganándose un puñetazo de mi parte -¡Auch! Sabías, es incorrecto golpear a tu novio-

-Novio- chasqueé la lengua -Suena lindo... Steve Rogers, mi novio- miré mis uñas con prepotencia, como quien se jacta de un logro de naturaleza imposible -Puedo decir en este instante que mi padre va a estar muy celoso-

-Voy a saber manejarlo, seguro es un suegro estupendo- reí divertida

-Celoso de mí, a eso me refería, va a estar celoso de que yo sea tu novia Rogers...- ambos nos reímos, y él me atrajo hacia sí.

-Deberíamos besarnos-susurró contra mis labios -Para celebrar- lo dijo con falsa seriedad, como para justificar la situación.

-Claro, para festejar...- entorné los ojos divertida, sonriendo como una boba, mientras nuestras bocas se fundían, podría acostumbrarme a esto rápidamente.

- entorné los ojos divertida, sonriendo como una boba, mientras nuestras bocas se fundían, podría acostumbrarme a esto rápidamente

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Pasamos la mayor parte de la tarde dando vuelta por las instalaciones, hablando sobre cualquier cosa, y besándonos cuando sabíamos que nadie nos vería.

-Así que no decimos nada- afirmé

-No, al menos hasta año nuevo, esperemos que nadie se dé cuenta antes-

-Si seguimos así, se van a enterar en tres segundo- dije cuando escuché risas acercándose -Como te decía, creo que estaría bien hacer un inventario de las armas que tenemos, sobre todo las de entrenamiento... Ah, hola chicos- saludé como si nada hubiese pasado, Steve seguía con el ceño fruncido, no creo que le haya gustado mi facilidad para mentir, pero prefirió callarse y asentir

-¿Tienen las cosas preparadas?- preguntó Sam, completamente ajeno a la situación, golpeé mi frente -Eso es un no...- afirmó

-No, claro que no, ¿cuándo salimos?- preguntó Steve, quien había contestado por mí.

-Veinte minutos- respondió la rusa, sin escuchar nada más salí corriendo a mi habitación para preparar el bolso.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

-Dos remeras, tres buzos, un jean, un jogging, ropa interior y zapatillas, ¡listo!- repasé en voz alta lo que había metido en mi equipaje mientras agarraba mi cepillo de dientes, pasta dental y un peine.

Salí al trote hacia la pista del jet, me quedaban 3 minutos, y todos odiábamos la impuntualidad. Nuestro destino era Sokovia, al día siguiente era víspera de navidad y esa misma noche repartiríamos regalos a los afectados, regalos que se habían generado gracias a la fiesta hecha por Stark.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Al parecer nunca se publico y quedo como borrador.. Gracias por leerme, 😘😘

Del otro lado (Steve Rogers y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora