LA NIÑERA ( adaptada) AYN

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  NARRA ANGIE

Seguramente hoy, el peor día de toda mi vida, Hoy me quitaran a lo mas preciado de mi vida, me quitaran a Lux.
Ademas, de que sigo sin poder creer que estoy embarazada, y obviamente es de Nicol, porque yo no hago lo que el.
Me levanté perezosamente y me entre a dar una ducha cuando salí me vestí:
Lux se despertó un rato más tarde, también la vestí:
Baje las escaleras, Evaa nos había preparado el desayuno.
Un rato después sonó el teléfono, yo rápidamente corrí al mismo.
-Hola.- dije en tono de pregunta
-Buenos días, te hablo por parte de la Corte, bien, te quería decir que el asistente social, llegara en 15 minutos a su casa.- Dijo la muchacha. Seguramente la misma de la oficina del viejo.
-Bueno.- Dije seca, pero muy triste.- ¿Cuando sabre quien es la familia adoptiva de mi hermana?-
-Eso, no te lo puedo confirmar, pero seguramente, dentro de 5 días, los podrás ver en la Corte, para el juicio.-
-Bueno, gracias.-
-Chau-
Corte el teléfono.
-¿Quien era?- me miro Evaa.
-Era de la Corte, dentro de 15 minutos mi vida se arruinara.- Me senté en la cocina con Lux en mis piernas.
-Angie, No quiero que estés así, le hace mal al bebe.- Me dijo Evaa.
-Si, lo se, pero también le hace mal a esta bebé.- la mire
-¿Cuando sabrás quien es la familia adoptiva?-
-Dentro de cinco días, eso quiere decir, que si le hacen algo a mi beba, yo me enteraré recién dentro de 5 días- Dije molesta.
-Bueno, solo tranquilízate, por favor.- Me sonrió.- Mañana tenemos cita con el ginecólogo.-
-¿De verdad?, gracias Evaa.-
-De nada mi vida.-

Los siguientes 15 minutos, estuve abrazada a Lux. Evaa, solo nos miraba.
Mi pero sueño se hizo realidad. El timbre de la casa sonó. Evaa, me dedico una sonrisa tierna, y abrió la puerta. Una señora de cabello rubio de unos 40 años paso por la puerta.
-Buenos días, tú debes ser Angie-Me estrechó la mano.
-Hola, si soy yo.- Dije con lagrimas en los ojos.
-Antes que nada, déjame decirte, que eres la joven mas valiente, buena. y fuerte que conozco.- Me dijo tierna.
-Solo hasta hoy.- La mire
-Bueno, lamentablemente, Me tengo que ir eso quiere decir que....-
Tome aire, las lagrimas brotaban de mis ojos. Abracé con todas mis fuerzas a la beba.
-Te amo Lux, Te amo, lo siento.- La señora tomo la pequeña manito de Lux, y las vi desvanecerse por la puerta.
Ni bien, Evaa, cerro la puerta, estallé en llanto como una desquiciada.
-Ven, vamos a desayunar.- Me dijo Evaa.
-No tengo hambre, estaré.... solo en mi habitación.- Le sonreí tristemente, y me encerré, así pase toda la tarde, llorando, sin salir, sin comer, sin hacer nada, solo estuve tumbada en la cama mirando el techo. Hasta que finalmente me quede dormida.
-Angie, tienes que comer algo.- Me susurró Evaa.
-Ya voy.- me desperté, mire el reloj, marcaban las 9:45 de la noche. Salí de la habitación, y me senté a cenar con Evaa.
No supe nada mas de Nicola o de los chicos.
-Gracias Evaa, la cena estuvo riquísima.- La besé en la mejilla, y volví a mi cuarto, solo que ahora, me puse el pijama, y me acosté a dormir.