LA NIÑERA ( adaptada) AYN

36 :P

  Comencé a caminar por la entrada de la secundaria, tenía todas las miradas sobre mí, sentía los cuchicheos de la gente.
-¡Angie!- sentí que gritaron a mis espaldas. Me di vuelta, y Lorena, corría hacia mí como una niña pequeña.
-Hola Lore.- respondí cuando ya estaba a mi lado.
-¿Acaso puedes creer que soy la novia de Yaco?- dijo entusiasmada.
-Lore, ni yo me creo que soy la novia de Nicola, ¿quieres que te crea a ti que eres la novia de Yaco?- reímos.
-¿Qué hay de nuevo chicas?- pregunto Mario, rodeándome con su brazo.
-Hola amigo- bese su mejilla.
-¡Soy la novia de Yaco Eskenasi!- grito eufóricamente Lorena, y por la cara de Mario, casi rompe sus tímpanos.
-Genial amiga, pero no grites.- Dije Mario tapándose el oído.
-Lo lamento, es que estoy como si fuera un unicornio, siento que vuelo feliz por los bosques de Narnia.- Dijo Lorena con cara de enamorada.
Mario y yo nos miramos con cara de... (Esta idio** que está diciendo), alzamos las cejas, y no pudimos evitar reírnos ante el comentario de Lorena.
-¿Y tú?- preguntó Mario dirigiéndose a mí.
-Emm.... yo...
-Es la novia de Nicola Porcella.- volvió a gritar Lorena.
La cara de Mario paso de estar así: a estar así :I.
-Lorena, no grites, y me hubiese gustado poder hablar.- dije riendo.
-Lo lamento, mejor me voy a sentar... allá.- Dijo Lorena apuntando a una banca.
-Con que... ¿de novia?- pregunto Mario alzando una ceja.
-Sí, tengo novio- dije sonriendo.
-Me alegro mucho por ti amiga.- dijo Mario con cara algo triste, pero lo deje pasar.
El timbre de comienzo de clases sonó, y yo caminé hasta el salón, mi primera materia del día Historia, genial.
NARRA NICOLA
Después de dejar a Angie en la secundaria, maneje hasta la universidad, en el estacionamiento me esperaban los chicos, Yaco con cara de cursi.
Gino A con la misma cara de chico responsable.
Patricio, estaba mirándose al espejo... que raro. Y Rafael, estaba de la mano con Carol.
Salude uno por uno, y entramos a clase charlando, mi primer materia era Matemática, y me tocaba solo asi que, entre al salón. La mañana pasó volando, al igual que la hora del almuerzo, y ya era de hora de que fuera a buscar a mi Angie.
Me despedí de los chicos. Corrí hasta el estacionamiento, y me subí a mi motocicleta. Conduje hasta la secundaria de Angie, pero no había terminado aun, asi que me senté bajo un árbol, alado de mi moto, a esperar a que Angie saliera de clases.