La Otra Cara de Bella

Capítulo 19: "Reconstrucción (31-10-81)"

P.O.V. Ron

Cuando abrí los ojos, pude visualizar un portón oxidado con el paso del tiempo. Arriba del portón, rezaba: "Valle de Godric". A cada paso qué ellos daban, más se podía sentir el anhelo qué sentían mis amigos y los padres de ellos.

James, el padre de Harry y Bella, tenía una mano enlazada con la última y Lily, tenía su mano junto a la de Harry.

Era un aire tan familiar, qué me sentía devuelta en casa.

Ojalá que, de ahora en adelante, nada cambie. Bueno, si. Solo qué cambie una sola cosa.

El-Qué-No-Debe-Ser-Nombrado.

O cómo mis amigos lo llaman, Tom Riddle o Voldemort. ¡Vaya! No cuesta tanto decirlo al nombre. Si es qué a eso se le llama nombre. Lástima qué ahora es un tabú... ¡Qué tarde para decidir qué ese nombre no tiene nada de miedo pronunciarlo!

A cada paso qué dábamos, pude notar cómo Bella temblaba más con cada paso. Y más, con el estado en el qué se encuentra. ¡Embarazada! Ni más ni menos. Me pregunto qué es lo qué hablaran los cuatro (James, Lily, Harry y Bella) respecto a ese tema...

Íbamos pasando de casa en casa, mirándolas. Cada una de ellas estaba adornada por lucecitas muggles en las ventanas y en algunos árboles. Era muy hermoso. Creo qué le voy a pedir a Hermione y a Bella (cuando todo acabe) qué me enseñen a usar lo que los muggles usan diariamente...

Cada casa en esta calle, estaba adornada con cosas muggle navideñas. Pasamos casa tras casa, mientras James y Lily se ponían cada vez más ansiosos. Yo suponía qué estábamos cerca.

Habíamos llegado a una plazoleta con pasto de unos diez centímetros de alto. El día estaba nublado y casi todo lo qué veíamos estaba cubierto de nieve.

Me aclaré la garganta. Los Potter y Hermione me miraron.

-¿no debería estar protegida por el Encantamiento Fidelio? - pregunté. James Potter asintió y señaló la casa de enfrente, qué estaba en ruinas.

La casa, en sí, era hermosa, hermosa sin contar el agujero qué había en el segundo piso de la misma, donde tendría qué ser la habitación de Harry, y el jardín maltratado junto con las paredes sucias. De primera mano, parecía una casa fantasma. Pero, si la mirabas mejor, te dabas cuenta de qué esa casa desprendía un clima hogareño.

Caminamos lentamente hasta la verja de la casa en ruinas.

Bella era la qué más se había aproximado a la casa.

De un momento a otro, hubo un chasquido cuando la hermana de mi mejor amigo toco la puerta, mostrando carteles en señal de apoyo a Harry y algunos a ella. La mayoría, obviamente, era para el susodicho. Habían escrito grafitis (creo qué se llaman así) con más palabras de aliento. Los Potter sonrieron.

-no debieron hacer eso. - dijo Hermione con mirada reprobatoria.

-a mí me gusta. - dijeron los cuatro al unísono. Me eché a reír por la sincronización de la familia. - es un detalle muy lindo. - siguieron diciendo Lily y Bella. Harry y su padre asintieron de acuerdo con las mujeres.

- ¿Entramos? - preguntó James después de estar unos minutos contemplando la casa en silencio.

-Si... -dijeron Harry y Bella en un hilito de voz.

... ... ... ... ... ... ... ... ...

La estancia era muy hermosa por dentro. Sin contar en las esquinas, qué estaban manchadas con humedad.

El piso, de lado de una mesita ratona, había parte del suelo chamuscado con un dibujo de una figura. Obviamente, donde murió James a manos de Voldemort. Lily, al ver el suelo chamuscado, se estremeció. James la apretó más contra ella.