Capítulo 25 - La Recta Final

Start from the beginning
                                    

"¿Por qué estás siendo un gato gruñón?" él preguntó.

"Porque sí," se encogió de hombros, su estado de ánimo sólo empeorándose.

"¿Porque sí qué?"

"Porque es la mañana. ¿No es razón suficiente?"

"Bueno, sí. Pero además de eso. ¿Qué tienes, querida?"

"Nada. Sólo estoy nerviosa por la presentación."

Max se rió fuerte. "No creo eso ni por un segundo."

"Entonces no lo creas."

Antes de que se diera cuenta, Max la agarró por la cintura y la acorraló contra la pared. "Háblame, bebé."

"Se está haciendo tarde. Nos deberíamos ir."

"No parecía importarte hace un minuto."

"Bueno, tienes razón. Además, necesito más tiempo para alistarme hoy."

Max suspiró fuertemente. "Está bien. Cualquier otro día y no me gustaría esto. Pero tan pronto como terminemos vamos a regresar aquí y me vas a contar todo. Y después de eso, estoy planeando hacerte el amor toda la tarde. No trates de discutir conmigo, no voy a tomar no como una respuesta."

Emma hizo un puchero por un segundo, pero luego sonrió. Realmente le gustaba la idea de la segunda parte. "Eres tan sexy cuando me ordenas, Sr. Durant."

Él se inclinó a besar su cuello y luego susurró en su oreja. "Ponte algo sexy para mí. Eso también es una orden, Señorita Blake," dijo antes de irse y cerrar la puerta detrás de él.

Cuando llegaron a la universidad 30 minutos más tarde, Emma se sorprendió al ver que había un pequeño grupo de estudiantes esperando afuera del salón. ¿Qué estaba pasando?

"¡Oye, Max!"

Se volteó para ver a Tony acercarse a ellos por detrás.

"Te ves bien, hombre," él dijo señalando primero hacia su traje ajustado y luego a Emma a su lado.

"Ey Tony. ¿Qué pasa aquí afuera?" Max preguntó.

"Están atrasados. Como 40 minutos, hermano."

"Ay no, ¿en serio? Típico," Emma se quejó.

"Gracias por avisarnos, hombre," Max dijo. Volteando a Emma preguntó, "¿Quieres ir a un salón de estudio para prepararnos mientras tanto?"

"Este, sí," contestó. "Supongo que te veremos más tarde, Tony. Buena suerte."

"Está bien. Nos vemos chicos."

Ellos subieron para buscar una sala vacía, y Emma se sentó junto a la computadora después de dejar sus cosas. Empezó a sacar su USB para la presentación. "¿Quieres hacer una última corrida entonces?"

Max se quedó en la puerta, mirando por el pasillo. Luego la cerró detrás de él, echando la llave y bajando las persianas sobre la ventana de vidrio. "En verdad no, sólo fue una excusa para escaparnos. Quería tiempo a solas contigo antes de ir ahí adentro," él le sonrió.

"Ah," alcanzó a decir, ya teniendo una idea clara donde esto estaba yendo.

Él le ofreció la mano, indicando que se parara. Una vez que la tomó, la guió hacia el centro de la sala y suavemente la empujó contra la pizarra. "¿Te he dicho lo guapa que te ves hoy?" él preguntó, colocando un mechón de su cabello detrás de su oreja.

Ella lo miró de cerca a sus ojos color avellana. "Eh, creo que sí," ella contestó tímidamente.

"Necesito recordártelo por lo menos una vez cada hora," él respondió, corriendo su mano bajo su cuello. "Me encanta este atuendo. La blusa verde hace cosas increíbles a tus ojos. ¿Te la pusiste para mí?"

Robando A EmmaWhere stories live. Discover now