Soulmate

Capitulo 1: El sol No regresa

Hace días perdí en alguna cantina
la mitad de mi alma más el quince de propina.
No es que sea el alcohol la mejor medicina
pero ayuda a olvidar cuando no ves la salida.

Hoy te intento contar que todo va bien
aunque no te lo creas, aunque a estas alturas
un último esfuerzo no valga la pena.

Hoy los buenos recuerdos se caen por las escaleras
y tras varios tequilas las nubes se van pero el sol no regresa.

Sueños de habitación frente a un hotel de carretera
y unas gotas de lluvia que guardo en esta maleta
ruedan por el colchón de mi cama ya desierta
es la mejor solución para el dolor de cabeza.

Hoy los buenos recuerdos se caen por las escaleras
y tras varios tequilas las nubes se van pero el sol no regresa.

Tony dio otro sorbo a su vaso de tequila y después lo arrojo contra la pared, nadie le dijo nada, sólo le observaron algunos con curiosidad y otros con indiferencia, el cantinero se encogió de hombros y le sirvió otro tequila a la petición del millonario. Él no sabía cuántos llevaba ya, sus sentidos estaban embotados, no era capaz de pensar con claridad, ni siquiera sabía cómo es que aún estaba vivo.

Los acontecimientos aún estaban confusos en su mente, no sabía del todo como es que había vuelto a casa, después de aquella fatídica pelea en la que literalmente le arrancaron el corazón y hasta el alma.

Bebió hasta el fondo su trago y ordeno otro. Estaba por llevárselo a la boca cuando alguien se lo quito. Con la mirada vidriosa observo a la joven rusa a su lado.

—Ha sido suficiente. —Dijo ella.

El moreno la ignoro y cogió nuevamente el vaso dispuesto a beberlo, pero ella se lo quito con un movimiento veloz.

—Te estas matando, algo contigo no está bien Stark.

—Oh en serio, son sólo ideas tuyas, veras ya estoy muerto, hablas con un fantasma, mi asesino, tu querido befo. Ahora esfúmate arañita.

Natasha rodo los ojos y sin importarle nada arrastro al millonario fuera del bar, este estaba tan bebido que poco o nada pudo hacer para resistirse, ella lo llevo hasta la torre donde Visión se encargó del resto, incluso de llamar a un médico pues reconocía que el estado de su creador era cada vez peor, desde lo de Steve y nadie podía entender el bien la causa, salvo que él que sabía lo que los otros ignoraban y que admiraba la fuerza que el castaño mostraba, pues otro omega en sus circunstancias estaría mucho peor, quizá incluso ya hubiera muerto. Una desvinculación como esa no era nada fácil de pasar o de sobrevivir y Stark aun respiraba.

Días después Tony había recibido una carta con un teléfono móvil, esta había sacado una sonrisa en su rostro, pero esta no duro mucho tiempo y ahora con el teléfono en la mano no sabía qué hacer.

Abrió la tapa y entro a contactos donde un único número estaba registrado, un número que estaba grabado en su memoria, deslizo un dedo cercano a la tecla de llamada y la acaricio suavemente sin atreverse a presionarla. Cerró de nuevo la tapa del teléfono y volvió a guardarlo en su caja.

No, las cosas no podían seguir así, sabía bien que no se atrevería a llamarle por miedo, ya había sufrido demasiado por él, no se arriesgaría a pasar por un nuevo rechazo. Aquella carta le había sacado una sonrisa al momento de recibirla, por un momento pensó que era una disculpa, que quizá sólo quizá podrían volver a estar juntos, como compañeros al menos, pero después su mente le jugo malas pasadas y tuvo esos pensamientos destructivos que le decían que él no valía, ni merecía nada. Ese alter ego oscuro que gustaba de auto sabotearlo y cantarle lo defectuoso que por dentro era y lo poco digno de ser amado. Entonces analizo la carta desde otro punto de vista, pensó que no era un intento de limar asperezas, sino una última humillación, un golpe final, porque él capitán le decía: "Los Avengers son más tu familia" Familia ¿Cuál? Si todos lo veían como el malo del cuento y le juzgaban, salvo Rhodey que según él, era el único con razones para hacerlo. También estaba Visión, pero los otros estaban con el capi, no con él.