Fantasías prohibidas de una típica chica (FP#2)

Ahora o nunca(tentaciones #8)

- Es suficiente Emma- mi madre hablo en voz baja pero severa. Una mujer de su clase no podía nunca levantar la voz

Rode los ojos, era por ella que nos habíamos retrasado media hora y solo ahora que daban ganas de entrar al baño, ella ya estaba lista. 

suspire mientras me lavaba las manos. 

En cuanto salí, me tope con mi madre, lucia un vestido color champan, con corsé que le daban una silueta de sirena. Si, la mayoría de mis compañeros morían por follarse a mi madre y dios sabia cuantos chicos de mi edad en adelanta habían visitado su recamara. 

Su cabello castaño estaba recogido en un moño francés y su maquillaje como siempre era sobrio y mínimo

Mi madre constantemente repetía que yo era como mi padre. No solo porque habia heredado su personalidad, pero también porque no habia sido dotada con las curvas asesinas que ella poseía. 

Mi madre era voluptuosa, de pechos grandes y caderas amplias. yo, por otro lado, era alta, delgada y mas bien modesta al frente. 

-Al menos tienes un trasero firme y piernas largas- siempre solía decir después de enumerar todo lo que NO tenia y ella si. 

Hoy solo llevaba un sencillo y recatado vestido rojo, que se amoldaba a mis modestas curvas. Era un cuello que cubría la base del mismo y luego un encaje rojo cubría la piel de mis hombros y pecho hasta que comenzaba el escote con forma de corazón y el cinturón en la misma tela como brillante y suave como la seda del resto del vestido, atenuando mi cintura y levantando mi busto. El vestido tenia un pequeña zona expuesta en forma de ovalo de mi cuello al medio mis pechos. 

Bastante adecuado. 

me puse unos tacones y mi cabello estaba recogido en un estilizado moño que habia dejado abundantes mechones de cabello para enmarcar mi rostro. 

En cuanto a maquillaje, tenia unos increíbles smoking eyes y brillo labial. 

me sentía un poco ridícula, pero me gustaba como me veía y aunque solo iba a ver a un momento de hombres barrigones y casi calvos exhibiendo a sus hijos lindos pero arrogantes o decentes pero retraídos, iba a pasar un buen rato solo mirándolos y riendome de cualquier ridiculez con la que me sorprendieran este año.

Era una fiesta benéfica que organizaban varias esposas trofeos y a la que asistían importantes empresarios y figuras publicas. Habia asistido 3 veces a este evento y en todas y cada una de ellas me había ido 30 minutos después, era exhausto ver como le lamían el trasero a mi madre y corrían como cachorritos enfermos de amor tras ella. 

El viaje en el auto fue todo silencio, bueno por mi parte, porque mi madre estuvo pegada a su teléfono celular haciendo un montón de llamadas y bla bla bla. 

Posamos para la foto como la madre y la hija perfecta pero una vez cruzamos el umbral y dejamos atrás a el fotógrafo, mi madre se dirigió a la barra y allí se encontró con un grupo de sus socios. 

Era la primera vez que habia venido desde que me habia crecido el busto y muchos parecieron notarlo. Resople mientras tomaba una copa de champaña. 

-Te ves tan hermosa y despampanante como siempre- 

Casi escupí la champaña cuando la voz de James invadió mis oídos y su aliento fresco acaricio mi cuello 

-James...- lo que habia querido ser un regaño sonó como un suspiro 

-Hola, Emma- me gire parea verlo y DIOS MIO! James usaba un traje de tres piezas y el pañuelo en su bolsillo era rojo, de un rojo exacto a el de mi vestido.