Fantasías prohibidas de una típica chica (FP#2)

La primera vez (Observados #7)

Hace unos días Alex y Nick estaban fuera de la ciudad, ambos en una sesión de fotos para una gran campaña publicitaria de una reconocida marca de ropa. 

Estaba mas allá de aburrida y necesitada, pero AMBOS, me habían prohibido masturbarme, lo cual me habia parecido ridículo e inmensamente cruel. Ellos habia acordado no hacerlo tampoco y habia estado tentada muchas veces a hacerlo, pero era un reto que tenia que superar y ganar. Si, ellos se habian aprovechado de mi competitividad.

Era domingo, aun me quedaban dos días por delante hasta que volvieran y me encontraba acurrucada en el sofá, leyendo un libro y una escena que me hizo gemir en voz alta, pero no tanto por la redacción o lo que sea era porque me recordaba a la primera vez que Nick, Alex y yo habíamos follado. 

-Nick, no me parece una buena idea- le dije mientras nos escabullíamos entre la multitud. Alex, el chico de ojos verdes que nos habia estado observando y su compañero de apartamento -no podía recordar su nombre- estaban dando una fiesta por el éxito del desfile y de la campaña. 

Nick me pellizco una nalga y camino detrás de mi, su cuerpo pegado al mio, haciéndome sentir su erección contra mi trasero, me mordí el labio

-te necesito- dijo con voz cargada de deseo, mordió el lóbulo de mi oreja y el retumbar de la música haciendo eco en mi cuerpo, elevando mis ganas por él.

Us de movement empezó a sonar y me gire para mirar las luces estroboscopicas iluminar su rostro, sus ojos normalmente cafés, eran casi negros.

Le hice pucheros y me presione contra él -la ultima- no espera por su confirmación empece a moverme contra él, las luces se apagaron del todo, sumiéndonos en la oscuridad, pero la música no se detuvo y estaba mas allá de excitada, el alcohol en mi sangre solo acrecentando la sensación, como para detenerme. 

Entonces una luz blanca, con aquel efecto estroboscopico volvió, haciéndome ver todo como en flashes y fue hay cuando sentí otro cuerpo presionándose contra mi en la parte de atrás. 

Las luces me confundían y la forma en como aquella otra persona se acoplo con las movimientos de Niick y mios era mas que alucinante. 

Sentí la punta de su nariz rosar mi hombro desnudo y incline mi cabeza para darle mas acceso. Me alegro tanto haber escuchado a Nick en cuanto a que vestir cuando sentí la punta de la húmeda lengua del extraño acariciar hacia arriba por mi cuello hasta mordisquear mi mandíbula.

El vestido negro, era demasiado ceñido para mi gusto, estraple y largo. Con una gran abertura en un lado que revelada mi pierna hasta casi mostrar la bragas de encaje que traía. 

Yo habia querido llevar algo mas reservado pero Nick habia insistido y me habia engatusado con su lengua entre mis piernas prometiéndome mucho mas que eso en cuanto llegaramos a casa. 

AL final me habia rendido y me lo habia puesto y gracias a dios por eso, porque los labios, lengua y dientes del extraño tentando la sensible carne de mi cuello y hombros me tenia loca. 

Fue entonces cuando me congele y mire a Nick, angustiada pero el se veía un mas salvaje de lo que yo me sentía. Su mirada estaba fija en mi cuello, sus ojos se veían perversamente eróticos y como si sintiera mi mirada sobre él sus ojos se encontraron con los míos. 

Se acerco, al otro lado de donde el extraño seguí probando  mi piel. La punta de su lengua acaricio el arco de mi oreja y temblé. 

-Tengo tantas ganas de follarte, justo ahora- dijo en mi oído. 

Entonces ambos me apretujaron, la erección de Nick presionando contra mi vientre y la del extraño contra mi trasero. 

Me movió contra ambos, mis bragas era un maldito desastre húmedo, quería ambos, quería que Nick me follara, pero Jesús! también quería que el extraño me follara