Capítulo 24: Solo contigo quiero estar

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Alisha

Los días pasan con felicidad, mi alegría es enorme y tener este anillo en mi dedo me emociona de muchas maneras.

Camino por las calles para dirigirme a mi trabajo, miro mi mano izquierda con orgullo y veo pasar a varios hombres que me miran.

¡Este anillo es la gloria!

Se acercan a insinuarse pero se detienen al verlo. Ahí tienen cavernícolas, lo siento, pero soy una mujer felizmente comprometida, ya no me pueden confundir con una puta ¡Ja! Imbéciles.

¿Por qué no se me ocurrio esto antes? ¡Ah, cierto! No tenía a mi Ronny ¡Oh, el amor! Estoy tan cursi. Pero ni me importa.

Voy con una sonrisa en el rostro hasta entrar en la agencia.

Me quedo tildada un momento.

¡¿Qué hace él aquí?!

Recapitulemos...

Cuando conocí a Mark, no sólo lo conocí a él. No nos olvidemos quién estaba en la "escena del crimen", un malnacido que intento propasarse conmigo y Mark lo apartó de mí. Si mal no recuerdo, se conocían.

Otra mentira que se le olvidó nombrar al malparido del padre de mi hijo.

—¿Qué te da derecho a aparecerte por aquí? —me pongo a la defensiva, normal en mí.

—Tranquila preciosa, el asunto no es contigo, aún —mueve las cejas y se muerde el labio inferior para mirarme de pies a cabeza. Imbécil.

—Ethan —oigo atrás mío y veo cómo el anciano jefe viejo verde se acerca.

—Abuelo —sonríe y me giro a mirarlo fijo.

¡¿Qué?! ¡Otro nieto no y menos este! Eso quiere decir que ¿es el hermano de Mark? O su primo.

De cualquier forma es su familiar, ¡Puto Mark, te odio! Otra cosa más a su lista de malas acciones.

Mejor lo ignoro y me voy. Soy detenida por la cintura.

—Soy feliz de verte otra vez —susurra en mi oído y presiona su cuerpo contra el mío como la primera vez que nos vimos ¡Asqueroso! —preciosa —huele mi cabello.

¡¿No le importa ni siquiera que este su abuelo mirando?!

Considerando como es el viejo, creo que es poco probable que sea importante. De todas formas, esto es vergonzoso.

—¡Sueltame! —forcejeo y noto como su mano baja hasta mi pollera —¡No! ¡¿Qué haces?! —grito molesta.

—Bueno, parece que están ocupados, yo me retiro —el tonto de mi jefe se va.

¡Hijo de re mil, ayúdeme en vez de irse!

—Claro abuelo —lo saluda y regresa a toquetearme —creo que tú y yo tenemos algo pendiente —muerde mi oreja.

—¡Ah! Animal, soy una mujer embarazada ¡Dejame! —vamos a lo lógico, a ver si se apiada de mí.

—¿Qué? Mejor entonces, dicen que las mujeres cuando están embarazadas, se ponen más cachondas por culpa de las hormonas.

Voy de mal en peor.

—¡Sueltame! ¡Soy una mujer comprometida! —opción dos.

—No es importante —agarra la tirita de mi tanga y comienza a bajarla.

—La violación es un delito... —¿Qué más decir? Pero ya sé su respuesta.

Siempre que digo eso contestan lo mismo.

—Con tu aspecto, obviamente me van a creer a mí, obvio tú me incitaste a hacerlo —lo mismo, siempre es esa respuesta.

Putos cavernícolas, ¿Dónde tengo la solución para esto? ¡Yo no hice nada!

—N... No toques —siento su mano bajar.

—Vamos, si a ti te gustan este tipo de cosas —se ríe y no me suelta.

¡¿Qué tienen los hombres con esas creencias de que yo quiero esto?!

¡Es claro que no!

Yo solo quiero a un hombre y ese hombre es...

—Suelta a mi prometida ahora —oigo a nuestras espaldas una voz enojada y mi corazón se acelera al reconocerlo.

Siento que lo llame con la mente.

—Ronny... —me ruborizo.

A Ethan no le queda otra que soltarme.

—Tranquilo, no le hice nada.

Ronny lo mira con furia en sus ojos.

—Más te vale —lo fulmina con la mirada y el idiota se acobarda ante su presencia.

Debo decir que mi hombre de está forma también me remueve las mariposas ¡Ronny celoso y protector! ¡Me encanta!

—¿Que sucede aquí? —nos giramos y veo entrar a Mark por la puerta principal de la agencia.

—Sucede que renunciamos —escucho a Ronny determinado y dominante.

¡Estoy sorprendida! ¡¿Qué?!

—¿Disculpa? —queda confuso.

—Eso, que renunciamos.

—Espera ¡No puedes tomar esa decisión por mí! —me enojo.

—No voy a tolerar ni un segundo más este trato hacia ti —me observa y luego vuelve a mirar a Mark —así que renunciamos. Es mi última palabra -- agarra mi mano y me saca de allí.

Me quedo sin palabras.

Por un lado, es muy lindo lo que dice pero por el otro ¡El trabajo es importante!

—Ronny, no puedes decidir esto ¡Así! Tan apresuradamente... —le replico.

—Está decidido y se terminó la conversación —me corta la oportunidad de hablar, veo su ceño fruncido, se encuentra enojado, una de las pocas veces que lo veo así, me río —¿Eh? —me mira confundido —¿Qué pasa?

—Me encanta cuando te pones en dominante —lo beso.

—Alisha —se sonroja, que lindo.

—¡Bien! Acepto, acepto tus condiciones ¿Y ahora qué? —sonrío.

—Pues... —me abraza por la cintura —armemos nuestro nido de amor.

—Huy Ronny romántico está aquí —lo vuelvo a besar.

—Para ti, siempre.

Seguimos unos cuantos besos más y nos sentimos plenos, llenos de amor.

Esto no es atracción física, esto es amor, amor de verdad.

Fin

No te vayas, queda el epílogo ;)

Atracción físicaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora